El Inter eliminó al Bayern con una polémica a toro pasado

Al Inter, próximo rival del Barça en semifinales, se le está complicado la temporada. Tras su derrota en Bolonia, en la Serie A anda empatado con el Nápoles en lo alto de la clasificación. En las cinco jornadas que quedan para conocer quién se cuelga el ‘Scudetto’ de campeón, los napolitanos tienen un calendario más asequible mientras que el Inter tendrá el desgaste -ilusionante, pero desgaste- de tener que jugar contra el Barça en dos semanas consecutivas. Y los de Inzaghi no andan ya tan finos. En la eliminatoria contra el Bayern, ganaron en Alemania y empataron en San Siro, pero en ambos partidos el rival desplegó mejor fútbol que la compacta escuadra interista. El 2-2 de la vuelta se gestó gracias a dos goles de saque de esquina del conjunto local. En el primero marcó Lautaro Martínez. En el segundo remató el francés Pavard de potentísimo cabezazo. Pero ni el línier, ni el árbitro, ni el VAR estuvieron atentos a una infracción clarísima. Centró Çalhanoglu, con la pierna derecha, desde el corner de la derecha del ataque. Su rosca fue una banana de parábola perfecta… si no fuera porqué el balón rebasó por completo la línea del final del terreno de juego. Ni protestó el Bayern, ni nadie se dio cuenta del gol ilegal que representaba la remontada interista y les ponía en semis.