El Sevilla cae en Balaídos (3-2) y comenza a ver el borde del precipicio

En un partido crucial para ambos equipos el Celta de Vigo logra ganar 3 a 2 a un Sevilla que ahora se juega la permanencia en LaLiga en las últimas tres fechas. El equipo gallego apunta a la Europa mientras el Sevilla se hunde siempre más, llevándo más de dos meses sin conseguir los tres puntos lejos de casa. 

El partido de hoy empezó con el Celta imponiendo su juego, agrediendo y controlando la pelota. A pesar de las posesiones las ocasiones llegaban en ambas áreas. En la bonita lucha por jugar competición europea la próxima campaña, el triunfo de un Celta (séptimo con 49) siempre más 'europeo' aunque se haya quedado con diez en el descuento del primer tiempo.

La roja a Marcos Alonso supuso además la pena máxima que convirtió Nemanja Gudelj en el 1-1, cuando los gallegos se habían adelantado a los 20 minutos con Ilaix Moriba. El guion se puso de cara para los de Joaquín Caparrós, que además del gol habían probado varias veces a Vicente Guaita, pero Balaídos no dejó bajar los brazos a los suyos. Al Sevilla le faltó mordiente, quiso cocinar a fuego lento, y el Celta puso la directa contra pronóstico.

Fran Beltrán, uno de los cambios de Claudio Giráldez para recomponer al equipo, robó el balón y lanzó el ataque del 2-1 de Óscar Mingueza. Guaita frustró a un Sevilla negado una jornada más y Borja Iglesias selló una tarde de gloria en Vigo con un precioso 3-1. Kike Salas, quien más lo buscó, maquilló en el descuento una derrota que mantiene la tensión en los andaluces con los puestos del descenso con los que cuentan con seis puntos de colchón.