Cuerpo defiende que el acercamiento a China es europeo y ve factible el pacto de aranceles con EEUU
El ministro de Economía, Comercio y Empresa, confía en que el PP apoye la "primera línea de respuesta" a la guerra arancelaria, a través del real decreto ley aprobado en Consejo de Ministros el pasado 8 de abril

El acercamiento a China es un movimiento que se está produciendo a nivel europeo en un contexto en el que arrecia la guerra comercial entre el gigante asiático y Estados Unidos, pese a que Washington ha decidido pisar el freno de los aranceles con la pausa de noventa días en las tasas recíprocas. Lo ha recordado el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, tras apuntar que el comisario europeo de Comercio viajó al gigante asiático hace unas semanas y que la presidenta de la Comisión Europea lo hizo hace unos meses para reforzar esta relación con Pekín.
"Yo creo que el viaje no sorprende a nadie, llevamos ya varios años en esta línea de reforzar las relaciones con un país que es una de las principales economías del mundo", ha apuntado en una entrevista concedida este lunes a Telecinco, al ser preguntado por el viaje del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al país y por la reacción del secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, quien consideró que ese acercamiento sería como "cortarse el cuello". Si bien, Cuerpo ha reconocido que Pekín es un competidor en muchas áreas, ha incidido en que también tiene que ser un socio estratégico. El propio Cuerpo se reunió con Bessent la pasada semana.
"Tenemos que conseguir reequilibrar una relación que ahora mismo es muy deficitaria para Europa con respecto a China. Yo creo que esto lo entiende todo el mundo y además que no es una aproximación únicamente española, es una aproximación europea", ha insistido. Según cifras publicadas recientemente por Eurostat, la oficina de estadísticas europea, en 2024, los Veintisiete registraron un déficit comercial con China superior a los 304.500 millones de euros. Ese agujero se debe a que la región importó del país asiático mucho más de lo que le exportó.
Desde su punto de vista, Bruselas debe tener "voz propia" en un momento en el que se están reestructurando las principales relaciones geoestratégicas económicas a nivel mundial. Ha defendido, además, que esta "lleva ya años desarrollándose", por ejemplo, en esa relación con el Gobierno de Xi Jinping. Preguntado por si la caída de las exportaciones chinas a Estados Unidos a raíz de los aranceles puede generar una invasión de productos chinos a la Unión Europea, Cuerpo ha admitido que "la desviación de comercio efectivamente es uno de los riesgos que tiene ahora mismo el cierre del mercado americano".
En su opinión, hay dos maneras de encarar este reto. Por un lado, controlar en frontera si se da un incremento no justificado de importaciones de algunos productos. Por otro, dialogar con los países exportadores para que esta desviación no se produzca.
De momento, el Gobierno está analizando con las empresas cuáles podrían ser los mercados alternativos para sus productos. Según una encuesta del ICEX a cerca de un millar de firmas, los cinco mayores mercados posibles como alternativa a Estados Unidos son los de Canadá, México Alemania, China o Francia. "Nuestras empresas también quieren que hagamos ese esfuerzo por abrir ese mercado chino que todavía permanece a nuestro juicio más cerrado de lo que podría estar", ha apostillado Cuerpo.
Confiado en un pacto con el PP sobre las ayudas
Cuerpo confía en que el PP apoye la "primera línea de respuesta" a la guerra arancelaria, en forma del Real Decreto-ley 4/2025, de 8 de abril, de medidas urgentes de respuesta a la amenaza arancelaria y de relanzamiento comercial. El titular de Economía ha explicado que sigue "manteniendo contacto" con el principal partido de la oposición, que amenazó con abandonar las conversaciones si se reservaba una cuota específica de las ayudas para Cataluña. Así, ha asegurado que la relación con los populares es "abierta, franca" para lograr un respuesta "conjunta" a esta crisis y que la ciudadanía vea que "ante retos tan enormes" los dos partidos son "capaces de hablar y de llegar a acuerdos".