El portavoz de los creadores del polémico cartel de de Terrassa: "El Carnaval siempre ha molestado y de eso se trata"
El folleto muestra, de espaldas, a un obispo arrodillado y con tacones.

La celebración de los carnavales está a la vuelta de la esquina y, por tanto, los diferentes ayuntamientos de España ya han comenzado a hacer publicidad de esta fiesta que, cada año, saca a la calle los disfraces más originales.
Así, en este 2025, Terrassa se ha convertido en el objeto de la polémica por la publicación de un cartel anunciador de los carnavales que muestra la caricatura de un obispo, de espaldas, arrodillado y con tacones.
Este miércoles, El programa de Ana Rosa ha podido hablar en directo con Mingo Cebrián, portavoz de la Cofradía La Mascarada, creadores del polémico cartel, quien ha destacado que fueron los ciudadanos del municipio catalán quienes votaron que esta fuera la imagen de los carnavales de la localidad.
Sin embargo, antes de entrar a defender el cartel de su agrupación, Mingo ha cargado contra Ana Rosa y su matinal, pues el rótulo del programa apuntaba que todo había ocurrido en Tarrasa, e igual lo ha pronunciado la presentadora: "Lo primero que quiero decir es que Terrassa se escribe con E y dos S". Un comentario al que Quintana no ha dudado en responder: "Bueno, toda la vida para mí ha sido Tarrasa y todavía nos queda".
Tras este pequeño rifirrafe, Mingo Cebrián ha destacado que los carteles se "exhiben un día en la vía pública para que el que lo ha hecho pueda mandar personas para que lo voten y los transeúntes también puedan votar el que más les guste": "Este ha sido el cartel más votado de este año. Por lo tanto es el cartel oficial del XLVIII Carnestoltes de Terrassa".
Respecto a las posibles ampollas que pueda levantar el polémico cartel, Mingo ha sido claro: "Carnaval siempre ha molestado a unos u otros y de eso se trata. En la cuaresma estamos en un periodo 'permisivo' por parte de la Iglesia y eran los días en los que uno se podía burlar de la autoridad que fuera".
"Estamos en un periodo de trasgresión y el Carnaval de Terrassa se caracteriza por ser el máximo trasgresor en un periodo en el que se permiten las críticas, las sátiras y todo este tipo de contenido", ha agregado el portavoz que, finalmente, ha señalado que el cartel no muestra la cara de nadie y no es "un ataque personal": "Es un símbolo de la Iglesia católica, pero tiene el límite de que no puedes poner a una persona con nombres y apellidos. El Carnaval tiene que poder permitir esto. Se confunde la ficción con la realidad porque no nos metemos con nadie concretamente, sino con una institución igual que en otras ocasiones nos hemos metido con otros temas políticos".