Vuelven las sonrisas al Sevilla FC tras certificar su permanencia
Alivio y buen ambiente. El Sevilla FC ha vuelto al trabajo con la tranquilidad de tener la permanencia asegurada tras la derrota del Leganés ante el Villarreal el pasado miércoles. Las matemáticas por fin acompañan al cuadro dirigido por Joaquín Caparrós , que tendrán que medirse este próximo domingo al Real Madrid en el Sánchez-Pizjuán. Un partido que estará marcado por las protestas promovidas por varios sectores de la afición , que quieren aprovechar el escenario para dejar patente su gran descontento contra la gestión de la actual directiva sevillista. El debacle deportivo del equipo en los últimos años y la ruinosa situación económica del club ha generado un clima de tensión que alcanzó su culmen el pasado sábado en la ciudad deportiva del Sevilla. Ahora, con la salvación atada, la afición seguirá con sus protestas durante este partido correspondiente a la jornada 37 de LaLiga. Un duelo en el que es duda Kike Salas , el cual sufre una sobrecarga muscular y tuvo que ser sustituido en el duelo ante Las Palmas. De ahí que se haya ausentado este jueves en la sesión de entrenamiento, en el que tampoco han estado Djibril Sow ni García Pascual. Estas bajas se unen a las de Akor Adams, Rubén Vargas y Nianzou. No obstante, aún quedan dos sesiones más por delante para determinar si el suizo y el malagueño podrán o no estar disponibles ante el Real Madrid. Lo que sí se ha visto este jueves en la ciudad deportiva es un ambiente más relajado y a los jugadores del Sevilla entrenando con sonrisas y bromas cómplices con Joaquín Caparrós. Lo propio tras quitarse la pesada losa de encadenar ocho partidos sin ganar. Ahora, el cuadro blanquirrojo mira al partido del domingo sin la tensión de las responsabilidades y con la idea de intentar competirle a los de Ancelotti. El conjunto madridista podría perder hoy cualquier opción de ganar la competición liguera si el Barcelona se impone al Espanyol esta noche en Cornellá.
-U75043131385idM-1024x512@diario_abc.jpeg)
Alivio y buen ambiente. El Sevilla FC ha vuelto al trabajo con la tranquilidad de tener la permanencia asegurada tras la derrota del Leganés ante el Villarreal el pasado miércoles. Las matemáticas por fin acompañan al cuadro dirigido por Joaquín Caparrós , que tendrán que medirse este próximo domingo al Real Madrid en el Sánchez-Pizjuán. Un partido que estará marcado por las protestas promovidas por varios sectores de la afición , que quieren aprovechar el escenario para dejar patente su gran descontento contra la gestión de la actual directiva sevillista. El debacle deportivo del equipo en los últimos años y la ruinosa situación económica del club ha generado un clima de tensión que alcanzó su culmen el pasado sábado en la ciudad deportiva del Sevilla. Ahora, con la salvación atada, la afición seguirá con sus protestas durante este partido correspondiente a la jornada 37 de LaLiga. Un duelo en el que es duda Kike Salas , el cual sufre una sobrecarga muscular y tuvo que ser sustituido en el duelo ante Las Palmas. De ahí que se haya ausentado este jueves en la sesión de entrenamiento, en el que tampoco han estado Djibril Sow ni García Pascual. Estas bajas se unen a las de Akor Adams, Rubén Vargas y Nianzou. No obstante, aún quedan dos sesiones más por delante para determinar si el suizo y el malagueño podrán o no estar disponibles ante el Real Madrid. Lo que sí se ha visto este jueves en la ciudad deportiva es un ambiente más relajado y a los jugadores del Sevilla entrenando con sonrisas y bromas cómplices con Joaquín Caparrós. Lo propio tras quitarse la pesada losa de encadenar ocho partidos sin ganar. Ahora, el cuadro blanquirrojo mira al partido del domingo sin la tensión de las responsabilidades y con la idea de intentar competirle a los de Ancelotti. El conjunto madridista podría perder hoy cualquier opción de ganar la competición liguera si el Barcelona se impone al Espanyol esta noche en Cornellá.
