Kicillof en problemas, el PRO desilachado y La Libertad Avanza sin estructura

Axel Kicillof no va a llamar a Cristina Kirchner. Ella, mucho menos. El único que interactúa con ambos es Sergio Massa, quien por diversos motivos, excusas de ambos bandos, debió levantar las reuniones que podrían haberse realizado. Por eso no extraña que en la legislatura bonaerense, una semana después de la apertura de sesiones y del discurso del gobernador pidiendo que sus diputados y senadores debatan la posible suspensión de las PASO en tierras provinciales, nada haya avanzado. Ayer se produjo el primer encuentro de la comisión que trataría la reforma política. La reunión tardó menos de media hora. "Espera que averiguo, ya habrá terminado" le dijo casi en sorna un especialista que conoce el juego a El Cronista. Eran las 14.30 del jueves. La hora de la convocatoria estaba prevista para las 14.00.Opinión Dolor más política: dolor al cuadrado Nuria AmPor fuera de ese mundo que no domina, Kicillof empieza a promover una musculatura adicional para su movimiento Derecho al Futuro. Ayer se conoció un documento firmado por más de cien artistas y escritores apoyando su proyecto, casi los mismos que hace algunos años aparecían en las solicitadas de CFK. Si el oficialismo está complicado, la oposición también lo está en el ámbito bonaerense. Diariamente aparecen miniexplosiones internas y tensiones dentro de La Libertad Avanza provocado por la desconfianza que empiezan a tener sobre su futuro los dirigentes cercanos a Sebastián Pareja. Inclusive el presidente de LLA empieza a notar que aparecen algunos fantasmas que antes no percibía, inclusive dentro de las cercanías de Karina Milei. No solo le desfinanciaron la Secretaría de Infraestructura Socio Urbana que maneja. Cada vez que existe la chance de ocupar un cargo en la Casa Rosada, esa decisión se dilata hasta esfumarse. "Si no lo empoderan nos están entregando a todos los que lo bancamos desde un inicio al matadero", creen sus delegados coordinadores bonaerenses. El arribo de Diego Valenzuela, más el posible desembarco de Diego Santilli y Guillermo Montenegro impondría una reconfiguración que los tiene a ellos como primeras víctimas. "Al obligarlos a pintarse de violeta, los hace entrar a una casa que antes manejábamos con tranquilidad. Y si tampoco podemos ir a unas PASO para definir qué pasa en cada pueblo y sección electoral, listo, esto será una puerta 12", reconoce uno de los más conocedores de la interna libertaria. Patricia Bullrich, personal y a través de segundas líneas, advierte que "si no compatibilizamos los mensajes con los candidatos, la gente no va a entender". Por eso cada vez suma más gente que trabajó con ella en la campaña del PRO y recibe en su ministerio a concejales que la tuvieron como candidata hace casi un año atrás cuando compitió contra Horacio Rodríguez Larreta. Debido a cierta falta de decisión sobre qué hacer en la Provincia de Buenos Aires, donde la mayor dedicación está puesta en deshilachar al PRO antes que crecer con su propia estructura, muchos libertarios originales ahora están buscando nuevos destinos con antiguos socios como Fernando Rozas y Carlos Kikcuchi, dueños del sello Unión Renovación y Fe. Llamó la atención la convocatoria realizada hace una semana en General Rodríguez, en la que hubo una importante cantidad de legisladores provinciales y concejales de todos los distritos del Gran Buenos Aires. "Es que nunca nos llamaron para saber si queríamos participar de la futura alianza libertaria. Tampoco nos bajan recursos ni nos permiten utilizar las oficinas de ANSES, ARCA, RENAPER o Trabajo para resolver urgencias de nuestra gente", empezó el relato uno de los que estuvo en la juntada. "Todos se los dan a la gente de Pareja o Ritondo. Y ellos tienen la orden de no recibirnos", se quejan. Mientras tanto, aún nadie sabe por qué motivo tirotearon el auto en el que transitaba, Irrazabal, el fin de semana pasado, en Avellaneda. Irrazabal había sido desplazado de la UDAI de Gerli hacía un mes producto de la feroz interna que tienen en la zona sur y oeste del Gran Buenos Aires el coordinador, Fabrizio Martínez, ex jefe de la barra brava del Deportivo Laferrere, con los dirigentes locales. Las dudas del PRO y la UCREn lo que era Juntos por el Cambio, en tanto, se aproxima la hora de definiciones. El desdoblamiento electoral de la Ciudad Autónoma adelantó todos los tiempos. Y quienes quieren una unidad entre el PRO y los libertarios cada vez quedan más desacomodados. Por eso el apuro y la insistencia puesta de manifiesto por Diego Santilli en una reunión realizada el miércoles con sus referentes territoriales, a los que les pidió su apoyo para dar el salto al mundo violeta. Sin embargo, ese acuerdo no tendría ningún contrato ni letra chica para ser refrendado. Es pasarse y nada más. Ni cargos ni promesas. "Es como si nos hicieran pasar por un purgatorio para ver adonde terminamos", se confesó un comensal del encuentro. Quizás por eso ayer, en el escándalo legislativo en el que diputados y diputadas "libertaries" se agarraban a t

Mar 15, 2025 - 11:20
 0
Kicillof en problemas, el PRO desilachado y La Libertad Avanza sin estructura

Axel Kicillof no va a llamar a Cristina Kirchner. Ella, mucho menos. El único que interactúa con ambos es Sergio Massa, quien por diversos motivos, excusas de ambos bandos, debió levantar las reuniones que podrían haberse realizado. Por eso no extraña que en la legislatura bonaerense, una semana después de la apertura de sesiones y del discurso del gobernador pidiendo que sus diputados y senadores debatan la posible suspensión de las PASO en tierras provinciales, nada haya avanzado.

Ayer se produjo el primer encuentro de la comisión que trataría la reforma política. La reunión tardó menos de media hora. "Espera que averiguo, ya habrá terminado" le dijo casi en sorna un especialista que conoce el juego a El Cronista. Eran las 14.30 del jueves. La hora de la convocatoria estaba prevista para las 14.00.

Por fuera de ese mundo que no domina, Kicillof empieza a promover una musculatura adicional para su movimiento Derecho al Futuro. Ayer se conoció un documento firmado por más de cien artistas y escritores apoyando su proyecto, casi los mismos que hace algunos años aparecían en las solicitadas de CFK.

Si el oficialismo está complicado, la oposición también lo está en el ámbito bonaerense. Diariamente aparecen miniexplosiones internas y tensiones dentro de La Libertad Avanza provocado por la desconfianza que empiezan a tener sobre su futuro los dirigentes cercanos a Sebastián Pareja. Inclusive el presidente de LLA empieza a notar que aparecen algunos fantasmas que antes no percibía, inclusive dentro de las cercanías de Karina Milei.

No solo le desfinanciaron la Secretaría de Infraestructura Socio Urbana que maneja. Cada vez que existe la chance de ocupar un cargo en la Casa Rosada, esa decisión se dilata hasta esfumarse. "Si no lo empoderan nos están entregando a todos los que lo bancamos desde un inicio al matadero", creen sus delegados coordinadores bonaerenses. El arribo de Diego Valenzuela, más el posible desembarco de Diego Santilli y Guillermo Montenegro impondría una reconfiguración que los tiene a ellos como primeras víctimas.

"Al obligarlos a pintarse de violeta, los hace entrar a una casa que antes manejábamos con tranquilidad. Y si tampoco podemos ir a unas PASO para definir qué pasa en cada pueblo y sección electoral, listo, esto será una puerta 12", reconoce uno de los más conocedores de la interna libertaria.

Patricia Bullrich, personal y a través de segundas líneas, advierte que "si no compatibilizamos los mensajes con los candidatos, la gente no va a entender". Por eso cada vez suma más gente que trabajó con ella en la campaña del PRO y recibe en su ministerio a concejales que la tuvieron como candidata hace casi un año atrás cuando compitió contra Horacio Rodríguez Larreta.

Debido a cierta falta de decisión sobre qué hacer en la Provincia de Buenos Aires, donde la mayor dedicación está puesta en deshilachar al PRO antes que crecer con su propia estructura, muchos libertarios originales ahora están buscando nuevos destinos con antiguos socios como Fernando Rozas y Carlos Kikcuchi, dueños del sello Unión Renovación y Fe.

Llamó la atención la convocatoria realizada hace una semana en General Rodríguez, en la que hubo una importante cantidad de legisladores provinciales y concejales de todos los distritos del Gran Buenos Aires. "Es que nunca nos llamaron para saber si queríamos participar de la futura alianza libertaria. Tampoco nos bajan recursos ni nos permiten utilizar las oficinas de ANSES, ARCA, RENAPER o Trabajo para resolver urgencias de nuestra gente", empezó el relato uno de los que estuvo en la juntada.

"Todos se los dan a la gente de Pareja o Ritondo. Y ellos tienen la orden de no recibirnos", se quejan. Mientras tanto, aún nadie sabe por qué motivo tirotearon el auto en el que transitaba, Irrazabal, el fin de semana pasado, en Avellaneda. Irrazabal había sido desplazado de la UDAI de Gerli hacía un mes producto de la feroz interna que tienen en la zona sur y oeste del Gran Buenos Aires el coordinador, Fabrizio Martínez, ex jefe de la barra brava del Deportivo Laferrere, con los dirigentes locales.

Las dudas del PRO y la UCR

En lo que era Juntos por el Cambio, en tanto, se aproxima la hora de definiciones. El desdoblamiento electoral de la Ciudad Autónoma adelantó todos los tiempos. Y quienes quieren una unidad entre el PRO y los libertarios cada vez quedan más desacomodados. Por eso el apuro y la insistencia puesta de manifiesto por Diego Santilli en una reunión realizada el miércoles con sus referentes territoriales, a los que les pidió su apoyo para dar el salto al mundo violeta.

Sin embargo, ese acuerdo no tendría ningún contrato ni letra chica para ser refrendado. Es pasarse y nada más. Ni cargos ni promesas. "Es como si nos hicieran pasar por un purgatorio para ver adonde terminamos", se confesó un comensal del encuentro.

Quizás por eso ayer, en el escándalo legislativo en el que diputados y diputadas "libertaries" se agarraban a trompadas o se tiraban con lo que tenían a mano por diferentes cargos en las comisiones de trabajo parlamentario, ni Cristian Ritondo, Silvia Lospenato ni el propio Santilli movieron un músculo para ayudar, como suelen hacer, para que Martín Menem tuviera una sesión ordenada. Tal fue el desmadre que, a modo de amenaza, desde las bancadas no libertarias se escuchaba el grito de "Monzó, Monzó". Emilio, al él se referían, quedó en la historia como el más armonioso componedor de las discusiones legislativas. Su mandato finaliza a fin de año.

Las autoridades del PRO y la UCR tienen prevista una juntada general para la próxima semana, aunque las dudas los aborden todos los días. Mientras los primeros temen que los libertarios lo interpreten como una ruptura definitiva, la alternativa que buscan es que solo se presenten las autoridades partidarias escondiendo a los intendentes, que están desesperados con las miserias de no saber qué pasaría en sus concejos deliberantes en caso de perder la elección de medio término.

En cuanto a los radicales, ayer cayó una bomba. La Cámara Electoral resolvió que deben realizarse nuevas elecciones en distritos donde el oficialismo comandado por Maximiliano Abad y Miguel Fernández dijo que hubo irregularidades, como Quilmes, La Matanza y Ezeiza pero también le obliga al juez de primera instancia, Alejo Ramos Padilla, que revise lo actuado sobre Tigre y San Martín, en las que la gente de Fernández se proclamaron vencedores.

Los jefes comunales del centenario partido también tienen más dudas que certezas sobre qué hacer de cara al futuro. Quizás una indeterminación general los ayude para tener esa libertad de acción que tanto desean.