Proyecto piloto en Dinamarca demuestra que su nuevo almacenamiento térmico con sales fundidas podría abastecer a 100.000 hogares durante 10 horas
La tecnología utiliza sal hidróxido fundida para almacenar energía de fuentes renovables. Durante la carga, la electricidad se convierte en calor, elevando la temperatura de la sal a 600°C. En la descarga, la sal caliente produce vapor de alta temperatura para aplicaciones industriales o generación de electricidad.
