Vender viviendas con okupas dentro, así funciona la compraventa de este tipo de inmuebles
Sin la posibilidad de visita y con precios hasta un 60% más baratos que el valor del mercado, esta práctica se populariza cada vez más en ciudades como Barcelona.

La okupación es una preocupación habitual en el imaginario español. No pasa un día sin que los medios repliquen alguna mínima información sobre esta situación. Tanto es así que los "okupas" se han convertido en un miedo constante para el ciudadano promedio. Y lo cierto es que la esta no deja de ser un calvario para los propietarios que la viven. Los largos procesos legales y los costos judiciales de desahucio tienen que ser, sin duda, agotadores.
Ante el estrés que debe generar los perjuicios contra la propiedad privada, cada vez más propietarios han comenzado a vender sus casa directamente con el okupa dentro. De esta manera, la parte arrendadora no solo se ahorra el desgaste económico y mental, sino que también obtiene liquidez. A día de hoy, los grandes portales inmobiliarios permiten los anuncios de propiedades bajo estas condiciones. De hecho, Idealista ha creado un filtro específico para encontrarlas sin mayor esfuerzo.
Una inversión de alto riesgo
Ahora, sabiendo que la transmisión de una vivienda ocupada es legal, el comprador de un inmueble ocupado se subrogará en todos los derechos y obligaciones de que disponga la parte vendedora bajo el amparo del artículo 17 de la Ley de Enjuiciamiento Civil. No obstante, muchas inmobiliarias han aprovechado para catalogar este fenómeno como una "oportunidad", ya que es posible hacerse con una casa entre un 30% y 60% más barata respecto a su valor real.
Lo que puede suceder a partir de ahí es incierto, si los inversores no logran llegar a un acuerdo con los okupas, el proceso será el ordinario. El coste también es incierto, el nuevo propietario debe hacerse cargo de los gastos de la comunidad, tasas, impuestos, etc., mientras se finalizan los trámites con tribunales y por si fuera poco, cuando el nuevo propietario por fin se haga con la posesión real de la vivienda, tendrá que asumir también las reparaciones por los desperfectos existentes.
Además, las entidades bancarias jamás otorgaran préstamos hipotecarios para el posible comprador ya que no podrá hacer la tasación del inmueble
Marco legal sobre la vivienda okupada
La legislación española carece de procedimientos rápidos y eficaces que protejan los derechos de los propietarios, como sí ocurre en otros países. En este contexto, desde el punto de vista penal, el delito de usurpación, que ocurre cuando una persona ocupa un inmueble que no es su vivienda habitual, se considera la vía para abordar este tipo de situaciones.
A partir del 3 de abril de 2025, con la entrada en vigor de la ley Orgánica 1/2025, se establecerá un procedimiento más rápido para la instrucción de estos delitos. Sin embargo, debido al colapso de los juzgados y la sobrecarga del sistema judicial, este proceso rápido puede verse retrasado varios meses, lo que sigue representando un desafío para los propietarios afectados.
En el ámbito civil, la Ley 5/2018, conocida como el 'desahucio exprés', se introdujo con la intención de ofrecer una respuesta rápida a las ocupaciones ilegales, pero su efectividad ha sido limitada. A pesar de las buenas intenciones de la ley, el proceso se dilata cuando el okupa presenta un contrato falso que lo legitima como ocupante. En estos casos, se requiere una vista del juicio.
Además, si en el momento de la ejecución de la sentencia los ocupantes pueden demostrar que son vulnerables económicamente, el procedimiento se alarga aún más.