Despedida en San Pedro
El cardenal que viajaba en autobús y que se pagó la pensión romana cuando llegó al cónclave del que salió como Papa ha fallecido casi en directo ante...

El cardenal que viajaba en autobús y que se pagó la pensión romana cuando llegó al cónclave del que salió como Papa ha fallecido casi en directo ante las cámaras de televisión, horas después de recorrer la plaza de San Pedro en papamóvil. Han sido doce años de pontificado bajo los focos. El primer Papa americano; el primero jesuita. No el único en romper moldes –Juan Pablo II cambió la silla gestatoria por las botas de montaña; Benedicto XVI renunció–, ni en ser signo de contradicción –allí donde a Woytila se le tachaba de conservador, a Bergoglio se le tildaba de populista–. En él se depositaron expectativas imposibles –e ilógicas– de modernización en la doctrina, pero va a permanecer su legado social, su llamada a una Iglesia pobre y para los pobres.
Prefería llamarse obispo de Roma a jefe de Estado, pero los políticos de todo signo peregrinaron a Roma –los españoles, obligadamente, ya que este Papa viajero no visitó España–. El último líder, J. D. Vance, vicepresidente católico de Estados Unidos. Francisco, por el santo de Asís, realizó su primera visita fuera del Vaticano hace doce años, a Lampedusa, y este domingo abominó ante el mundo del trato indigno a los inmigrantes. El mismo mensaje para cerrar su pontificado y su vida.