Estos son los tipos de amigos que tienes, según la psicología

El círculo de personas cercanas entre los españoles no supera las 23 personas. Hay que saber entender qué tipo de amigos tienes para ser más feliz

May 10, 2025 - 19:00
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Estos son los tipos de amigos que tienes, según la psicología

Hay amigos a los que no hace falta ni hablar para saber qué están pensando; otros que aunque estén lejos se sienten cercanos; algunos que pasan por tu vida por un tiempo y luego no son imprescindibles. En definitiva, la amistad es una de las relaciones humanas más significativas y, a la vez, más complejas. 

A lo largo de la vida, las personas se encuentran con distintos tipos de amigos, cuyas características y actitudes pueden influir positiva o negativamente en su bienestar emocional, social y hasta físico. No todos los amigos son iguales, y aprender a reconocer los distintos tipos puede ayudarnos a construir relaciones más sanas y auténticas. 

Las amistades son relaciones vivas, dinámicas y complejas. Algunas nos construyen, otras nos desgastan. Identificar el tipo de amigos que tenemos y el tipo de amigos que somos es un ejercicio de autoconocimiento necesario para crecer personalmente y cuidar nuestra salud emocional.

Según un estudio de la Fundación LaCaixa, el círculo de familiares y amigos íntimos es de unas 23 personas. El de conocidos, pese a ser tradicionalmente menos valorado, también tiene la capacidad de ofrecer apoyo emocional y económico.

No todos los amigos pueden ser leales o sabios, pero vale la pena rodearse de aquellos que suman y aprender a poner límites o despedirse de quienes restan. A fin de cuentas, la amistad, como cualquier vínculo humano, se basa en respeto, sinceridad y reciprocidad. Tener uno o dos amigos verdaderos es más valioso que rodearse de una multitud sin vínculos reales.

Los amigos de verdad son los que están en lo bueno y en lo malo.Los amigos de verdad son los que están en lo bueno y en lo malo. Foto: Pixabay.

Tipos de amigos

1. El amigo leal. El amigo leal es, sin duda, el más valioso. Es aquel que permanece a tu lado en los momentos buenos y, sobre todo, en los malos. La lealtad se traduce en confianza, honestidad y apoyo constante. Este tipo de amigo no necesita verte todos los días para seguir conectado contigo. Está presente emocionalmente, escucha sin juzgar, guarda tus secretos y actúa con empatía. En tiempos de crisis, no desaparece: se convierte en un refugio.

Tener un amigo leal es como tener un hermano que se elige. La relación se basa en la reciprocidad y en el deseo sincero del bien mutuo. Con ellos, la amistad trasciende el tiempo y la distancia.

2. El amigo consejero. Este amigo tiene un don para escuchar con atención y ofrecer consejos prudentes. Suelen ser personas maduras, reflexivas y empáticas. Aunque no siempre están en el centro de los planes sociales, cuando los necesitas, ahí aparecen. Su amistad se expresa en orientación y acompañamiento en la toma de decisiones importantes.

Son quienes ayudan a ver las cosas desde otra perspectiva y, aunque a veces sus verdades duelan, sus palabras nacen del cariño y la preocupación genuina. Este tipo de amigo no te dice lo que quieres oír, sino lo que necesitas escuchar.

3. El amigo divertido o el alma de la fiesta. No todos los amigos tienen que ser profundos. El amigo divertido es el que siempre está listo para sacarte una sonrisa, incluso en los días más grises. Su presencia aligera los problemas y transforma lo cotidiano en una experiencia entretenida. Con él o ella, las reuniones son memorables. Aunque puede no ser la persona más confiable para una conversación seria o para confiarle secretos delicados, su valor está en recordarte que la vida también se disfruta, se ríe y se celebra.

4. El amigo protector. Este amigo asume casi un rol paternal o maternal. Se preocupa por ti como si fueras parte de su familia. Es quien se asegura de que llegues bien a casa, quien te defiende cuando alguien te ataca y quien pone límites a quienes intentan dañarte. En muchas ocasiones, este tipo de amigo puede llegar a ser sobreprotector, pero siempre actúa desde el amor. Su presencia te hace sentir seguro. Aunque a veces puede cruzar la línea del control, si hay confianza, la relación se equilibra fácilmente.

5. El amigo motivador. El amigo motivador es una fuente constante de energía positiva. Cree en ti incluso cuando tú no lo haces, y te empuja a superar tus límites. Este tipo de amigo celebra tus logros con entusiasmo y minimiza tus fracasos para recordarte tu valor. Son personas que te inspiran, que te animan a crecer, a tomar riesgos, y que ven oportunidades donde tú ves problemas. Su compañía es especialmente útil en momentos de cambio o transformación personal.

6. El amigo de toda la vida. Este amigo ha estado presente desde la infancia o adolescencia. Aunque las personas cambian con los años, esta amistad perdura. Comparten recuerdos, anécdotas y un pasado común que les da una base sólida. A veces la vida os aleja, pero cuando os volvéis a encontrar, la conexión sigue intacta. Estas amistades representan raíces emocionales profundas. Aunque no siempre evolucionan al mismo ritmo que tú, su historia compartida les da un lugar único en tu vida.

Si tienes amigos tóxicos, huye cuanto antes de ellos.Si tienes amigos tóxicos, huye cuanto antes de ellos. Foto: Pixabay.

7. El amigo circunstancial. Este es el tipo de amigo con el que compartes una etapa específica: puede ser un compañero de universidad, un colega de trabajo o un vecino con quien tienes afinidad temporal. Aunque la relación puede ser sincera, está limitada a un contexto. Cuando ese contexto desaparece, la amistad muchas veces se desvanece también. Esto no la hace menos valiosa, pero sí más frágil. Las amistades circunstanciales cumplen funciones importantes, como hacer más llevadero un trabajo difícil o ayudarte a adaptarte a un entorno nuevo.

8. El amigo competitivo. Este amigo parece estar en constante comparación contigo. En lugar de celebrar tus logros, los relativiza o trata de superarlos. Puede ser sutil o evidente, pero siempre hay una tensión latente. Esta competencia puede ser estimulante si es sana, pero si se convierte en una lucha de egos, termina desgastando la relación. La amistad con alguien competitivo puede generar inseguridad o resentimiento si no se manejan bien los límites. En muchos casos, esta relación se mantiene por costumbre más que por afecto verdadero.

9. El amigo tóxico. Este tipo de amigo roba energía. Puede ser manipulador, crítico constante, celoso o desleal. A menudo recurre al chantaje emocional y hace que te sientas culpable por establecer límites. Su presencia en tu vida se convierte en una fuente de ansiedad o incomodidad. Aunque pueden tener momentos agradables, el coste emocional suele ser alto. Reconocer una amistad tóxica es difícil porque a menudo existe un lazo emocional fuerte. Sin embargo, si después de pasar tiempo con esa persona te sientes peor que antes, es una señal clara de alarma.

10. El amigo interesado. Este amigo se acerca a ti no por quién eres, sino por lo que puedes ofrecerle. Puede buscar estatus social, favores, contactos, dinero o cualquier otro beneficio. Su trato es cordial y hasta encantador, pero condicionado. Cuando dejas de ser útil para él o ella, desaparece o cambia de actitud. El amigo interesado se revela cuando dejas de complacer sus expectativas. Es una relación utilitaria disfrazada de amistad. En este caso, la mejor decisión es alejarse, porque no hay base emocional genuina.