Andor temporada 2 es una obra maestra sin sables láser

En una galaxia donde los sables de luz, los Skywalker y los fanservices dictaban el rumbo de casi todo lo que salía con el logo de Star Wars, Andor ha sido, desde el principio, la excepción. La primera temporada ya dejó claro que aquí se venía a contar otra cosa. Pero lo de la segunda temporada es… otra liga. Una que no sabíamos que necesitábamos, y ahora no queremos que se acabe.

Sí, Andor ya era una obra maestra. Y esta segunda temporada no solo confirma esa sensación: la eleva. La convierte, sin exagerar, en la mejor historia de Star Wars jamás contada en televisión (y probablemente también en cine). Un ejercicio de narrativa política, espionaje, resistencia y humanidad que no tiene rival en el canon moderno de la franquicia.

Una historia sin Jedis, pero con toda la Fuerza narrativa

Desde el primer episodio queda claro que aquí no se juega con las mismas reglas. La serie no se apoya en la nostalgia ni en cameos fáciles. Ni lo necesita. Lo que tiene es un guion brillante, personajes profundos y un universo que se siente vivo, real y, por qué no decirlo, dolorosamente actual.

Cada bloque de tres episodios cubre un año, avanzando con decisión hacia la tragedia inevitable de Rogue One. Pero lo importante no es lo que ya sabemos que ocurrirá, sino cómo llegamos hasta ahí. Y vaya viaje.

Cassian Andor (un Diego Luna excepcional) ya no es un fugitivo, ni un ladrón, ni siquiera un espía renuente. Es el alma de una revolución que apenas comienza a entender. Y lo mejor de todo: a su alrededor se mueven piezas tan bien escritas que uno podría ver temporadas enteras solo sobre Luthen, Dedra, Mon Mothma, Vel o Syril. Todos tienen su conflicto, su sombra, su razón para luchar o para caer.

El lado más oscuro del Imperio… y de la rebelión

La segunda temporada de Andor es todavía más oscura, madura y cruda que la primera. No hay concesiones. Hay tortura, hay propaganda, hay manipulación política, hay abuso de poder. Pero también hay esperanza. Porque esto, al final, sigue siendo Star Wars.

El planeta Ghorman —con su aire de Francia ocupada y su explosión final que recuerda a Los Miserables— es el epicentro de esta temporada, y su desarrollo narrativo es, directamente, lo mejor que ha hecho esta saga en décadas.

La puesta en escena, como siempre, está a un nivel superlativo. Los vestuarios, los escenarios, la ambientación… todo ayuda a que cada rincón del universo se sienta tangible. La música, esta vez a cargo de Brandon Roberts, acompaña con una precisión quirúrgica cada momento emocional, sin estridencias, pero con el impacto que requiere cada giro de guion.

¿La serie mejor valorada de Star Wars? No me extraña

La serie ha recibido una puntuación altísima por parte de la crítica en Rotten Tomatoes, una de las más altas jamás otorgadas a un título de Star Wars. Y es que lo tiene merecido. Cada diálogo, cada plano, cada personaje… todo respira una ambición y una madurez narrativa que rara vez hemos visto en este universo.

Y lo más importante: Andor nunca olvida el corazón de la historia. La lucha de gente común por algo más grande que ellos. El precio de la libertad. El valor de la resistencia, incluso cuando todo parece perdido.

¿Lo peor? Que se acaba

Si hay algo que lamentar en Andor es que sabemos que no habrá más. Esta segunda temporada cierra el arco de Cassian, enlaza con Rogue One y nos deja con un nudo en la garganta. Porque queremos más. No por ansia de contenido, sino porque cuando algo está tan bien hecho, uno no quiere que se termine nunca.

Eso sí, al menos nos queda el consuelo de volver a verla. Porque Andor no es solo una serie: es una lección de cómo contar una historia en el universo Star Wars sin necesidad de espadas láser, ni linajes míticos, ni misticismos. Solo con personas, decisiones difíciles… y una chispa de esperanza.

Andor temporada 2 no solo es televisión de alta calidad. Es un manifiesto de lo que puede llegar a ser Star Wars cuando se pone serio. Una serie que no necesita hacer ruido para dejarte sin palabras. Y que cuando acaba, te hace mirar el universo galáctico con otros ojos.

Los primeros tres episodios ya están disponibles en Disney+. Si aún no lo has hecho, es el momento de ponerte al día con una de las mejores series del año… y de toda la saga.

Esta noticia ha sido publicada por Cinemascomics.com