El increíble reto solidario de un ciclista gallego de completar las tres grandes vueltas seguidas: "Son 6.050 kilómetros"
Javier García Reboredo ha contado a 20minutos cómo realizará esta aventura para visibilizar la Piel de Mariposa

Completar las tres Grandes Vueltas del ciclismo de manera consecutiva por una buena causa, ese es el último reto del ciclista gallego Javier García Reboredo, conocido como @xinolugo. IGARE es un desafío que consiste en hacer el Giro de Italia, el Tour de Francia y La Vuelta a España con el objetivo de dar visibilidad a la Epidermólisis Bullosa, más conocida como Piel de Mariposa, una enfermedad rara y genética que provoca una extrema fragilidad en la piel.
"Este es el quinto año consecutivo que llevo realizando retos a favor de la asociación DEBRA Piel de Mariposa. Un proyecto que surge hace 9 años cuando conocí a mi compañero de trabajo en el Metro de Madrid, Víctor, a su mujer Sara y a su hijo Adrián, quien padece esta enfermedad", comienza contando Javier a 20minutos mediante una llamada telefónica.
Javier recorrerá las mismas etapas oficiales de las tres grandes vueltas del ciclismo profesional, pero en un trayecto que será continuo y autogestionando el transporte, los descansos y la comida. "Este reto lo realizo de manera completamente autosuficiente. La idea de este nuevo proyecto es que traspasase las fronteras de España para con ello darle más visibilidad", apunta.
Asimismo, para que sea factible y no interfiera en las carreras oficiales, comenzará antes que los profesionales: "Salgo un día antes de que empiece el Giro de Italia, es decir, el 8 de mayo. Cada día trato de hacer unos 300 kilómetros de media, depende del perfil del recorrido. En total, son unos 6.050 kilómetros y de desnivel unos 70.000 positivos".
Una aventura que se puede seguir a través de la web oficial, donde se encuentra una ventana de seguimiento de Follow My Challenge para saber cuál es su ubicación en tiempo real, así como la distancia que lleva recorrida. "Ahí se puede seguir la ruta y todo el que quiera unirse y sumar kilómetros es bienvenido", explica Javier.
Un complicado reto para el que se ha tenido que preparar de manera específica: "Es la primera vez que estoy siguiendo un entrenamiento dirigido desde septiembre. Estoy acostumbrado a hacer una prueba de estas al año, pero esta vez he decidido hacerlo dirigido porque es muy duro y tampoco sé cómo va a responder mi cuerpo y cómo me voy a recuperar entre etapas".
Además, las condiciones climatológicas también pueden hacer que sea más complicado: "En Italia seguramente me encuentre tormentas e incluso nieve, pero espero llevar la ropa adecuada y poder afrontarlo sin problemas".
El reto o IGARE cuenta con el apoyo de diversas empresas que han proporcionado material y recursos clave para que Javier pueda llevarlo a cabo, y hay tres formas de colaborar para poder apoyar a las familias afectadas y fomentar la investigación para encontrar una cura.
"Un crowdfunding, la empresa Selo Roupa Bonita, ha creado unas sudaderas que lo que se recaude de la venta de las mismas va destinado al proyecto y también Ruta 29, que me proporciona la ropa que usaré, y parte de lo recaudado también para la Asociación", afirma Javier.