‘Prescripciones de museos’: Visitar galerías podría ayudar a tu salud, no lo decimos nosotros, lo dice la ciencia

¿Te imaginas que tu médico te recete una ida al museo? Suena a fantasía, pero no lo es tanto. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reconocido oficialmente que las artes —desde visitar una galería hasta pintar o bailar— pueden mejorar la salud física y mental. Según un informe publicado en 2019, involucrarse en actividades culturales no solo eleva la calidad de vida, también ayuda a prevenir enfermedades y a sobrellevar condiciones crónicas.

Visitar museos: no es solo inspiración, es ciencia

El informe analizó más de 3,000 estudios y concluyó que la relación entre arte y bienestar es real. Por ejemplo, se ha demostrado que la música reduce el estrés y fortalece el sistema inmunológico, mientras que la danza mejora la memoria y la coordinación. Incluso visitar un museo, aunque sea una actividad pasiva, puede estimular áreas del cerebro relacionadas con la creatividad, la regulación emocional y la cognición.

@anafarmaceuticareels Un museo puede ser una fuente de salud y en Suiza ya se practica su prescripción. Te cuento como es esto. @anafarmaceutica #anafarmaceutica #farmaciaymusica #farmaciapracticaconcorazon #farmaciapractica #farmaceutica #farmaciaymusicos #musica #música #farmaceuticos #consejofarmaceutico #consejofarmacéutico #consejosaludable #farmacia #ilusion ♬ sonido original – Ana farmaceutica

Y no es exclusivo para artistas. Estos beneficios aplican a cualquier persona, desde jóvenes con ansiedad hasta adultos mayores con demencia. En entornos clínicos, como hospitales y cuidados paliativos, las artes también han demostrado ofrecer consuelo emocional y mejorar la experiencia de pacientes y familias.

¿Y qué recomienda la OMS?

Integrar las artes en los sistemas de salud. Así de simple. La OMS sugiere que los gobiernos diseñen políticas donde la salud y la cultura trabajen de la mano. Esto implica desde talleres de teatro o danza en comunidades vulnerables hasta incluir visitas a museos como parte de programas de bienestar.

Un ejemplo real está en Ecuador, donde el programa Salud+Arte de la OPS/OMS ha usado festivales artísticos como herramientas para mejorar la salud mental de poblaciones en riesgo. También se ha documentado cómo terapias como la musicoterapia o la arteterapia ayudan en el tratamiento de enfermedades como la depresión, el Parkinson o el Alzheimer.

Entonces, ¿un museo puede ser medicina?

Sí, y no es una metáfora. La evidencia científica detrás del impacto positivo del arte en la salud es cada vez más sólida. Así que la próxima vez que te sientas abrumado, tal vez no necesites otra pastilla: tal vez solo necesites un poco de arte.

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