No lleva aguacate ni tomate: esta ensalada es perfecta para una cena ligera, se hace rápido y con solo tres ingredientes

Si buscas expandir tus horizontes y entender las ensaladas de otra manera, debes saber que es posible: existe una forma de hacer que tus cenas sean más emocionantes, con un delicioso plato de tres ingredientesDeliciosa, sin ensuciar y lista en 20 minutos: la cena rápida que es ideal también para llevar en el tupper Tomate y aguacate. Aguacate y tomate. Estos dos ingredientes a menudo protagonizan las ensaladas de muchos hogares. No es para menos, ya que ambos ingredientes hacen una pareja perfecta para muchos. Para otros, se tratan del motivo principal por el que no consumen este plato ligero y saludable. Pero eliminar las ensaladas de nuestra dieta no es buena idea, puesto que, por lo general, se elaboran en tiempo récord y sin necesidad de encender un fogón. Se trata de la cocina más alejada de la cocina, donde solo hay que mezclar. Esto es especialmente relevante durante las cenas, un momento al que muchos no quieren dedicarle mucho tiempo. El cansancio de la rutina puede acumularse al final del día, lo que hace a la ensalada la reina de las cenas rápidas y sin esfuerzo. Como añadido, las ensaladas raramente son rígidas en sus recetas. Si buscas expandir tus horizontes y entender las ensaladas de otra manera, debes saber que es posible. Existe una forma de hacer que tus cenas sean más emocionantes, con un delicioso plato de tres ingredientes. Se trata de la ensalada Waldorf, que consiste en apio, manzana y mayonesa. Es una ensalada donde los ácidos son claros protagonistas, con un sabor original y único, una receta que está muy lejos de los perfiles gustativos que aportan el tomate y el aguacate. Los orígenes de esta receta son aristocráticos. Fue inventada en el siglo XIX por el maître del Hotel Waldorf, Oscar Tschirky. Y es que la cocina de autor no está limitada al presente. La ensalada de Tschirky tuvo una gran acogida entre los huéspedes del establecimiento, y poco a poco se fue popularizando, sobreviviendo a nuestros días. Cómo preparar la ensalada Waldorf Por su acidez, es preferible la manzana Granny Smith La elaboración de esta ensalada es tan sencilla como sus ingredientes. Pero, precisamente por su sobriedad, es importante prestar atención a los pequeños detalles, con el fin de asegurarnos de que queda equilibrada. Para preparar esta receta para cuatro personas, necesitas lo siguiente: Cuatro cogollos de lechuga: aunque es tentador adquirir una lechuga iceberg entera, te recomendamos que adquieras solo los cogollos para esta ensalada. Su textura crujiente y refrescante acompañará a la perfección a las manzanas. Manzana Granny Smith: cualquier variedad de manzana que sea ácida y firme es perfecta para esta receta, pero recomendamos la más popular, la Granny Smith. Su consistencia y sabor la hace ideal para ensaladas, ya que no aporta un dulzor excesivo y combina con suavidad con el resto de elementos de este tipo de recetas. Dos cucharadas de mayonesa: aunque recomendamos que la elabores tú, puedes utilizar una mayonesa comercial para este plato. Es importante que prestes atención a la acidez de esta salsa antes de incorporarla a la ensalada. Muchas mayonesas de supermercado llevan vinagre blanco con el objetivo de estabilizar la emulsión. Aunque en la mayoría de marcas su sabor es imperceptible, este ingrediente puede darle un toque ácido que puede potenciar en exceso el que ya aporta la manzana de la ensalada. Se trata de hacer un equilibrio entre los matices que aportan estos dos ingredientes, para no acabar con un plato que abrume de forma negativa nuestras papilas gustativas o, peor aún, las aburra. Tres troncos de apio: se trata de un ingrediente opcional que potenciará el frescor de la manzana y acompañará al amargor de la lechuga. Como añadido, aromatizará nuestra e

Abr 24, 2025 - 13:24
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No lleva aguacate ni tomate: esta ensalada es perfecta para una cena ligera, se hace rápido y con solo tres ingredientes

No lleva aguacate ni tomate: esta ensalada es perfecta para una cena ligera, se hace rápido y con solo tres ingredientes

Si buscas expandir tus horizontes y entender las ensaladas de otra manera, debes saber que es posible: existe una forma de hacer que tus cenas sean más emocionantes, con un delicioso plato de tres ingredientes

Deliciosa, sin ensuciar y lista en 20 minutos: la cena rápida que es ideal también para llevar en el tupper

Tomate y aguacate. Aguacate y tomate. Estos dos ingredientes a menudo protagonizan las ensaladas de muchos hogares. No es para menos, ya que ambos ingredientes hacen una pareja perfecta para muchos. Para otros, se tratan del motivo principal por el que no consumen este plato ligero y saludable. Pero eliminar las ensaladas de nuestra dieta no es buena idea, puesto que, por lo general, se elaboran en tiempo récord y sin necesidad de encender un fogón.

Se trata de la cocina más alejada de la cocina, donde solo hay que mezclar. Esto es especialmente relevante durante las cenas, un momento al que muchos no quieren dedicarle mucho tiempo. El cansancio de la rutina puede acumularse al final del día, lo que hace a la ensalada la reina de las cenas rápidas y sin esfuerzo. Como añadido, las ensaladas raramente son rígidas en sus recetas. Si buscas expandir tus horizontes y entender las ensaladas de otra manera, debes saber que es posible. Existe una forma de hacer que tus cenas sean más emocionantes, con un delicioso plato de tres ingredientes.

Se trata de la ensalada Waldorf, que consiste en apio, manzana y mayonesa. Es una ensalada donde los ácidos son claros protagonistas, con un sabor original y único, una receta que está muy lejos de los perfiles gustativos que aportan el tomate y el aguacate.

Los orígenes de esta receta son aristocráticos. Fue inventada en el siglo XIX por el maître del Hotel Waldorf, Oscar Tschirky. Y es que la cocina de autor no está limitada al presente. La ensalada de Tschirky tuvo una gran acogida entre los huéspedes del establecimiento, y poco a poco se fue popularizando, sobreviviendo a nuestros días.

Cómo preparar la ensalada Waldorf

Por su acidez, es preferible la manzana Granny Smith

La elaboración de esta ensalada es tan sencilla como sus ingredientes. Pero, precisamente por su sobriedad, es importante prestar atención a los pequeños detalles, con el fin de asegurarnos de que queda equilibrada. Para preparar esta receta para cuatro personas, necesitas lo siguiente:

  • Cuatro cogollos de lechuga: aunque es tentador adquirir una lechuga iceberg entera, te recomendamos que adquieras solo los cogollos para esta ensalada. Su textura crujiente y refrescante acompañará a la perfección a las manzanas.
  • Manzana Granny Smith: cualquier variedad de manzana que sea ácida y firme es perfecta para esta receta, pero recomendamos la más popular, la Granny Smith. Su consistencia y sabor la hace ideal para ensaladas, ya que no aporta un dulzor excesivo y combina con suavidad con el resto de elementos de este tipo de recetas.
  • Dos cucharadas de mayonesa: aunque recomendamos que la elabores tú, puedes utilizar una mayonesa comercial para este plato. Es importante que prestes atención a la acidez de esta salsa antes de incorporarla a la ensalada. Muchas mayonesas de supermercado llevan vinagre blanco con el objetivo de estabilizar la emulsión. Aunque en la mayoría de marcas su sabor es imperceptible, este ingrediente puede darle un toque ácido que puede potenciar en exceso el que ya aporta la manzana de la ensalada. Se trata de hacer un equilibrio entre los matices que aportan estos dos ingredientes, para no acabar con un plato que abrume de forma negativa nuestras papilas gustativas o, peor aún, las aburra.
  • Tres troncos de apio: se trata de un ingrediente opcional que potenciará el frescor de la manzana y acompañará al amargor de la lechuga. Como añadido, aromatizará nuestra ensalada.
  • 100 gramos de nueces: de nuevo, otro ingrediente opcional, que dará un toque crocante a nuestro plato. Las nueces son, además, una pareja perfecta de la manzana.
  • 100 gramos de pasas: las pasas traerán el frente el sabor dulce de la manzana, además de que su ligera acidez armonizará con el resto de los ingredientes del plato.
  • Sal.

Como hemos comentado, este plato es todo un ejercicio de equilibrismo. No dudes en jugar con las proporciones de los ingredientes para obtener un sabor adaptado a tu paladar.

También debes tener cuenta la oxidación de la manzana. Si esta fruta permanece cortada y a la intemperie durante mucho tiempo, adoptará un color anaranjado que no deseamos, por lo que intenta preparar esta receta justo antes de su consumición. Para elaborar la ensalada Waldorf, debes seguir los siguientes pasos:

  1. Tuesta las nueces en una sartén. Sabrás que están listas porque se oscurecerán y se volverán aromáticas. Después, resérvalas para que se enfríen.
  2. Lava la lechuga y escúrrela. Te recomendamos que te sirvas de una centrifugadora para este fin, ya que es vital que no retenga humedad, de lo contrario, quedará blanda y arruinará la salsa. Si no dispones de una centrifugadora, puedes utilizar un colador grande. Para ello, lava la lechuga en el colador y sacúdela con suavidad. Después, tapa la parte superior del colador con un plato grande. En un exterior o una zona de tu casa que no te importe que se moje, sujeta el plato con firmeza y sacude con energía el colador, hasta que no desprenda más agua.
  3. Pela y corta las manzanas en dados de pequeño tamaño.
  4. Lava el apio y quítale las hebras con la ayuda de un cuchillo. Después, córtalo a trozos.
  5. En la ensaladera mezcla el apio, la manzana, la mitad de las nueces y las uvas pasas y la mayonesa.
  6. Solo queda el emplatado. En la fuente donde vas a servir esta ensalada pon la lechuga. Sobre ella, incorpora la mezcla de apio, manzana, nueces y pasas con la mayonesa. Con las nueces sobrantes decora el plato.

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