La firma se hunde en bolsa pese a su beneficio récord al frenar sus ventas en el arranque del año

Castigo en bolsa de los inversores a Inditex tras la presentación de sus resultados anuales. Sus acciones se hunden más del 7% hasta el entorno de los 44,8 euros. El gigante textil registró su tercer beneficio récord consecutivo en el ejercicio fiscal 2024, cuando sus ganancias se incrementaron un 9% hasta superar los 5.870 millones de euros. La firma con sede en Arteixo (A Coruña) también disparó sus ventas un 7,5% hasta los 38.632 millones, sin embargo, estas se han frenado en lo que va de año.

Las ventas de la compañía aumentaron un 4% entre el 1 de febrero y el 10 de marzo de 2025, cuando en años anteriores ha venido registrando incrementos superiores, próximos al doble dígito. Los inversores temen que esto puede reflejar un cierto enfriamiento en el consumo, en un momento de fuerte incertidumbre a nivel global, en plena efervescencia de las tensiones comerciales y geopolíticas.

"Las tensiones aduaneras y las incertidumbres globales pueden generar presiones, aunque consideramos que la estructura de Inditex, con su diversificación global y su eficiente gestión operativa, la hace resiliente frente a estos factores", sostiene Javier Molina, analista senior de mercados para eToro. El experto considera que, a pesar de la constante presión del mercado, que exige a la empresa gallega alcanzar cifras mejores trimestre tras trimestre y año tras año, Inditex ha logrado registrar resultados "sobresalientes".

Destaca, en concreto, su posición de caja neta positiva, sin deuda, algo poco común en un entorno fuertemente marcado por tipos de interés aún elevados y endeudamiento creciente en muchas otras empresas, tanto del sector como de otros. Esta fortaleza financiera permite a la dueña de marcas como Zara, Oysho o Massimo Dutti contar con la flexibilidad suficiente para invertir en su expansión y en la mejora de sus plataformas tecnológicas y de comercio online, "áreas estratégicas para sostener su crecimiento a medio plazo", añade Javier Molina.

Expansión a nuevos mercados y dividendo

De momento, la firma capitaneada por Óscar García Maceiras y Marta Ortega tiene previsto abrir sus primeras tiendas en Irak a lo largo de este año. A la vez, se ha propuesto expandir varios de sus formatos por la Unión Europea. Su objetivo es que Bershka se estrene en Suecia y que Stradivarius lo haga en Austria. A la vez, Oysho debutará este año tanto en Países Bajos como en Alemania.

La mayor empresa española por capitalización bursátil (alcanzó un valor de 141.184 millones de euros a cierre de los mercados el lunes) ha anunciado que propondrá un incremento del dividendo del 9% para el presente ejercicio hasta los 1,68 euros por acción. En concreto, la remuneración al accionista estará conformada por un dividendo ordinario de 1,13 euros y por otro extraordinario de 0,55 euros por título.