La OCU revela la verdad: estos alimentos siguen siendo seguros tras la fecha de caducidad

Hay una serie de alimentos que siguen siendo seguros, después de la fecha de caducidad, la OCU ha dado con la lista de ellos. La realidad es que debemos empezar a prepararnos para darlo todo, de la mano de una serie de detalles que hasta la fecha nunca hubiéramos tenido en cuenta. Por lo que, habrá llegado el momento de apostar claramente por una serie de elementos que quizás hasta ahora no habíamos ni imaginado en estos días que tenemos por delante.

Es hora de dejar salir determinados detalles que pueden acabar siendo lo que realmente nos acompañe en este tipo de detalles que hasta la fecha no pensábamos que hasta ahora no pensábamos que podríamos obtener. Podemos aprovechar mucho mejor unos alimentos que van en aumento y acaban siendo más y más costosos. En especial, si tenemos en cuenta que deberemos empezar a pensar en un tipo de elemento que quizás hasta ahora no pensábamos que habríamos tenido en cuenta. Es hora de dejar salir este tipo de detalles que nos harán descubrir una alimentación que quizás hasta la fecha no habíamos tenido en cuenta.

Estos alimentos siguen siendo seguros tras la fecha de caducidad

La caducidad de los alimentos son un tipo de elemento que puede acabar siendo el que marque un antes y un después. Por lo que, habrá llegado el momento de apostar por un tipo de detalle que será el que nos afecte en estos días en los que cada segundo cuenta.

Tocará ver qué es lo que nos puede pasar, de la mano de algunos detalles que pueden acabar siendo fundamentales. En especial en estos días en los que quizás deberemos apostar claramente por algunos elementos que nos acompañarán en estos días que tenemos por delante.

Es hora de intentar apostar por un elemento que puede acabar siendo el que nos acompañe en estas jornadas que hasta la fecha no habíamos esperado. Es momento de dejar salir algunos detalles que son fundamentales y que hasta estos días no cobraban la importancia que se merecían.

Cada euro cuenta y puede acabar siendo lo que nos acompañe en estos días que pueden ser los que nos hagan reaccionar a tiempo. Con la mirada puesta a algunas situaciones del todo inesperadas que pueden ser excepcionales. Estos alimentos nos pueden durar más de lo que esperaríamos.

La verdad la revela la OCU

La OCU ha revelado toda la verdad de una caducidad que puede acabar siendo la que nos haga aprovechar al máximo cada uno de los ingredientes que tenemos por delante. Es hora de apostar claramente por ciertos detalles que serán esenciales y que pueden acabar siendo los que nos hagan aprovechar al máximo cada euro que gastamos en comida.

La OCU nos dice que: «Hay alimentos que se pueden consumir incluso aunque estén pasados de fecha: eso sucede con yogures, pan de molde, bollos y galletas, patatas fritas y frutos secos, pastas, arroces y legumbres, embutidos y quesos curados, sopas y salsas de sobre, envases de tomate frito, refrescos y bebidas alcohólicas».

Siguiendo con la explicación de estos expertos, debemos tener en cuenta una serie de elementos que serán fundamentales y que nos ayudarán a entender mejor esta fecha de caducidad. Podemos comer alimentos caducados, siempre y cuando:

• No estén abiertos.
• No presenten signos de estar deteriorados: podemos mirar que el envase este integro, sin roturas o golpes, que no se aprecie un crecimiento de moho (esto puede ocurrir con el pan de molde…).
• Eso sí, puede que hayan perdido algo de aroma o sabor, que textura se modifique (más secos, duros, correosos…) o cambie algo color (estén oscurecidos, oxidados…)

Hay otro tipo de alimentos que debemos respetar y que en cierta manera no podremos empezar a poner sobre la mesa en estas jornadas que quizás hasta ahora no hubiéramos tenido en cuenta.

En el caso de las frutas y las verduras, lo mejor es fiarte de tus sentidostu paladar es el mejor juez: el aspecto, el sabor, la textura y el olor del alimento permiten saber en qué estado se encuentran. Echa un vistazo y cómetelas si no están exageradamente pochas o deterioradas. Ojo con las zonas podridas o enmohecidas: salvo en los jamones y embutidos curados, quesos duros o vegetales turgentes (como una zanahoria o un pimiento), en los demás alimentos no se puede quitar el moho y ya está, porque los mohos son hongos que colonizan los productos y se nutren a su costa, llegando a penetrar profundamente en su interior a través del micelio, unas finas ramificaciones difíciles de percibir a simple vista. Y presentan dos problemas pueden producir micotoxinas, sustancias tóxicas y pueden dar lugar al crecimiento de bacterias patógenas indetectables por el ojo humano.