Trump 2 y Argentina: cómo reaccionar a los vientos en contra
Trump está destruyendo la confianza en las relaciones económicas internacionales y no está para nada claro hacia donde nos dirigimos y cuándo y si algún día podremos reestablecer esta confianza.

Ha caído una bomba sobre la economía internacional. Estados Unidos ha tirado por la borda su liderazgo en la creación del conjunto de reglas multilaterales que lenta, pero sostenidamente, nacieron a partir de la posguerra.
Trump 1 comenzó la faena y ahora la está completando. Paralelamente está destruyendo la confianza en las relaciones económicas internacionales y no está para nada claro hacia donde nos dirigimos y cuándo y si algún día podremos reestablecer esta confianza.
Comparto los principales pronósticos realizados por la profesión. Los aranceles y contra aranceles elevarán los precios internos de Estados Unidos y otros países.
Hasta dónde llegarán estos aumentos dependerá de cómo reaccione Trump 2 a las políticas retaliatorias que otros países han anunciado y ya están implementando. Por ahora estamos en la primera ronda del proceso destructivo y lo mejor para el mundo sería que termine acá, aunque no lo creo.
En reacción a estos mayores niveles de precios, los bancos centrales endurecerán sus políticas y las monedas de países con tipos de cambio flexibles se devaluarán como ha ocurrido en otras ocasiones. Los riesgos de entrar en una carrera devaluatoria también han aumentado.
La caída en las principales bolsas del mundo son una consecuencia de las fuerzas recesivas generadas por el significativo aumento del proteccionismo. El comercio mundial corre ahora graves riesgos de girar hacia una tendencia negativa mucho más acentuada que la que generó Trump 1.
De continuar con las sucesivas rondas proteccionistas y también eventualmente devaluatorias, la recesión mundial que se avecina podría transformarse en una implosión como ocurrió en los 30'.
Claramente la fuerza con que soplan los vientos en contra de nuestra economía ha aumentado de intensidad y tenemos que clarificar cómo los enfrentaremos. Las reacciones internas girarán hacia presiones proteccionistas usando las políticas de Trump 2 como un ejemplo de modernidad.
Lo peor para nosotros como sociedad sería responder con medidas proteccionistas, sean estas motivadas por presiones retaliatorias o simplemente por intereses sectoriales que, de implementarse, estarían desconociendo los intereses de la sociedad.
Tenemos que mantener el espíritu y las medidas aperturistas que ya han mostrado tener claros impactos a la baja de muchos precios de productos de consumo generalizado.
Simultáneamente, tenemos que reforzar los acuerdos comerciales existentes y buscar nuevos acuerdos con los países que continúan siendo respetuosos de las reglas.
El Mercosur deberá flexibilizarse y tendrá que discutirse con cuidado cuáles son las políticas más adecuadas para enfrentar los serios obstáculos generados por la entrada en vigencia de una economía internacional caracterizada por la preeminencia de los más fuertes.