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Raphinha, protagonista de una temporada espectacular, ya le pregunta por el Balón de Oro hasta
Romario en su canal de TV. Y de crack del Barça a leyenda del Barça, llegó la confesión. "Es normal que se me pase por la cabeza, y si te dijera lo contrario, mentiría. Pero intento dejarlo de lado y centrarme en mis objetivos personales en mi carrera, ya sea marcar goles, dar asistencias o ganar títulos", explicó el delantero azulgrana, a medio camino entre la prudencia y la lógica ambición. En el programa hizo el ritual de tocar las piernas de
Romario para que le traspase sus poderes,
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