De entre los partidos y goles icónicos de la historia del Barça, la final de la
Recopa de Basilea del 16 de mayo de
1979 en Basilea ocupa un lugar de leyenda. El
4-3 al Fortuna de Dusseldorf fue tan histórico como inolvidable porque además de conseguir el título, el Barça fue protagonista de un hito sin precedentes: la presencia de más de 15.000 seguidores en las gradas del estadio de Saint Jakobs, haciendo ondear banderas blaugrana y senyeras. De ambiente “indescriptible”, se calificó en las páginas de nuestro diario.
Seguir leyendo...]]>