Los retos del Gobierno para avanzar con medidas duras y sumar votos

Con la campaña porteña ya rodando, las usinas de la Casa Rosada se activaron para poner en marcha la maquinaria del mensaje anticasta junto a todo el folcklore proselitista libertario. Pero ahora Milei deberá gobernar en paralelo y ofrecer resultados concretos a una ciudadanía expectante

Abr 27, 2025 - 13:05
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Los retos del Gobierno para avanzar con medidas duras y sumar votos

El inicio del calendario electoral en territorio porteño desata un desconocido escenario en el mundo de Javier Milei: se abre en adelante un amplio universo de dilemas y desafíos para un Presidente ajeno a la política que ahora deberá gestionar en campaña y ganar las elecciones para aumentar su sustento de poder en el Congreso.

La campaña electoral ya empezó a rodar en territorio porteño y las usinas de la Casa Rosada se activaron para poner en marcha la maquinaria del mensaje anticasta, motosierra y todos los aditivos de folcklore proselitista libertario que en las presidenciales le dieron rédito a Milei. El problema es que ahora la figura de Milei deberá gobernar en paralelo y ofrecer resultados concretos a una ciudadanía que espera mejoras en la economía.

El Presidente acaba de señalar desde esta nueva perspectiva una frase que pasó casi desapercibida: "No hago política económica mirando lo electoral", dijo. A lo largo de una entrevista radial con Cristina Pérez el jefe de Estado se explayó sobre esta tesis al añadir que "hago política económica mirando lo moral". 

Se trata de una nueva fórmula de estrategia electoral para un Presidente que tendrá varios alfiles disputando en las urnas y que descree de la política tradicional. Por lo pronto, deberá dar pelea en la Ciudad de Buenos Aires con su alter ego y portavoz oficial Manuel Adorni en la campaña porteña pero al mismo tiempo Milei tendrá que dar respuesta a esos mismos porteños que no llegan a fin de mes o que están desesperanzados con los resultados aun escasos de su gestión y sustentar el esquema de comunicación de su gobierno encarnado en Adorni.

¿Podrá el Presidente seguir actuando igual que en la campaña del 2023 en la que apenas era un outsider de la política que no tenía responsabilidad alguna de gobierno? ¿Servirá esta vez el mensaje anticasta para mantener en vilo la llama libertaria en elecciones para un Presidente que está en pleno ejercicio del poder? 

Milei impone una vez más el "principio de revelación" para esta campaña. Es decir, pondrá en sobreexposición a aquellos dirigentes/candidatos que no avalen sus ideas y proyectos tendientes a mejorar la economía. Una de las pruebas recientes de esto fue el acuerdo con el FMI y la apertura a medias del cepo. "Decían que no lo iba a hacer porque es un año electoral y lo conseguimos contra todos los pronósticos de la política", dijo el mandatario sobre ese acuerdo y la salida del cepo.

En el medio de esto se colaron los duros cuestionamientos de la oposición a los acuerdos del gobierno con el FMI. El Partido Justicialista (PJ) acaba de emitir un duro comunicado contra la directora del organismo, Kristalina Georgieva, acusándola de "intromisión electoral" por sus declaraciones durante las Reuniones de Primavera en Washington, donde instó a "mantener el rumbo" económico de cara a las elecciones legislativas de este año en Argentina. La izquierda redobló la apuesta en críticas al gobierno y desde el PRO y la UCR mantienen apoyos con cautela. La jefa del Fondo Monetario buscó moderar el tono de sus declaraciones. "Las elecciones son para los argentinos, no para nosotros", aclaró.

No obstante, el Gobierno sigue su hoja de ruta y se abraza más fuerte con el Fondo. El ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, y Luis Caputo estuvieron en Washington con Georgieva, le regalaron un pin de la motosierra y se comprometieron a seguir adelante con las reformas laboral, impositiva y jubilatoria que ahora exige el FMI. ¿Será redituable para el Gobierno en términos electorales un apego tan cercano con el Fondo?

Las encuestas de opinión en la Argentina exponen una imagen bastante negativa del FMI. Siempre fue así y ahora no hay excepciones. El último sondeo de la consultora Opina Argentina, por ejemplo, reveló que apenas un 32% de los argentinos tiene una imagen favorable del organismo financiero. En otros sondeos pasa lo mismo: los argentinos miran al FMI de modo eminentemente negativo. Solo tres de cada diez encuestados tienen una imagen positiva del organismo internacional.

Reforma impositiva en estudio

Entre todos los reclamos del Fondo el presidente Milei postergaría para después de las elecciones de octubre las reformas laboral y jubilatoria. Nunca son reformas políticamente correctas en medio de una campaña. En cambio, Milei dio indicios de que estaría dispuesta a irrumpir en plena campaña con una novedosa reforma impositiva. Algo de esto habló con su economista favorito en la residencia de Olivos, Jesús Huerta de Soto. 

Junto con el profesor Phillip Bagus, entre platos de carne argentina y vino mendocino el presidente exploró con el economista estrella el plan de reforma impositiva que prepara. Se evalúa una reforma en el IVA donde la Nación cobrará 11 puntos y si la provincia quiere sumar los 10 puntos adicionales deberán hacerse cargo los gobernadores. Es lo que el gobierno llama un "principio de correspondencia fiscal" para promover que las provincias compitan con bajas de impuestos. Huerta de Soto coincidió con Milei en esa estructura impositiva y en otros cambios para favorecer a los empresarios.

Si avanza con esta propuesta, Milei está dispuesto a confrontar a fondo con los gobernadores en medio de la campaña. A la falta de obra pública por falta de fondos que castiga a muchas provincias y se le agregará el nuevo esquema impositivo. No sólo no habrá corte de cintas en la campaña de los gobernadores sino que hay amenaza de una reducción en la recaudación.

Federico Sturzenegger avanza aceleradamente con un nuevo plan de "motosierra Deep". En el Ministerio de Desregulación preparan un paquete de medidas desregulatorias y recortes en el Estado. El tiempo juega en contra de Sturzenegger ya que buena parte de esas medidas se sustentan en las facultades delegadas que el Congreso le otorgó en la Ley Bases por un año al Poder Ejecutivo. Ese plazo vence a fin de junio. 

Después de esa fecha no habrá más posibilidad de que el Gobierno pueda seguir con varias reformas o cambios legales. Deberá volver a contar con aval parlamentario. El diputado del PRO, Gerardo Milman acaba de presentar un proyecto de ley para prorrogar por un año esas facultades delgadas al Gobierno. Difícil que en un año electoral el Congreso acepte ello.

Otro dato novedoso en la era Milei-presidente en campaña. El gobierno deberá explicar este martes en la Cámara de Diputados los pormenores del caso $LIBRA y la supuesta intervención de Milei. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro de Justicia, Mariano Cuneo Libarona, serán interpelados en el recinto por este tema. Hay más funcionarios citados por el Congreso como ser Luis Caputo o Santiago Bausilli del BCRA. Pero en la Casa Rosada aseguran que allí culmina el desfile de interpelaciones. No quieren que el show se prolongue en plena campaña aunque la oposición cuenta con la comisión investigadora del criptogate que tiene mandato de al menos tres meses para avanzar con investigaciones de un caso que salpica al gobierno. Es decir, el show puede durar hasta octubre.

Como antídoto elegido por el Presidente para enfrentar tantos embates en plena campaña, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, cobra más poder. Al armado electoral y la "guillotina" la hermana del Presidente sumó funciones que exceden su área en particular y absorberá la tarea de organizar las cadenas nacionales y las transmisiones de los actos oficiales. A través del decreto 272/2025 el Poder Ejecutivo decidió esta modificación en el organigrama de la Administración Nacional y Karina Milei estará a cargo de todo el contenido de la comunicación oficial en medio de la campaña.

Otro condimento que deberá enfrentar Milei en plena campaña es el de la conflictividad social y los reclamos de los gremios. El secretario de Trabajo, Julio Cordero, no cierra el diálogo a nadie aunque tiene en las puertas del Ministerio de Capital Humano los pedidos de reapertura de paritarias que exige la CGT. 

En el Gobierno alertan que buena parte de las paritarias que se cerraron este año superaron con creces a la inflación. Remarcan que gremios como el de bancarios, concesionario de autos, construcción, encargados de edificios, madera, maestranza o plásticos terminaron cerrando por arriba del 7,1% de acumulado de inflación en este año. Pero los sindicatos creen que la inflación se está desmadrando y aseguran que habrá que reabrir paritarias cuanto antes. El Gobierno sabe en la intimidad que esa reapertura es un peligro para un incremento en la inflación y que nuevas protestas o paros sólo complicarán el camino de la campaña electoral de LLA.

El otro problema inmediato para Milei en medio de la campaña se llama provincia de Buenos Aires: debe definir si cerrar o no un acuerdo con el PRO en ese distrito para evitar que el kirchnerismo triunfe. Y Macri no le hace la vida fácil a Milei. El expresidente aseguró que el PRO pondrá "todo lo mejor" para lograr una alianza electoral, pero deslizó una crítica a los libertarios: "Me da la sensación que a todos los que tenían precio ya los compraron", dijo.

La respuesta del jefe de Estado no se hizo esperar y le reclamó: "Que muestre la factura", retrucó. En el medio, el diputado Cristian Ritondo insistió en la necesidad de dejar de lado las diferencias personales para alcanzar un entendimiento que permita un cambio profundo en la provincia. Nadie sabe cómo termina esa pelea. Al parecer, el legado de unidad que dejó el Papa Francisco y de "convivencia en las diferencias" no caló tan fuerte en algunos sectores de la política.

El Presidente no se correrá un ápice de su hoja de ruta por más que haya campaña electoral y necesite sumar votos. Cree que la estrategia de ajuste, reducción del gasto, motosierra, salida del cepo, baja de la inflación y discurso anticasta serán herramientas suficientes para que LLA gane los comicios legislativos. Habrá que ver si el nuevo esquema de práctica proselitista de Milei de "hacer política económica mirando lo moral" funciona en una Argentina acostumbrada a campañas políticas tradicionales. Todavía es una verdadera incógnita.