El enfrentamiento entre Ana María Aldón y Gloria Camila perdura: "Se quedó con la puerta cerrada en sus narices"

José Ortega Cano no está pasando un buen momento. Se siente nuevamente observado y perseguido después de que su hija Gloria Camila haya vuelto a televisión. Aunque la joven desarrolla con soltura sus funciones como contertuliana en Fiesta y TardeAR, sus anteriores entrevistas en De Viernes despertaron a los fantasmas del pasado que no han dudado en matizar y aclarar algunos de los puntos sostenidos por ella, alargando la sombra de la discrepancia y el dolor.

Explican que la realidad entre Ana María Aldón y la creadora de contenido es mucho más tensa de lo que se puede pensar en la actualidad. No se dirigen la palabra. La diseñadora no le perdona el último desplante que ocurrió en el cumpleaños de su hijo, incumpliendo un acuerdo fijado entre las partes. Una situación que le generó un malestar indiscutible y del que todavía no se ha recuperado.

"Fue complicado porque ocurrió en un día importante y Ana se quedó con la puerta cerrada en sus narices", dice una fuente cercana para 20minutos. Un desencuentro más entre Gloria Camila y Ana María Aldón del que el diestro no tiene constancia, pero que evidencia que, lejos de acercarse, lo cierto es que la distancia entre una y otra es cada vez más evidente.

No es la única mujer que ha sido importante para el diestro que está ahora de actualidad. La cantante Isabel Luna, que durante años mantuvo una amistad con toda la familia, ofreció hace unos días un concierto muy especial en el Corral de Comedias de Alcalá de Henares. Allí, en un teatro del siglo XVII y rodeada de su equipo de músicos, interpretó las canciones que le han consolidado como una de las voces más especiales y elegantes del panorama patrio.