Ya sabemos que causó el misterioso anillo de luz que se vió en los cielos de Alaska
El 29 de marzo de 2025, un evento inesperado dejó a los habitantes de Alaska y a los observadores del cielo perplejos. Un brillante y extraño anillo de luz apareció en el cielo de esta región. En lugar de tratarse de un fenómeno natural como una aurora o una estrella fugaz, lo que vieron los […]

El 29 de marzo de 2025, un evento inesperado dejó a los habitantes de Alaska y a los observadores del cielo perplejos. Un brillante y extraño anillo de luz apareció en el cielo de esta región.
En lugar de tratarse de un fenómeno natural como una aurora o una estrella fugaz, lo que vieron los observadores fue el resultado de un experimento científico que involucró cohetes sonda. Este evento formaba parte de la misión AWESOME (Auroral Waves Excited by Substorm Onset Magnetic Events), cuyo propósito es desentrañar los secretos de las auroras boreales y su impacto en la atmósfera.
¿Qué causó el anillo de luz?
El anillo brillante fue el resultado del lanzamiento de un cohete sonda como parte de los experimentos del proyecto AWESOME. El cohete fue lanzado desde el Campo de Investigación Poker Flats, una instalación ubicada al norte de Fairbanks, Alaska. Este tipo de cohetes sonda son utilizados para estudiar fenómenos atmosféricos y espaciales, y el anillo luminoso que se formó fue el resultado de los gases de escape del cohete.
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El anillo, según los informes, alcanzó una altura de entre 96 y 120 kilómetros y tenía un diámetro de 24 kilómetros. Mark Conde, el investigador principal del proyecto AWESOME y profesor de física espacial en el Instituto Geofísico Fairbanks de la Universidad de Alaska, describió la imagen como algo “extremadamente brillante y absolutamente imposible de pasar por alto”. La forma perfecta y la nítida visibilidad del anillo lo hicieron un espectáculo impresionante, que rápidamente se convirtió en un tema de conversación.
El proyecto AWESOME
El proyecto AWESOME de la NASA tiene un objetivo ambicioso: comprender cómo las auroras boreales afectan la atmósfera terrestre. Las auroras son conocidas por iluminar los cielos en las regiones polares, pero detrás de su belleza radica un fenómeno complejo que involucra interacciones entre el viento solar, el campo magnético de la Tierra y las partículas cargadas en la atmósfera.
La misión se centró específicamente en cómo las auroras pueden “agitar” la atmósfera superior de la Tierra, algo que no suele ocurrir en las capas más altas. Normalmente, la termosfera (la capa de la atmósfera que se encuentra entre 80 y 550 kilómetros de altura) presenta un gradiente de temperatura inverso, donde las capas superiores son más calientes que las inferiores. Este fenómeno impide que ocurra la convección, que es el movimiento de los fluidos debido a la diferencia de temperatura.
Sin embargo, las auroras pueden alterar este equilibrio. Al liberar grandes cantidades de energía, pueden calentar las capas inferiores de la termosfera y generar un “hervor” en la atmósfera, similar a lo que ocurre con el agua en una olla caliente. Los cohetes sonda lanzados durante el proyecto AWESOME rastrean los movimientos en la atmósfera para entender mejor cómo este proceso afecta la resistencia atmosférica y, por ende, la navegación de los satélites.
Los cohetes sonda en la investigación
Los cohetes sonda utilizados en el proyecto AWESOME están equipados con instrumentos científicos que liberan gases específicos al ser lanzados. Estos gases actúan como rastreadores, permitiendo a los investigadores seguir los movimientos locales en la atmósfera. Este tipo de datos es fundamental para comprender cómo las partículas de la atmósfera se mueven y cómo las auroras afectan la resistencia del aire, lo que a su vez influye en los satélites que orbitan la Tierra.
Mark Conde, quien lideró el lanzamiento de los cohetes, explicó que este tipo de investigaciones también es crucial para la mejora de la tecnología espacial. La comprensión de cómo las auroras afectan la atmósfera y cómo estos fenómenos pueden alterar el comportamiento de los satélites es vital para la navegación y las comunicaciones satelitales.
El anillo de luz: El resultado de un experimento fascinante
El experimento que provocó el anillo de luz visto en Alaska el 29 de marzo no sólo brindó una espectáculo único, sino que también avanzó en nuestra comprensión de las auroras boreales y su impacto en la atmósfera superior. A medida que se analizan los datos, el proyecto promete abrir nuevas puertas en el estudio de la física atmosférica y la mejora de la tecnología espacial.