El Puerto de Santander, salida comercial al mar
Ya a mediados del siglo XVIII, el Rey Fernando VI y su ministro el marqués de la Ensenada empezaron a pensar en un plan para potenciar la economía de España y facilitar la salida de mercancía desde el interior hacia otras latitudes. Y pusieron en el punto de mira el puerto de Santander, el más cercano a esa meseta productora. De ahí nació el magno proyecto del canal de Castilla, con el que pensaban facilitar la 'navegación' desde Segovia hasta el Cantábrico. Llegó el ferrocarril y la obra de ingeniería hidráulica quedó en el olvido mediado el siglo XIX. Entonces el cereal era la principal producción en unas tierras llamadas -y con motivo- el 'granero de España'. Hoy en día, más allá de cebada, avena o centeno -que también-, la 'despensa' es más variada y la producción se ha diversificado. Lo que no ha cambiado es que la salida al mar más próxima es por tierras cántabras. Y ahí se ha fijado la Plataforma Agroalimentaria Palencia 2030, que ha organizado recientemente una jornada para conectar a cincuenta de las empresas más exportadores de la provincia con nuevas alternativas logísticas a través del Puerto de Santander. Una acción «importante» para que las compañías conozcan las «posibilidades» que ofrece esta infraestructura y también para que desde la entidad portuaria «comprendan las necesidades» de las compañías palentinas, subrayaba la presidenta de la Diputación Provincial, Ángeles Armisén, sobre esta iniciativa puesta en marcha en colaboración también con la Junta de Castilla y León. «Estamos en el eje del Corredor Atlántico, con autovías que conectan norte, sur, este y oeste de España, Francia y Portugal», destacaba el delegado territorial del Gobierno autonómico en Palencia, José Antonio Rubio. Y, añadía en declaraciones recogidas por Ical, el Puerto de Santander «nos permitirá ofrecer una logística competitiva, tanto económica como medioambientalmente». No en vano, Palencia es una provincia netamente exportadora. El año pasado fue la tercera de Castilla y León que mayor volumen de ventas realizó a terceros países, superando los 3.250 millones de euros, un 27,6 por ciento más que el ejercicio anterior, representando el 15,4 por ciento del total de las exportaciones de la Comunidad en un ejercicio de «récord» en el que se rebasaron los 21.000 millones de euros facturados a otros países. Los vehículos soportan el principal peso de las etiquetas con 'hecho en Palencia' -rozaron los 1.180 millones de euros-, pero desde Palencia viajan muchos más productos, destacando también los englobados en los capítulos de 'Preparaciones a base de cereales, harina, almidón, fécula o leche, productos de pastelería' y 'Preparaciones alimenticias diversas', por más de 70 millones entre ambos. Hasta pescados, crustáceos y café vende fuera la industria palentina. Unas cifras que posicionan a la provincia como la «segunda per cápita» en exportaciones a nivel nacional y la «primera» en el panorama autonómico. «Seguimos avanzando en Palencia como enclave logístico, no sólo por tren o carretera, sino también con la internacionalización a través del Puerto de Santander», defendía Armisén, a la vez que ponía al acento en la «urgencia de adaptarse» al cambiante entorno comercial. De ahí que esta iniciativa de la Plataforma Agroalimentaria 2030 busque «fortalecer» la competitividad de las empresas locales y favorecer la salida hacia otros mercados en un contexto internacional en el que la amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, es un escollo más en un volátil panorama marcado por la incertidumbre global. Tras esta primera jornada, habrá otra para que las empresas conozcan de primera mano las infraestructuras y operadores que trabajan desde el Puerto de Santander. No en vano, como destacaba el presidente de esta entidad, César Díez, el sector agroalimentario «es fundamental para nosotros» y cuentan con terminales especializadas. «Ofrecemos fiabilidad y competitividad», resaltaba de esta infraestructura, que busca «ser el eslabón clave en la cadena logística de Castilla y León y, en particular, de Palencia». En 2024, por aquí pasaron más de siete millones de toneladas de productos y, con un plan de inversiones en marcha por 150 millones, pretende alcanzar los ocho millones en el horizonte de 2028. Nuestras rutas en el Atlántico Norte y conexiones internacionales nos posicionan como una alternativa sólida», resaltaba Díez. Así, estas jornadas, apuntaba Armisén, se erigen como claves para «fortalecer sinergias entre empresas locales e infraestructuras estratégicas como el Puerto de Santander, lo que permitirá optimizar las cadenas logísticas y abrir nuevas oportunidades de exportación e importación para los productos palentinos».
Ya a mediados del siglo XVIII, el Rey Fernando VI y su ministro el marqués de la Ensenada empezaron a pensar en un plan para potenciar la economía de España y facilitar la salida de mercancía desde el interior hacia otras latitudes. Y pusieron en el punto de mira el puerto de Santander, el más cercano a esa meseta productora. De ahí nació el magno proyecto del canal de Castilla, con el que pensaban facilitar la 'navegación' desde Segovia hasta el Cantábrico. Llegó el ferrocarril y la obra de ingeniería hidráulica quedó en el olvido mediado el siglo XIX. Entonces el cereal era la principal producción en unas tierras llamadas -y con motivo- el 'granero de España'. Hoy en día, más allá de cebada, avena o centeno -que también-, la 'despensa' es más variada y la producción se ha diversificado. Lo que no ha cambiado es que la salida al mar más próxima es por tierras cántabras. Y ahí se ha fijado la Plataforma Agroalimentaria Palencia 2030, que ha organizado recientemente una jornada para conectar a cincuenta de las empresas más exportadores de la provincia con nuevas alternativas logísticas a través del Puerto de Santander. Una acción «importante» para que las compañías conozcan las «posibilidades» que ofrece esta infraestructura y también para que desde la entidad portuaria «comprendan las necesidades» de las compañías palentinas, subrayaba la presidenta de la Diputación Provincial, Ángeles Armisén, sobre esta iniciativa puesta en marcha en colaboración también con la Junta de Castilla y León. «Estamos en el eje del Corredor Atlántico, con autovías que conectan norte, sur, este y oeste de España, Francia y Portugal», destacaba el delegado territorial del Gobierno autonómico en Palencia, José Antonio Rubio. Y, añadía en declaraciones recogidas por Ical, el Puerto de Santander «nos permitirá ofrecer una logística competitiva, tanto económica como medioambientalmente». No en vano, Palencia es una provincia netamente exportadora. El año pasado fue la tercera de Castilla y León que mayor volumen de ventas realizó a terceros países, superando los 3.250 millones de euros, un 27,6 por ciento más que el ejercicio anterior, representando el 15,4 por ciento del total de las exportaciones de la Comunidad en un ejercicio de «récord» en el que se rebasaron los 21.000 millones de euros facturados a otros países. Los vehículos soportan el principal peso de las etiquetas con 'hecho en Palencia' -rozaron los 1.180 millones de euros-, pero desde Palencia viajan muchos más productos, destacando también los englobados en los capítulos de 'Preparaciones a base de cereales, harina, almidón, fécula o leche, productos de pastelería' y 'Preparaciones alimenticias diversas', por más de 70 millones entre ambos. Hasta pescados, crustáceos y café vende fuera la industria palentina. Unas cifras que posicionan a la provincia como la «segunda per cápita» en exportaciones a nivel nacional y la «primera» en el panorama autonómico. «Seguimos avanzando en Palencia como enclave logístico, no sólo por tren o carretera, sino también con la internacionalización a través del Puerto de Santander», defendía Armisén, a la vez que ponía al acento en la «urgencia de adaptarse» al cambiante entorno comercial. De ahí que esta iniciativa de la Plataforma Agroalimentaria 2030 busque «fortalecer» la competitividad de las empresas locales y favorecer la salida hacia otros mercados en un contexto internacional en el que la amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, es un escollo más en un volátil panorama marcado por la incertidumbre global. Tras esta primera jornada, habrá otra para que las empresas conozcan de primera mano las infraestructuras y operadores que trabajan desde el Puerto de Santander. No en vano, como destacaba el presidente de esta entidad, César Díez, el sector agroalimentario «es fundamental para nosotros» y cuentan con terminales especializadas. «Ofrecemos fiabilidad y competitividad», resaltaba de esta infraestructura, que busca «ser el eslabón clave en la cadena logística de Castilla y León y, en particular, de Palencia». En 2024, por aquí pasaron más de siete millones de toneladas de productos y, con un plan de inversiones en marcha por 150 millones, pretende alcanzar los ocho millones en el horizonte de 2028. Nuestras rutas en el Atlántico Norte y conexiones internacionales nos posicionan como una alternativa sólida», resaltaba Díez. Así, estas jornadas, apuntaba Armisén, se erigen como claves para «fortalecer sinergias entre empresas locales e infraestructuras estratégicas como el Puerto de Santander, lo que permitirá optimizar las cadenas logísticas y abrir nuevas oportunidades de exportación e importación para los productos palentinos».
Publicaciones Relacionadas