Starship explota en su octavo vuelo de prueba; SpaceX dice que es un gran aprendizaje
El 6 de marzo de 2025, SpaceX llevó a cabo el octavo vuelo de prueba de su ambicioso y poderoso cohete Starship. El despegue desde Boca Chica, Texas, fue impresionante, marcando otro hito en la búsqueda de un sistema de transporte espacial completamente reutilizable. Sin embargo, la misión concluyó de manera abrupta cuando la etapa […]

El 6 de marzo de 2025, SpaceX llevó a cabo el octavo vuelo de prueba de su ambicioso y poderoso cohete Starship. El despegue desde Boca Chica, Texas, fue impresionante, marcando otro hito en la búsqueda de un sistema de transporte espacial completamente reutilizable.
Sin embargo, la misión concluyó de manera abrupta cuando la etapa superior perdió el control sobre el Atlántico y se desintegró en una explosión visible hasta la Costa Espacial de Florida, cerca de Cabo Cañaveral.
If you’re keeping count, that’s four Starship explosions out of eight attempts—an impressive failure rate.
Elon’s philosophy seems to be the same for everything: blow it up, waste billions, and call it innovation. pic.twitter.com/jjvgIsWipY
— Chris D. Jackson (@ChrisDJackson) March 7, 2025
Un vuelo lleno de expectativas
SpaceX tenía grandes ambiciones para esta prueba, intentando alcanzar varios hitos que no se lograron en la séptima misión. Entre los principales objetivos de este vuelo estaban:
- Primera prueba de despliegue de carga útil de Starship, un paso clave hacia su futuro en misiones de transporte de satélites y exploración interplanetaria.
- Realización de múltiples experimentos de reentrada, diseñados para mejorar la capacidad de recuperación de la etapa superior y su eventual retorno al sitio de lanzamiento.
- Lanzamiento, regreso y captura del propulsor Super Heavy, un aspecto crucial para el objetivo de reutilización completa del sistema de lanzamiento.
El plan original contemplaba que la etapa superior aterrizara en el Océano Índico después de completar sus maniobras de reentrada, mientras que el propulsor principal debía regresar a Boca Chica, donde SpaceX esperaba capturarlo con éxito. De no ser posible, el refuerzo habría amerizado en el Golfo de México como alternativa.
Mechazilla has caught the Super Heavy booster! pic.twitter.com/JFeJSdnQ5x
— SpaceX (@SpaceX) March 6, 2025
¿Qué salió mal?
Aproximadamente ocho minutos después del lanzamiento, la etapa superior comenzó a comportarse de manera anómala, lo que llevó a su eventual destrucción. Según SpaceX, la causa principal del fallo fue una respuesta armónica inesperada en vuelo, algo que las pruebas en tierra no habían identificado.
El problema comenzó alrededor de dos minutos después de la separación de las etapas, cuando se detectó un destello en la parte trasera del vehículo, cerca de uno de los motores Raptor de vacío. Poco después, se registraron incendios en el compartimento conocido como “el ático“, una zona crítica que alberga componentes estructurales y sistemas vitales.
Estos incendios progresaron rápidamente, provocando la falla de casi todos los motores de la etapa superior y, finalmente, la pérdida de comunicación con la nave. Sin posibilidad de recuperar el control, la reentrada resultó en una desintegración catastrófica.
Impacto y repercusiones
El reingreso descontrolado de Starship no solo resultó en una explosión, sino que también generó una nube de combustible en la atmósfera y obligó a desviar vuelos comerciales para evitar posibles impactos con escombros. A pesar del desenlace, esta prueba proporcionó información crucial para SpaceX, ayudando a identificar debilidades estructurales y mejorar el diseño de futuras versiones de la nave.
Para SpaceX, cada prueba de Starship, independientemente de su resultado, representa un paso adelante en el desarrollo de un sistema de lanzamiento completamente reutilizable. El equipo de SpaceX ya está trabajando en las modificaciones necesarias para la próxima prueba, que buscará superar los desafíos encontrados en este vuelo y acercarse aún más a la viabilidad operativa de Starship.