Roomba 205 DustCompactor: Análisis en profundidad

iRobot ha querido dar un salto cualitativo en su gama inferior con el nuevo Roomba 205 DustCompactor Combo, un robot...

May 10, 2025 - 21:12
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Roomba 205 DustCompactor: Análisis en profundidad

iRobot ha querido dar un salto cualitativo en su gama inferior con el nuevo Roomba 205 DustCompactor Combo, un robot aspirador y friegasuelos que promete revolucionar la experiencia doméstica gracias a su innovador sistema de compactación de residuos. Tras varias semanas de uso intensivo, te cuento en detalle cómo ha sido convivir con este robot, sus puntos fuertes, debilidades y si realmente marca un antes y un después en el sector.

Diseño: elegancia funcional y discreción total

El Roomba 205 DustCompactor se presenta con un diseño que destila modernidad y sobriedad a partes iguales. La carcasa, de líneas suaves y acabados mate, se integra perfectamente en cualquier estancia, evitando el aspecto “industrial” de otros robots aspiradores. Sus dimensiones (35,9 x 35,8 x 10,1 cm) y peso (3,83 kg) lo hacen lo suficientemente compacto como para deslizarse bajo muebles bajos, algo que agradecen quienes viven en pisos con espacio limitado. Este perfil bajo es posible gracias a la integración del sistema LiDAR ClearView™ en el interior del chasis, eliminando la clásica “torreta” que tantos dolores de cabeza ha dado a los usuarios con muebles bajos.

El minimalismo también se traslada a la base de carga, que prescinde de la voluminosa estación de autovaciado. Aquí, la innovación del DustCompactor cobra protagonismo: el propio robot compacta la suciedad en su interior, permitiendo hasta 60 días de uso sin vaciado. Un verdadero alivio para quienes buscan máxima autonomía y odian lidiar con bolsas y depósitos cada semana.

Sistema de limpieza: potencia y versatilidad en cuatro fases

Este Roomba 205 DustCompactor Combo apuesta por una limpieza en cuatro fases que combina:

  • Succión de alta potencia (hasta 70 veces superior a la serie 600 de iRobot)

  • Cepillo de goma multisuperficie, ideal para evitar enredos y recoger desde polvo fino hasta pelos de mascotas

  • Cepillo para esquinas y bordes, que arrastra la suciedad de los rincones más inaccesibles

  • Mopa de microfibra, que remata el trabajo dejando los suelos brillantes y sin marcas

En la práctica, el rendimiento es sobresaliente tanto en suelos duros como en alfombras de pelo corto. La potencia de aspiración es capaz de enfrentarse sin despeinarse a migas, arena, pelos y hasta pequeñas piedras, algo que en otros modelos requería varias pasadas. El cepillo de goma demuestra su eficacia especialmente en casas con mascotas, donde los pelos suelen ser el gran enemigo de los robots aspiradores.

Compactación de residuos: la auténtica revolución

La gran novedad de este modelo es, sin duda, su sistema de compactación de residuos. Un brazo mecánico interno tritura y comprime la suciedad recogida, permitiendo almacenar hasta 1,8 litros de polvo y basyra en un depósito que, según el fabricante, puede aguantar hasta 60 días sin vaciado. En la experiencia real, este dato depende mucho del tamaño de la vivienda y la cantidad de suciedad diaria, pero en un piso de 80 m² con un gato y un bebé, el depósito ha aguantado sin problemas algo más de un mes.

El proceso de vaciado es sencillo y limpio: basta con extraer el depósito y tirar el bloque compacto de suciedad. Se acabaron los “nubarrones” de polvo al vaciar, y la frecuencia de mantenimiento se reduce notablemente. Es, sin duda, una solución brillante para quienes no quieren bases de autovaciado por falta de espacio o estética.

Fregado inteligente: SmartScrub y gestión del agua

El sistema de fregado del Roomba 205 DustCompactor Combo está a la altura, aunque es una alternativa que me sigue sin convencer. La mopa de microfibra, alimentada por una microbomba que regula el flujo de agua o fregasuelos, mantiene la humedad constante durante toda la sesión de limpieza. El modo SmartScrub, exclusivo de la marca, permite una limpieza dos veces más profunda en zonas que consideramos más sucias, como la cocina o la entrada.

Un detalle crucial: el robot detecta automáticamente las alfombras y evita pasar la mopa sobre ellas, protegiendo los tejidos y evitando “desastres” en el salón. Esta función, que no todos los robots del mercado ofrecen, es imprescindible para hogares con varias superficies.

La capacidad del depósito de agua (180 ml) es suficiente para limpiar un piso mediano de una sola pasada. El mantenimiento de la mopa es sencillo: se extrae, se lava y está lista para el siguiente uso. Sin embargo, a diferencia del cubo de residuos, este sistema de fregado requiere un mantenimiento constante.

Navegación y mapeo: precisión LiDAR y personalización total

Uno de los puntos fuertes del Roomba 205 DustCompactor es su sistema de navegación ClearView LiDAR. Con él, la Roomba mapea la vivienda en cuestión de 10 ó 15 minutos, creando un plano detallado que se visualiza en la aplicación Roomba Home. La navegación es ordenada, eficiente y evita obstáculos con solvencia, incluso en condiciones de poca luz.

Desde la aplicación podremos:

  • Programar limpiezas por habitaciones o zonas específicas

  • Crear zonas de exclusión para evitar áreas delicadas (comedero de mascotas, juguetes, etc.)

  • Ajustar el número de pasadas, la potencia de succión y la cantidad de agua para el fregado

  • Consultar el estado de los consumibles (filtros, cepillos, mopa)

  • Recibir estimaciones de tiempo y notificaciones de mantenimiento

La personalización es máxima, permitiendo adaptar la limpieza a rutinas diarias, eventos puntuales o zonas de alto tránsito. Además, la integración con asistentes de voz (Alexa y Google Assistant) facilita el día a día, algo que se agradece cuando apuestas por un hogar inteligente.

Autonomía y batería: limpieza sin interrupciones

El Roomba 205 DustCompactor Combo equipa una batería LFP de 3.000 mAh, que proporciona hasta 3 horas de autonomía en condiciones óptimas. En la práctica, esto se traduce en la capacidad de limpiar pisos grandes (100-120 m²) de una sola pasada, incluso combinando aspirado y fregado. Si la batería se agota a mitad de limpieza, el robot regresa automáticamente a la base de carga y reanuda el trabajo donde lo dejó, sin intervención del usuario.

El tiempo de carga ronda las 2,5 horas, y la gestión energética es eficiente, priorizando las zonas más sucias o transitadas según el mapa inteligente.

Opinión del editor

Tras semanas de uso, el Roomba 205 DustCompactor se consolida como uno de los robots más avanzados y prácticos del mercado en su rango de precio. Su sistema de compactación de residuos marca un antes y un después, eliminando la necesidad de bases voluminosas y reduciendo el mantenimiento a la mínima expresión. La potencia de succión y la navegación rápida convierten la limpieza del hogar en una tarea que, por fin, puedes olvidar.

Si buscas un robot aspirador realmente autónomo, eficiente y con un diseño que se integra en cualquier hogar, el Roomba 205 DustCompactor es, sin duda, una apuesta segura.

Pros

  • Sistema LiDAR
  • El compactador funciona eficientemente
  • Evita la estación de vaciado

Contras

  • El fregado es mejorable
  • La app es algo compleja