Los Kings dan señales de vida

Tras meses a la deriva, los Sacramento Kings parecen dispuestos a cerrar la liga regular reivindicándose como candidatos a playoffs. El cuadro californiano ha cerrado su gira por el Este venciendo en Detroit por 117-127, afianzándose en la novena posición del Oeste y, lo que es más importante, acumulando buenas sensaciones con las que quitarse la sensación de decepción de este segundo tramo del curso.

Y es que, a estas alturas, del play-in es ya casi imposible que se caigan. Pero, salvo que mejore mucho la cosa, parece también poco probable que salgan como candidatos.

Zach LaVine, funcionario del play-in

Suena a nombre de tebeo de Ibáñez, pero es realidad. Tras sus 25 puntos en Charlotte y los 37 de Cleveland, LaVine ha ido aún más allá en el Little Caesars Arena hasta alcanzar los 43, firmando su mejor anotación de la temporada y dejando a los Kings con la presencia en la postemporada ya prácticamente garantizada.

Como ya hizo en sus últimos años en los Bulls, el escolta estará salvo sorpresa mayúscula en el play-in. Quizás tenerlo como primera espada no dé para tener un techo más alto, pero te asegura al menos este suelo. Era verdad en el Este y parece serlo también en el Oeste.

Fluidez y velocidad

Para ello, no obstante, Sacramento tuvo que dar la vuelta a un choque que había empezado con un dominio claro de los Pistons. En una primera mitad en la que rozaron la excelencia ofensiva, el cuadro de Bickerstaff presumió de ritmo, juego en transición y una buena circulación de balón, poniendo contra las cuerdas a unos Kings que llegaron a verse 18 abajo.

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