Ione Belarra es reelegida secretaria general de Podemos sin oposición con el voto de 27.000 afiliados

No hubo sorpresas: Ione Belarra liderará Podemos durante cuatro años más. Este sábado, el quinto congreso de la formación morada quedó clausurado con el anuncio de que la actual secretaria general revalidará su cargo con el voto del 90% de las 27.172 personas que participaron. La elección ya se daba por descontada, puesto que Belarra y su equipo fueron los únicos que lograron reunir el número de avales suficiente para concurrir a la votación, en la que han podido participar los militantes de Podemos y también sus inscritos en su página web.

El número de personas que participaron es prácticamente la mitad que hace cuatro años, cuando Belarra fue elegida por primera vez secretaria general de Podemos con el voto de casi 54.000 afiliados. Es una buena muestra del desgaste que ha sufrido la formación en los últimos años, especialmente tras la guerra sin cuartel en la que aún sigue embarcada con Sumar. Lejísimos quedan, por su parte, los casi 150.000 militantes que votaron en la asamblea de Vistalegre 2, celebrada en 2017 y en la que Pablo Iglesias afianzó el control del partido tras su enfrentamiento a muerte con su entonces número dos, Íñigo Errejón.

No obstante, las cerca de 27.000 personas que han votado en la asamblea siguen siendo la mayor cifra de militantes de la que puede presumir ningún partido a la izquierda del PSOE. El año pasado, Yolanda Díaz fue elegida líder de Sumar con apenas 8.179 apoyos, y este año, en el congreso que ha celebrado para sustituirla al frente de la organización, Movimiento Sumar ni siquiera ha permitido votar a los afiliados. IU, por su parte, eligió hace nueve meses a Antonio Maíllo como coordinador federal en una votación en la que participaron 8.350 militantes.

En su primer discurso como recién reelegida secretaria general de Podemos, Belarra quiso inyectar moral a una militancia que, dijo, ha mantenido vivo al partido en los "tres últimos años" —desde que Pablo Iglesias dejó el liderazgo de Unidas Podemos en manos de Yolanda Díaz— cuando "todo el mundo lo daba por muerto". "Era su sueño húmedo y casi lo logran: del PP, pero también del PSOE", espetó la líder morada, que aseguró que tanto los socialistas como Sumar quisieron "sustituir a Podemos por una izquierda dócil, que aceptara los límites del bipartidismo, que aceptara el envío de armas a Ucrania" y "que estuviera en el Gobierno sin hacer ruido y sin conseguir nada".

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