Reseña: "¿Para qué sirve leer novelas?", de Alejandra Laera
“Un mundo en crisis, pobreza sin freno, desigualdad en aumento, democracia en trance, catástrofe ecológica, descontento social”, sintetiza Alejandra Laera al comienzo de ¿Para qué sirve leer novelas?, un ensayo guiado por una directriz neosetentista y caracterizado por un acérrimo anticapitalismo.“La literatura es la gran abastecedora de argumentos del imaginario social sobre el estado crítico del mundo”, afirma la autora, y plantea el análisis de varias novelas según una clasificación que gira en torno a los “tres ejes irreductibles” del capitalismo: el dinero, el trabajo y el tiempo.En su estudio acuña una serie de conceptos (relatos calendarizados, imaginación de mercado, novelas de la aceleración o la desaceleración, imaginación ecoafectiva) y hace prevalecer lo sociopolítico y lo económico sobre lo estrictamente literario.Entre las obras examinadas figuran Los diarios de Emilio Renzi (Ricardo Piglia), Historia del dinero (Alan Pauls), Derroche (María Sonia Cristoff), El escritor comido (Sergio Bizzio), El desperdicio (Matilde Sánchez) y Distancia de rescate (Samanta Schweblin).¿Para qué sirve leer novelas? ofrece un cuidadoso trabajo de investigación y representa un valioso libro de consulta, en especial –por su riguroso estilo académico– para docentes de literatura argentina. Sus páginas reflejan la convicción fundamental de Laera: su “confianza en que la literatura, y en particular la novela, nos puede acompañar […] en la comprensión del mundo que habitamos y entregarnos propuestas para vivir mejor en él”.“¿Para qué sirve leer novelas?”Alejandra Laera(Fondo de Cultura Económica)191 páginas $ 14.900

“Un mundo en crisis, pobreza sin freno, desigualdad en aumento, democracia en trance, catástrofe ecológica, descontento social”, sintetiza Alejandra Laera al comienzo de ¿Para qué sirve leer novelas?, un ensayo guiado por una directriz neosetentista y caracterizado por un acérrimo anticapitalismo.
“La literatura es la gran abastecedora de argumentos del imaginario social sobre el estado crítico del mundo”, afirma la autora, y plantea el análisis de varias novelas según una clasificación que gira en torno a los “tres ejes irreductibles” del capitalismo: el dinero, el trabajo y el tiempo.
En su estudio acuña una serie de conceptos (relatos calendarizados, imaginación de mercado, novelas de la aceleración o la desaceleración, imaginación ecoafectiva) y hace prevalecer lo sociopolítico y lo económico sobre lo estrictamente literario.
Entre las obras examinadas figuran Los diarios de Emilio Renzi (Ricardo Piglia), Historia del dinero (Alan Pauls), Derroche (María Sonia Cristoff), El escritor comido (Sergio Bizzio), El desperdicio (Matilde Sánchez) y Distancia de rescate (Samanta Schweblin).
¿Para qué sirve leer novelas? ofrece un cuidadoso trabajo de investigación y representa un valioso libro de consulta, en especial –por su riguroso estilo académico– para docentes de literatura argentina. Sus páginas reflejan la convicción fundamental de Laera: su “confianza en que la literatura, y en particular la novela, nos puede acompañar […] en la comprensión del mundo que habitamos y entregarnos propuestas para vivir mejor en él”.
“¿Para qué sirve leer novelas?”
Alejandra Laera
(Fondo de Cultura Económica)
191 páginas
$ 14.900