Cuando la fama no es suficiente: ola de cierres entre los restaurantes de celebridades

El mundo del emprendimiento no es nada fácil, y ni siquiera los famosos se escapan de algún que otro fracaso. En particular, en los últimos tiempos parece que los restaurantes de celebridades se están enfrentando a su pequeña «epidemia» de cierres. Uno de los últimos ejemplos es el de la cadena de hamburguesas veganas de Leonardo DiCaprio y Lewis Hamilton , que tras seis años de negocio habría producido pérdidas de 9 millones de euros (según 'The Sun'), por lo que se han visto obligados a cerrar. Pero no son los únicos. En los últimos meses una serie de restaurantes, sobre todo nacionales, se han visto abocados al cierre , en ocasiones de manera inesperada. A principios de abril echó el cierre el restaurante Haches, de Javier Ungría . El exconcursante de 'Supervivientes' y expareja de Elena Tablada confirmó el inesperado fin de su negocio , que se encontraba en la calle de José Ortega y Gasset desde 2016. Centrado en la cocina mediterránea, con cuatro estrellas en Google Maps y un 4,3 en Tripadvisor, el cierre de Haches sorprendió a sus habituales. Sobre todo después de tanto tiempo abierto, habiendo superado la pandemia que hizo cerrar a tantos otros negocios. Pero Javier Ungría, sobrino de Miriam Ungría, princesa de Tirnovo y viuda de Kardam de Bulgaria, aseguraba en declaraciones a Europa Press que no había «nada raro» detrás . «Hay negocios que van y vienen. No hay mucho más. A veces funcionan, no funcionan... hay que cerrar, no hay que cerrar... no pasa nada», comentaba. Solo unas semanas antes sorprendió el cierre de uno de los restaurantes más famosos de la Castellana, que además tenía a grandes estrellas como inversores. Totó, que era uno de los proyectos del grupo inversor Mabel Hospitality en donde están Rafa Nadal, Cristiano Ronaldo, Rudy Fernández o Pau Gasol , cerró sus puertas a principios de marzo. En su web ya solo figuran los locales de Dubái y Abu Dabi, aunque Tatel -su otro restaurante- sigue teniendo un local en la capital española. Totó, que llevaba dos años abierto, ofrecía cocina y decoración con inspiración italiana y del cine de medio siglo. Tenía un 4,2 en reseñas de Google pero solo un 3,6 en Tripadvisor, donde las quejas sobre la calidad de la comida eran las más habituales entre muchos comentarios alabando el local. «Si Nadal come aquí no gana un set ni al ping-pong», asegura uno de los comentarios que todavía puede leerse. También en marzo sorprendió la noticia del cierre de Robuchon Madrid . El restaurante del chef Joël Robuchon, el único que llegó a conseguir 28 estrellas Michelin y que falleció en 2018, puso fin a su recorrido en el local en el que estaba previamente Embassy. La fama del proyecto no fue suficiente para conseguir mantenerlo en pie. El conocido cocinero ya avisó, antes de que fallecer, de que sus menús de alta cocina de 250 euros no encajarían en las rutinas de la vida española. El año pasado otro restaurante de alta cocina sufrió su propia crisis. Martín Berasategui dejó El Club Allard , quejándose de «irregularidades económicas» y de una «gestión desastrosa» del proyecto. Aunque en ese caso el local no cerró sino que apostó por otro cocinero más joven y menos conocido por el gran público. En Madrid hay otros proyectos que es por todos conocido que tienen a famosos detrás y que todavía sobreviven tras esta ola de cierres. Por ejemplo, Rhudo, que tuvo su gran inauguración en enero de 2024, con la presencia de sus célebres inversores: los actores Miguel Ángel Silvestre y Álex González , los futbolistas Antoine Griezmann y Marcos Llorente ; y el chef Paco Roncero . El local tiene una barbaridad de reseñas en Google, más de 2.100, que le han valido un 4,2 como puntuación. Sin embargo, en Tripadvisor los clientes no están tan contentos, lo valoran con un 3,5 y los comentarios se quejan, sobre todo, del servicio y de la música, que consideran que está demasiado alta. Porque Rhudo -situado en la calle Velázquez- no es solo un restaurante, siempre estuvo pensado como un local híbrido entre discoteca y restaurante, pero después de unos meses funcionando se reenfocaron más hacia un 'show' con cena . Entre semana tienen fiestas flamencas o inspiradas en Studio 54, para ofrecer una propuesta diferente a otros locales con su rango de precios del centro de Madrid. Sin embargo, sus redes sociales y sus reservas demuestran que no consiguen atraer todo el interés que desearían . Hay espacios disponibles todos los días, incluido el fin de semana, y el link para coger una mesa que tienen en su perfil de Instagram da error, por lo que se dificulta aún más el proceso. Otro es Casa Salesas, de Iñigo Onieva, con un 4,4 en Google Maps pero solo 821 reseñas. En Tripadvisor la nota es bastante peor, con un 3,2 y solo 64 opiniones. Entre las peores críticas lo consideran «agobiante» y «nada recomendable» , quejas de la comida que muchos señalan que llegaba fría, la oscuridad del local y, como en el caso de Rhudo, sobre la música. «No es más que una discoteca con comida . La música está

May 3, 2025 - 02:10
 0
Cuando la fama no es suficiente: ola de cierres entre los restaurantes de celebridades
El mundo del emprendimiento no es nada fácil, y ni siquiera los famosos se escapan de algún que otro fracaso. En particular, en los últimos tiempos parece que los restaurantes de celebridades se están enfrentando a su pequeña «epidemia» de cierres. Uno de los últimos ejemplos es el de la cadena de hamburguesas veganas de Leonardo DiCaprio y Lewis Hamilton , que tras seis años de negocio habría producido pérdidas de 9 millones de euros (según 'The Sun'), por lo que se han visto obligados a cerrar. Pero no son los únicos. En los últimos meses una serie de restaurantes, sobre todo nacionales, se han visto abocados al cierre , en ocasiones de manera inesperada. A principios de abril echó el cierre el restaurante Haches, de Javier Ungría . El exconcursante de 'Supervivientes' y expareja de Elena Tablada confirmó el inesperado fin de su negocio , que se encontraba en la calle de José Ortega y Gasset desde 2016. Centrado en la cocina mediterránea, con cuatro estrellas en Google Maps y un 4,3 en Tripadvisor, el cierre de Haches sorprendió a sus habituales. Sobre todo después de tanto tiempo abierto, habiendo superado la pandemia que hizo cerrar a tantos otros negocios. Pero Javier Ungría, sobrino de Miriam Ungría, princesa de Tirnovo y viuda de Kardam de Bulgaria, aseguraba en declaraciones a Europa Press que no había «nada raro» detrás . «Hay negocios que van y vienen. No hay mucho más. A veces funcionan, no funcionan... hay que cerrar, no hay que cerrar... no pasa nada», comentaba. Solo unas semanas antes sorprendió el cierre de uno de los restaurantes más famosos de la Castellana, que además tenía a grandes estrellas como inversores. Totó, que era uno de los proyectos del grupo inversor Mabel Hospitality en donde están Rafa Nadal, Cristiano Ronaldo, Rudy Fernández o Pau Gasol , cerró sus puertas a principios de marzo. En su web ya solo figuran los locales de Dubái y Abu Dabi, aunque Tatel -su otro restaurante- sigue teniendo un local en la capital española. Totó, que llevaba dos años abierto, ofrecía cocina y decoración con inspiración italiana y del cine de medio siglo. Tenía un 4,2 en reseñas de Google pero solo un 3,6 en Tripadvisor, donde las quejas sobre la calidad de la comida eran las más habituales entre muchos comentarios alabando el local. «Si Nadal come aquí no gana un set ni al ping-pong», asegura uno de los comentarios que todavía puede leerse. También en marzo sorprendió la noticia del cierre de Robuchon Madrid . El restaurante del chef Joël Robuchon, el único que llegó a conseguir 28 estrellas Michelin y que falleció en 2018, puso fin a su recorrido en el local en el que estaba previamente Embassy. La fama del proyecto no fue suficiente para conseguir mantenerlo en pie. El conocido cocinero ya avisó, antes de que fallecer, de que sus menús de alta cocina de 250 euros no encajarían en las rutinas de la vida española. El año pasado otro restaurante de alta cocina sufrió su propia crisis. Martín Berasategui dejó El Club Allard , quejándose de «irregularidades económicas» y de una «gestión desastrosa» del proyecto. Aunque en ese caso el local no cerró sino que apostó por otro cocinero más joven y menos conocido por el gran público. En Madrid hay otros proyectos que es por todos conocido que tienen a famosos detrás y que todavía sobreviven tras esta ola de cierres. Por ejemplo, Rhudo, que tuvo su gran inauguración en enero de 2024, con la presencia de sus célebres inversores: los actores Miguel Ángel Silvestre y Álex González , los futbolistas Antoine Griezmann y Marcos Llorente ; y el chef Paco Roncero . El local tiene una barbaridad de reseñas en Google, más de 2.100, que le han valido un 4,2 como puntuación. Sin embargo, en Tripadvisor los clientes no están tan contentos, lo valoran con un 3,5 y los comentarios se quejan, sobre todo, del servicio y de la música, que consideran que está demasiado alta. Porque Rhudo -situado en la calle Velázquez- no es solo un restaurante, siempre estuvo pensado como un local híbrido entre discoteca y restaurante, pero después de unos meses funcionando se reenfocaron más hacia un 'show' con cena . Entre semana tienen fiestas flamencas o inspiradas en Studio 54, para ofrecer una propuesta diferente a otros locales con su rango de precios del centro de Madrid. Sin embargo, sus redes sociales y sus reservas demuestran que no consiguen atraer todo el interés que desearían . Hay espacios disponibles todos los días, incluido el fin de semana, y el link para coger una mesa que tienen en su perfil de Instagram da error, por lo que se dificulta aún más el proceso. Otro es Casa Salesas, de Iñigo Onieva, con un 4,4 en Google Maps pero solo 821 reseñas. En Tripadvisor la nota es bastante peor, con un 3,2 y solo 64 opiniones. Entre las peores críticas lo consideran «agobiante» y «nada recomendable» , quejas de la comida que muchos señalan que llegaba fría, la oscuridad del local y, como en el caso de Rhudo, sobre la música. «No es más que una discoteca con comida . La música está a tal volumen que no puedes mantener ningún tipo de conversación«, aseguraba un cliente a comienzos de año. Situado en el barrio de Justicia, a solo unos metros de donde Iñigo Onieva y Tamara Falcó vivían antes de mudarse a Puerta de Hierro, el local podría tener mucho éxito. En calles colindantes cualquier fin de semana se hacen colas para disfrutar del brunch, pero en la opción que ofrece Casa Salesas es habitual encontrar sitio . Sin embargo, lleva menos de un año abierto, por lo que todavía tiene posibilidades de reconducir el negocio y que su público deseado lo descubra. Lo que está claro es que abrir un negocio y esperar que tu fama lo sostenga no es la solución. En el pasado ya hay pruebas que demuestran este error que varias celebridades han cometido . El ejemplo más sangrante es el de los restaurantes Planet Hollywood, que fundaron en los años 90 una serie de famosos entre los que estaban Arnold Schwarzenegger, Bruce Willis y Sylvester Stallone. Varias famosos más llegaron a tener acciones de estos locales que abrieron en multitud de ciudades del mundo, incluida Madrid . Pero a medida que avanzó la década el interés por este restaurante donde, supuestamente, podía uno disfrutar de 'merchandising' y decoración inspirada en Hollywood, fue decayendo. De la misma manera que la calidad de su comida fue empeorando, hasta el punto de que la gente prefería solo visitar y no comer. En 1999 se declararon en quiebra por primera vez , tras lo que cerraron una multitud de locales en todo el mundo. Pero la empresa se salvó para, en 2001, volver a declararse en quiebra culpando a los atentados del 11 de septiembre como uno de los motivos de la bajada de las cifras. Y aunque desde entonces Planet Hollywood desapareció como una marca global, sigue siendo un lugar que atrae el turismo en los locales que quedan en Estados Unidos. Una especie de vestigio del pasado que también genera aún interés en lo que respecta al coleccionismo: las bomber que se vendían como 'merchandising' ahora están a más de 200 euros en Vinted. Todo se revaloriza .