Ni jamón ni chorizo: el embutido típico de Castilla y León que poca gente conoce en el resto de España
La gastronomía castellanoleonesa incluye manjares como el jamón de ibérico de Guijuelo, el lechazo asado, los torreznos de Soria y este peculiar embutido que no es muy conocido en el resto de nuestro país.

Castilla y León es una comunidad autónoma conocida en España por su gran repertorio de embutidos. Está el jamón ibérico de Guijuelo, la morcilla de Burgos (con la que se puede hacer esta riquísima receta de tortilla con calabacín), los torreznos de Soria o el tasajo de Candelada, entre otros. Además de ellos, existe otra variedad procedente de Salamanca que es considerada por los habitantes de la zona como un tesoro culinario.
Este embutido es popular en Ciudad Rodrigo, y está hecho con ingredientes como la manteca de cerdo, el pimentón o el ajo. Antiguamente se le llamaba 'chorizo del pobre' pero, en la actualidad, es un producto de Salamanca digno de probar y degustar.
Farinato, el embutido típico de Salamanca
El farinato es un embutido que, por su forma, se parece bastante a un chorizo. Según explica en un artículo de su página web la empresa de alimentación Hermanos Hoyos, "se elabora a partir de una mezcla de ingredientes, entre los que se incluyen manteca de cerdo, pimentón, cebolla, ajo, anís, pan y sal".
En cuanto a su sabor, el farinato destaca por ser intenso, que mezcla lo ahumado del pimentón con lo dulce del anís. "Su sabor intenso y su textura única lo convierten en un manjar muy apreciado en la gastronomía salmantina", señalan desde la misma empresa.
El farinato es un producto muy popular en el municipio de Ciudad Rodrigo, ubicado en la provincia de Salamanca. De hecho, según señala la empresa Viandas Store en un post de Instagram, "forma parte de su cultura etnográfica" y "tal es el arraigo de este embutido con la localidad que sus habitantes son apodados ‘farinatos’". A su vez, en 2007 apareció la Marca de Garantía 'Farinato de Ciudad Rodrigo'.
¿Qué recetas se pueden hacer con el farinato?
La empresa Hermanos Hoyos destaca la gran versatilidad del farinato en el mundo de la gastronomía. En el mismo artículo, mencionan que es muy frecuente consumir este producto con unos huevos fritos. "Se corta el embutido en rodajas y se fríe junto con los huevos. Esta combinación de sabores y texturas es todo un clásico en la gastronomía salmantina", explican.
También destacan que el farinato es ideal para elaborar croquetas, empanadas o "platos de pasta y arroz. Su sabor intenso y especiado le da un toque especial a cualquier receta". ¿Te apuntas este producto para probar la próxima vez que pises Salamanca?