Silvina Chediek se casó por tercera vez, ¿quién es su nuevo marido?: “El amor después del dolor”
Silvina Chediek se animó a casarse nuevamente, y lo hace por tercera vez. Se trata de un momento de gran importancia en su vida, y un punto cúlmine en su historia de amor con Jorge Molinari Walker, su ahora esposo. La boda se ofició en la parroquia Mater Admirábilis, y se trató de una ceremonia muy íntima, a la que asistieron unos pocos amigos y familiares de los protagonistas.El vínculo entre Chediek y Molinari Walker comenzó hace varios años. En el 2016, ella enviudó de quien fue su marido durante más de veinte años, Patricio Feune Colombi, con quien estuvo casada entre 1992 y 2016 (su primer matrimonio, en 1990, fue con Jorge Lanata). Un tiempo después, fue justamente la cuñada de Silvina quien le comentó sobre Jorge, un hombre que también había enviudado poco tiempo atrás, luego de casi treinta años de matrimonio. Finalmente ambos se conocieron, y terminaron por comenzar una nueva historia de amor. En diálogo con LA NACIÓN y en referencia a ese romance, Chediek lo definió como “el amor después del dolor”. Un dato muy importante con respecto a esta boda, es que se trató de la primera vez que la periodista se casa por iglesia. Esto era algo muy importante para Chediek, ya que según confesó recientemente en una nota con este medio, ella es muy religiosa. “En el fondo, creo que ser creyente es creer en el misterio, en algo que no voy a poder entender y que mis palabras no alcanzarán porque es una experiencia” le dijo la periodista a LA NACIÓN, y luego agregó: “Soy muy creyente de muy chiquita y no sé por qué. Mis padres eran creyentes, pero no practicantes. Mi madre empezó a ir a la iglesia de grande”.En esa misma nota, Chediek se refirió al momento en el que conoció a Jorge Molinari Walker, su flamante esposo: “Mi cuñada Cristina me dijo que me quería presentar a su vecino viudo, pero yo no quería saber nada, no estaba lista. Pasó bastante tiempo hasta que empezamos a hablar. Hablamos mucho. Es que no quería sufrir de nuevo, aún estaba cicatrizando. Él no es una persona que se caracterice por ser paciente, así que valoro mucho esa paciencia que me tuvo. Después de un tiempo, me atreví a iniciar una relación con Jorge, quien no tiene nada que ver con el medio”.El matrimonio con Jorge LanataDurante la entrevista que Silvina Shediek le brindó a LA NACIÓN, se animó a hablar sobre su vínculo con Jorge Lanata. En esa charla, brindada antes de la muerte del periodista, ella aseguraba que no le molestaba que se hablara de ese vínculo como “el matrimonio más corto del espectáculo argentino”, y expresó: “Hay gente que estira vínculos que ya saben que no van a andar y se quedan juntos un par de años, eso da menos para hablar a los demás; en este caso fueron cinco meses”.A comienzos de la década del noventa, cuando Chediek y el periodista Jorge Lanata se casaron, no faltaron las miradas de asombro, quizás el prejuicio -una vez más- opinando desde el afuera caprichosamente. Todo duró muy poco, pero la resolución estuvo muy lejos de convertirse en un escándalo mediático. “El paso del tiempo hace que lo recuerde sonriendo, no tengo ningún tipo de rencor. Solté eso hace mucho tiempo, pero me hace gracia que treinta y tres años más tarde aún haya un eco”. Dos años después de la separación, que es el tiempo mínimo que indica la ley para efectuar el divorcio, Chediek contó que volvió a ver a Lanata: “Nos vimos para hacer el trámite y nos reímos”.
Silvina Chediek se animó a casarse nuevamente, y lo hace por tercera vez. Se trata de un momento de gran importancia en su vida, y un punto cúlmine en su historia de amor con Jorge Molinari Walker, su ahora esposo. La boda se ofició en la parroquia Mater Admirábilis, y se trató de una ceremonia muy íntima, a la que asistieron unos pocos amigos y familiares de los protagonistas.
El vínculo entre Chediek y Molinari Walker comenzó hace varios años. En el 2016, ella enviudó de quien fue su marido durante más de veinte años, Patricio Feune Colombi, con quien estuvo casada entre 1992 y 2016 (su primer matrimonio, en 1990, fue con Jorge Lanata). Un tiempo después, fue justamente la cuñada de Silvina quien le comentó sobre Jorge, un hombre que también había enviudado poco tiempo atrás, luego de casi treinta años de matrimonio. Finalmente ambos se conocieron, y terminaron por comenzar una nueva historia de amor. En diálogo con LA NACIÓN y en referencia a ese romance, Chediek lo definió como “el amor después del dolor”.
Un dato muy importante con respecto a esta boda, es que se trató de la primera vez que la periodista se casa por iglesia. Esto era algo muy importante para Chediek, ya que según confesó recientemente en una nota con este medio, ella es muy religiosa. “En el fondo, creo que ser creyente es creer en el misterio, en algo que no voy a poder entender y que mis palabras no alcanzarán porque es una experiencia” le dijo la periodista a LA NACIÓN, y luego agregó: “Soy muy creyente de muy chiquita y no sé por qué. Mis padres eran creyentes, pero no practicantes. Mi madre empezó a ir a la iglesia de grande”.
En esa misma nota, Chediek se refirió al momento en el que conoció a Jorge Molinari Walker, su flamante esposo: “Mi cuñada Cristina me dijo que me quería presentar a su vecino viudo, pero yo no quería saber nada, no estaba lista. Pasó bastante tiempo hasta que empezamos a hablar. Hablamos mucho. Es que no quería sufrir de nuevo, aún estaba cicatrizando. Él no es una persona que se caracterice por ser paciente, así que valoro mucho esa paciencia que me tuvo. Después de un tiempo, me atreví a iniciar una relación con Jorge, quien no tiene nada que ver con el medio”.
El matrimonio con Jorge Lanata

Durante la entrevista que Silvina Shediek le brindó a LA NACIÓN, se animó a hablar sobre su vínculo con Jorge Lanata. En esa charla, brindada antes de la muerte del periodista, ella aseguraba que no le molestaba que se hablara de ese vínculo como “el matrimonio más corto del espectáculo argentino”, y expresó: “Hay gente que estira vínculos que ya saben que no van a andar y se quedan juntos un par de años, eso da menos para hablar a los demás; en este caso fueron cinco meses”.
A comienzos de la década del noventa, cuando Chediek y el periodista Jorge Lanata se casaron, no faltaron las miradas de asombro, quizás el prejuicio -una vez más- opinando desde el afuera caprichosamente. Todo duró muy poco, pero la resolución estuvo muy lejos de convertirse en un escándalo mediático. “El paso del tiempo hace que lo recuerde sonriendo, no tengo ningún tipo de rencor. Solté eso hace mucho tiempo, pero me hace gracia que treinta y tres años más tarde aún haya un eco”. Dos años después de la separación, que es el tiempo mínimo que indica la ley para efectuar el divorcio, Chediek contó que volvió a ver a Lanata: “Nos vimos para hacer el trámite y nos reímos”.