El diablo negro hallado en "excelentes" condiciones será investigado... y podría exponerse al público

Este fue encontrado cerca de la superficie, aunque por el momento se desconoce el motivo.

Feb 14, 2025 - 16:38
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El diablo negro hallado en "excelentes" condiciones será investigado... y podría exponerse al público

El ejemplar de la especie de pez abisal diablo negro aguarda desde esta semana en el almacén de la colección húmeda del Museo de Ciencias Naturales (MUNA) de Santa Cruz de Tenerife. Desde entonces se conserva en una solución de alcohol etílico con el fin de garantizar su estado para la investigación, donde no se descarta su posible muestra al público en exposiciones puntuales.

El pez, una hembra adulta y que normalmente vive en profundidades abisales, acabó muy cerca de la superficie y a tan solo dos kilómetros de la costa de Tenerife. Como consecuencia de su mal estado de salud, el ejemplar finalmente terminó muriendo horas después.

Su salud no era "muy halagüeña" en el momento de su recogida en el mar, según ha explicado ante los medios el conservador de biología marina del MUNA, Alejandro de Vera. Además, ha calificado de "excelente" el estado de conservación en el que se encuentra el especímen a pesar de haber fallecido al poco tiempo de ser hallado.

Solo se habían avistado ejemplares deteriorados

Ha asegurado que, probablemente, no se conozcan "nunca" las causas por las que arribó desde tanta profundidad. No obstante, si se atiende a diversos factores, podría haber sido arrastrado por corrientes marinas, por una enfermedad o por algún tipo de actividad de pesca en profundidad.

La especie, conocida como Melanocetus johnsonii, habita en aguas profundas, generalmente entre los 200 y los 3.000-4.000 metros de profundidad. Su característica más notable es el apéndice dorsal dotado de bacterias bioluminiscentes que utiliza para atraer a sus presas en la oscuridad de las profundidades. Normalmente solo se han registrado larvas o ejemplares en estado deteriorado cerca de la superficie. Respecto al tamaño, el de la hembra es mayor que el macho, llegando hasta los 18 centímetros.

Desde la investigación, este hallazgo podrá ser importante desde el punto de vista de la biogeografía, en referencia a la distribución de las especies, sobre todo en el ámbito de análisis genéticos que demuestren posibles relaciones que comparten los ejemplares de esta especie en el mundo abisal. "Nos puede ayudar a entender un poco, dependiendo de los parentescos genéticos que se localicen, lo que ocurre en las profundidades del océano", ha puntualizado el conservador del museo.

Protocolo de conservación

En el acto de presentación de la especie a los medios de comunicación, el consejero de Cultura del Cabildo de Tenerife, José Carlos Acha, ha celebrado la "fortuna" de que la isla cuente con este ejemplar, que ha llegado en "muy buenas condiciones".

Por su parte, Alejandro de Vera ha puntualizado las características de este animal, cuyo avistamiento ya fue "bastante raro". Así, también es "excepcional" por encontrarse en la superficie, y además "vivo", aunque por unos momentos iniciales.

"En el primer examen en el museo el pez estaba íntegro, en un estado de conservación excelente, sin huesos rotos ni defectos en la piel, así como sin marcas de mordeduras, por lo que no parece que haya llegado a través de ningún tipo de depredador", ha añadido.

La directora del MUNA, Fátima Hernández, ha subrayado los "estrictos protocolos" de los que se nutre la actividad de los almacenes de ciencias naturales, que mantienen "millones de especímenes" de "interesantes" organismos vinculados al patrimonio natural y cuya investigación solventa problemas que afecta a la humanidad, entre ellas el cambio climático y los pesticidas.

Tampoco se ha olvidado de destacar "el interés" de los biólogos marinos por las grandes profundidades, de las que procede esta especie, con tan solo un 3% o 4% conocido para dicha zona, pues los esfuerzos se han radicado más en la superficie por diversas dificultades.

Posible exposición al público

De Vera ha indicado que, en principio, no se descarta la exposición al público de este especímen en el MUNA, siempre en función de las líneas expositivas que aloje el museo en determinadas ocasiones. "Dada la repercusión mediática que ha tenido, nos plantearemos a lo mejor en un futuro no muy lejano hacer un pequeño módulo donde durante un tiempo se pueda (exponer al público)" ha dicho.

Este ejemplar, además de estar inmerso en una solución del alcohol, también precisa de otras condiciones ambientales específicas para su conservación a largo plazo. De este modo, el almacén de la colección húmeda del Museo de Ciencias Naturales (MUNA) de Santa Cruz de Tenerife cuenta con un control de temperatura y humedad que durante todo el año registra los valores, según ha especificado a esta Agencia Alejandro de Vera.

"Las colecciones siempre tienen que estar en las condiciones lo más estables posibles: con una humedad de entre el 50% y 60%, una temperatura entre los 19 y 20 y pocos grados, que no hayan fluctuaciones, y que sí haya oscuridad, porque la luz ataca a los pigmentos de la piel del ejemplar", ha especificado.