«Más grave de lo que podéis imaginar»: Sale a la luz el verdadero estado de salud de Jordi González tras su desaparición de la televisión
Jordi González, el comunicador que no se rinde. Jordi González es uno de los rostros más conocidos de la televisión en España. Con una carrera sólida, carisma inconfundible y una voz que se ha vuelto familiar en muchos hogares, el periodista ha sabido conquistar al público durante décadas. Su presencia en programas de entretenimiento y ... Leer más

Jordi González, el comunicador que no se rinde.
Jordi González es uno de los rostros más conocidos de la televisión en España. Con una carrera sólida, carisma inconfundible y una voz que se ha vuelto familiar en muchos hogares, el periodista ha sabido conquistar al público durante décadas. Su presencia en programas de entretenimiento y debate lo ha convertido en una figura respetada y querida por la audiencia. Desde los años noventa, ha sido parte del ADN televisivo nacional, dejando huella en cada formato que ha presentado.
A lo largo de los años, ha demostrado una versatilidad poco común en la pequeña pantalla. Desde entrevistas intensas hasta momentos más distendidos, Jordi ha sabido adaptarse a todo tipo de formatos sin perder su sello personal. Su última aventura profesional lo llevó a copresentar D Corazón junto a Anne Igartiburu, un proyecto que ha recibido buenas críticas por su frescura y cercanía. En este espacio, ha sabido conectar con una nueva generación de espectadores sin abandonar a su público de siempre.
Con un estilo sobrio y elegante, Jordi ha sabido mantenerse vigente en un entorno mediático cambiante. No solo es un presentador talentoso, sino también una figura que ha sabido construir una relación de confianza con su público. Por eso, su repentina ausencia del programa ha llamado tanto la atención en las últimas semanas. Y aunque se ha intentado restar importancia al tema, el silencio ha empezado a pesar.
La preocupación que crece en silencio.
Han pasado varias semanas desde que Jordi González explicó en D Corazón que estaba «malito» tras su viaje por Sudamérica. «La semana que viene, en teoría estoy allí. Ayer empecé a sentirme fatal… No sé qué me pasó, me puse a llorar, a toser… Suele pasar que cuando estás de vacaciones te pones malito», dijo, tratando de restarle gravedad al asunto. Sus palabras, aunque dichas con humor, dejaron entrever que algo no iba del todo bien.
Sin embargo, el presentador continúa sin aparecer por el plató, lo que ha alimentado rumores y especulaciones. Según ha revelado el medio Informalia, fuentes cercanas al periodista aseguran que su estado ha sido mucho más «delicado» de lo que se pensaba. «Ha estado mucho más grave de lo que podéis imaginar», han comenzado explicando. La falta de actualizaciones oficiales no ha hecho más que avivar la inquietud.
Lo que parecía una indisposición pasajera terminó siendo una experiencia mucho más seria. «Han sido varias las ocasiones en las que la situación fue bastante crítica. En Colombia ingresó en un hospital a los pocos días de llegar porque empezó a encontrarse muy mal, y ha estado ingresado hasta que la situación mejoró. A finales de marzo, los facultativos decidieron que ya podía volar», han informado al medio citado.
Una recuperación más lenta de lo previsto.
Aunque logró regresar a España, la mejoría no fue inmediata. «Primero tuvo que pasar por otro centro médico y, cuando se aseguraron de que estaba en condiciones de volver a casa para finalizar la recuperación, le dieron el alta», añadieron las mismas fuentes. El proceso ha sido lento y marcado por momentos de incertidumbre. El cansancio acumulado y el estrés físico han prolongado más de lo deseado su convalecencia.
El aspecto emocional también ha sido un desafío. A pesar de su naturaleza sociable y profesionalismo habitual, Jordi ha preferido mantenerse alejado del foco mediático durante estas semanas. «Él lo que quiere es estar fuerte cuanto antes para volver al programa que presenta en Televisión Española. No os podéis imaginar las ganas que tiene de poder trabajar», han asegurado.
Mientras tanto, sus seguidores esperan con paciencia su regreso, mandándole mensajes de cariño en redes sociales y recordando los buenos momentos que ha ofrecido en la televisión. Algunos incluso han lanzado campañas de apoyo para hacerle llegar su afecto. Su ausencia ha dejado un vacío evidente en D Corazón, donde su presencia aportaba equilibrio y carácter. El cariño del público, sin duda, es parte esencial de su recuperación.
La fuerza detrás de las cámaras.
Jordi González ha sido un ejemplo de profesionalidad durante décadas, y este bache en su salud no cambia esa percepción. Su determinación por volver al trabajo y su amor por la televisión hablan de una pasión que va más allá del plató. Y aunque ahora el silencio ocupe su silla en D Corazón, su voz sigue resonando entre los que lo admiran. Todos confían en que, cuando regrese, lo hará con la misma energía que lo ha caracterizado siempre.
Su equipo y sus compañeros esperan con los brazos abiertos su regreso, sabiendo que el periodista no tarda en levantarse, aunque la caída haya sido dura. El respeto que se ha ganado en el medio es prueba de su profesionalismo y entrega. A lo largo de los años, ha sorteado todo tipo de retos, y este no será la excepción. Jordi siempre ha sabido reinventarse, incluso cuando las circunstancias no lo han puesto fácil. Porque si algo ha demostrado Jordi a lo largo de su trayectoria es que siempre vuelve. Más fuerte. Más sabio. Más él.