Japón, Corea del Sur y Vietnam se desmarcan de China y renegocian los aranceles con Trump
Las grandes economías asiáticas no siguen la estela de Pekín y se repliegan en busca de acuerdos con la Administración Trump para rebajar las altas tarifas que ha impuesto a las potencias de naturaleza productora.

Las grandes economías asiáticas se desmarcan de la estrategia de represalias protagonizada por China y buscan un acuerdo con la Administración Trump para rebajar los aranceles que ha impuesto a sus exportaciones hacia Estados Unidos. Si el viernes pasado eran los gobiernos de Vietnam y Camboya quienes revelaban sus negociaciones con Washington, este lunes son los ejecutivos de Japón y Corea del Sur los que toman la iniciativa de llegar a un acuerdo con la Casa Blanca.
Se da la circunstancia de que el continente asiático se sitúa en el epicentro del seísmo arancelario desatado desde Estados Unidos, con 'peajes' que promedian el 30%, según un informe de la compañía de servicios financieros ANZ. La economía china, castigada con un nuevo arancel del 34% que asciende al 54% con el ya vigente, fue la primera en contraatacar a la ofensiva comercial de Trump con aranceles recíprocos del 34% a sus importaciones de productos 'made in USA'.
La reacción de Pekín, no obstante, no parece haber cuajado entre sus homólogos asiáticos, especialmente en aquellas potencias manufactureras que han recibido las tasas más elevadas. Los gobiernos de productores como Camboya o Vietnam, que asumen tarifas del 49 y 46%, respectivamente, no han tardado en descolgar sus teléfonos en busca de paliar un impacto que sería mayúsculo para sus economías.
En el caso de Camboya fue su primer ministro, Hun Manet, quien compartió el envío de una carta a Washington en la que asegura "estar comprometido a promover las importaciones de productos estadounidenses mediante una reducción inmediata" de los aranceles camboyanos sobre una veintena de categorías de bienes estadounidenses; mientras que en el de Vietnam, fue el propio Donald Trump, quien reconoció en sus redes haber tenido "una llamada muy productiva" con el Gobierno del país asiático, que se habría ofrecido a "reducir sus aranceles a cero".
Pasado el fin de semana, la calma sigue sin llegar a los mercados asiáticos han vivido este lunes su mayor desplome bursátil en los últimos dieciséis años ante el endurecimiento de la guerra comercial. El Nikkei 225, índice de referencia de la bolsa de Japón, ha entrado este lunes en un mercado bajista, al caer más del 20% desde su máximo de diciembre. Bajo este telón, su gobierno dirigido por Shigeru Ishiba ha pasado a la acción y ultima ya una primera toma de contacto con Donald Trump este lunes. Según apuntan medios locales recogidos por Bloomberg, se espera que Ishiba busque exenciones o aranceles más suaves que el 24% propuesto para su economía.
Misma estela parece seguir Corea del Sur, cuyo gobierno ha apostado por enviar a su ministro de Comercio, Cheong Inkyo, a Washington para negociar con su homólogo estadounidense Jamieson Greer una rebaja de los aranceles del 25% que ha recibido su país. Las líneas rojas trazadas por Trump en su intervención del domingo pasaron por no firmar acuerdos para reducir aranceles con economías que no eliminen el déficit comercial con su país. Según el informe compartido por el secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, ya son más de 50 los países que se habrían comunicado con la Casa Blanca para negociar los aranceles.