Importaciones al rojo vivo: las pymes alertan que ya perdieron mercado, ¿a cuáles alcanza?
Según datos oficiales, entre el mínimo reciente de agosto de 2024 y febrero de 2025, las importaciones crecieron 72% en términos reales y se ubican sólo a 13% del mayor registro en la década

En plena guerra comercial, mientras los aranceles a la importación promete cambios drásticos en el comercio internacional, en Argentina, la desregulación pone a prueba las pymes industriales: el 40% se siente amenazada por el ingreso de productos de otros países.
Los empresarios industriales destacaron que el último valor relevado por el Observatorio Pyme, es similar a la proporción verificada en 2018 (40%), 2016 (39%), 2009 (36%) y 2008 (37%).
Además, indicaron que el 56% de las empresas pyme industriales que identifican a las importaciones como una amenaza observaron una caída de su participación en el mercado interno (23% del total).
"La reducción que hizo el gobierno argentino para la importación de productos como textiles, calzado e indumentaria sin desarrollar previamente una agenda integral de competitividad (financiamiento, baja de impuestos, infraestructura y energía) podría tener un impacto negativo mucho mayor del esperado originalmente", advirtió la Unión Industrial Argentina (UIA).
La sensación de "amenaza", se sustenta en los efectos de un fenómeno que las empresas locales ya advierten. La sustitución de producción local por importaciones en el sector pyme manufacturero afectó al 23% de las firmas locales, según relevó el Observatorio Pyme con datos del IV trimestre 2024.
A la defensiva
"El proceso de desregulación del comercio exterior tiene impactos ambiguos en la producción, por un lado favorece el acceso a insumos, componentes y tecnología pero también incentiva la competencia", explicó el informe del Observatorio PyME.
Aun así, reflejó que en un panorama macroeconómico donde "todavía persisten incógnitas", las pyme manufactureras buscan un nuevo punto de equilibrio. Por ahora, según destacó, predominan las estrategias defensivas de reducción de costos, pérdida de rentabilidad, postergación de inversiones, suspensión y reducción de personal y horas extras.
La tendencia es clara y "preocupante" por su impacto en la pérdida de puestos de trabajo: el 2024 cerró con una baja 5,8% interanual, la mayor baja desde la crisis internacional de 2009.
El origen de la amenaza
Sobre los países que más importaciones están ingresando a la Argentina, el informe destacó que la preocupación gravita en torno a la entrada de productos desde China y Brasil y se duplica la amenaza de Chile.
Además, preocupa la entrada de productos desde otros países limítrofes y también desde los grandes centros industriales de Norteamérica, Unión Europea y resto de Sudeste Asiático.
Entre los sectores más afectados, están bajo riesgo de sustitución por importaciones el 67% de las pyme de la industria textil, cuero y calzado y el 54% de las metalmecánicas.
En el caso de insumos, el 18% de las pyme industriales sustituyó compras locales por importados en el último año y el 30% espera aumentar la importación en 2025.
Sobre el ingreso de productos terminados, el 7% de las pyme industriales reemplazó producción propia por productos importados en 2024 y el 18% prevé un aumento de las compras la exterior en 2025.
Cerca del récord
"Se advierte un aumento acelerado en las importaciones de bienes del total de la economía", aseguró el informe que contó con la participación de 421 pyme manufactureras.
Según las cifras reportadas por INDEC, entre agosto de 2024 (mínimo reciente) y febrero de 2025 las importaciones crecieron un 53% a precios corrientes y un 72% en términos reales.
En la medición a precios corrientes aún no alcanza el máximo histórico (13% por debajo de junio de 2022) mientras que, ajustado por precios, se encuentra en niveles "históricamente elevados", 13% por debajo de junio de 2022.
"Su tendencia alcista refleja una dinámica compleja para la competitividad del sector industrial, en un escenario aún de baja actividad económica", explicó el documento bajo la coordinación de Federico Poli.
Por último, aseguró que "las recientes reducciones arancelarias, junto con las medidas de aliento a las importaciones, crean una presión competitiva sobre las pyme".