Rica en proteínas: reparten soja texturizada a comedores y organizaciones sociales
El Bancos de Alimentos Argentina y Fundación Aportar lanzaron Nutri Más para dar una respuesta solidaria

Desde San Lorenzo, el polo agroindustrial de Santa Fe, un alimento con potencial transformador comienza a recorrer el país para llegar donde más se necesita. Se trata de la soja texturizada, un producto de alto valor nutricional para los humanos, que ahora será distribuido a comedores y organizaciones sociales de todo el territorio argentino gracias al lanzamiento del programa Nutri Más, del Bancos de Alimentos Argentina y Fundación Aportar.
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Según señalaron, el programa surge en respuesta a la alarmante realidad social, en la que muchos argentinos viven en situación de pobreza y 7 de cada 10 niños no tienen acceso a una alimentación adecuada. El programa busca implementar un sistema sostenible de distribución de soja texturizada a comedores y organizaciones sociales vinculadas a los Bancos de Alimentos en todo el país, con el objetivo de impactar directamente en la nutrición de miles de niños, jóvenes y adultos en situación de vulnerabilidad.
“Buscamos alimentar, educar, innovar y fortalecer nuestras comunidades, generando un impacto sostenible en la reducción del hambre y la desnutrición en el país. La soja texturizada es una opción saludable, rica en proteínas, baja en grasas y costo, ideal para contribuir a la seguridad alimentaria. Su aporte nutricional la convierte en una herramienta clave para mejorar las dietas de las comunidades más necesitadas”, explicó Santiago Ramos, presidente de Bancos de Alimentos Argentina, asociación civil sin fines de lucro que agrupa a los Bancos de Alimentos del país.
Según señaló, la distribución de soja texturizada se realizará desde la localidad de San Lorenzo, en Santa Fe. Esta es una región agroindustrial de la Argentina y desde allí se movilizará la producción y distribución del alimento, gracias al compromiso del sector productivo con el desarrollo de un modelo sostenible para la alimentación local y nacional a cargo de los Bancos de Alimentos, los cuales ya tienen experiencia previa en la distribución de soja texturizada, con excelente aceptación entre los beneficiarios de 20 Bancos de Alimentos formalizados y 5 iniciativas en más de 20 provincias.
Adrián Caramuto, presidente de la Fundación Aportar, agregó: “San Lorenzo es el epicentro agroexportador de Argentina, que concentra la mayor parte de las exportaciones de granos, aceites y subproductos del país. La soja, uno de los principales productos de exportación, no solo impulsa la economía, sino que también puede convertirse en una herramienta fundamental para mejorar la alimentación y la calidad de vida de muchas personas. Por eso, es esencial reconocer y potenciar el impacto de esta región en proyectos como Nutri Más, que promueven la seguridad alimentaria y el acceso a fuentes de nutrición”.
Además de la distribución del alimento, el proyecto promueve la educación nutricional a través de capacitaciones y campañas de concientización, brindando herramientas para que las familias puedan mejorar sus hábitos alimenticios de manera sostenible.
El programa fue presentado en el marco del aniversario de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de San Lorenzo y su zona, y ha sido declarado de interés por la provincia de Santa Fe. A su vez, ya cuenta con el primer aporte de la empresa Cofco International Argentina, que donará un camión de harina de soja HP (Hi Pro) para convertirla en soja texturizada y realizar, así, la primera distribución del producto en el país. Esta cantidad de harina equivale a 22.000 kilos de soja texturizada, que se traducen en 220.000 platos de comida.
Qué es la soja texturizada
La soja texturizada es un alimento vegetal procesado que se obtiene de la harina de soja, rica en proteínas. Este producto se usa muchas veces como sustituto de la carne en dietas vegetarianas y veganas, debido a su alto contenido proteico, su versatilidad en la cocina y su capacidad para absorber sabores. A pesar de ser un producto procesado, se considera una opción saludable, ya que no contiene aditivos, azúcares añadidos ni conservantes artificiales. Además, cuenta con un alto perfil nutricional.
Por cada 100 gramos, aporta aproximadamente:
- 50 gramos de proteína (un contenido proteico similar al de la carne).
- 30 gramos de carbohidratos, que proporcionan energía.
- Entre 2 y 4 gramos de grasas, de los cuales solo 0,6 gramos son grasas saturadas, lo que la hace una opción baja en grasas poco saludables.
- 4 gramos de fibra, que contribuyen a una buena digestión y ayudan a mantener la saciedad por más tiempo.
- 9 miligramos de minerales como fósforo, calcio, hierro, magnesio y potasio.
- Vitaminas del grupo B, además de vitaminas A y C, lo que la convierte en un alimento completo para una dieta equilibrada.