Vicentin reanudó su actividad tras acuerdo con gremios
La cerealera terminará de pagar los sueldos correspondientes a febrero la semana que viene. Los gremios, en tanto, volvieron a trabajar, mientras que las aliadas de la concursada, Viterra, Bunge y ACA se desligaron del incumplimiento de pago por parte de Vicentin

Tras más de diez días con sus dos plantas frenadas, Vicentin llegó a un acuerdo con el gremio aceitero y retomó su actividad, mientras espera el cierre de su concurso actualmente en manos de la Justicia santafesina. La cerealera informó que ya pagó otro 25% del sueldo correspondiente a febrero y que el próximo miércoles terminará de pagar el cuarto restante.
El acuerdo, se dio, según Vicentin, como consecuencia del reordenamiento de las cuentas a pagar, lo que le permitió a la cerealera reunir los fondos necesarios para depositar un 25% del sueldo neto adicional a los pagos a cuenta realizados anteriormente y los depósitos de las cuotas por alimentos.
Casi de forma inmediata, el gremio aceitero reaccionó al anuncio e informó que los trabajadores retomarían la actividad en ambas plantas (Avellaneda y San Lorenzo) a partir de las 20 hs del miércoles 19.
Además, la cerealera concursada adelantó que, de acuerdo con sus proyecciones, el miércoles 26 de marzo estará en condiciones de depositar el 25% restante para cancelar los haberes totales correspondientes a febrero de 2025.
El acuerdo llegó luego de una audiencia de la que participaron Vicentin, los sindicatos del sector, así como también se sumaron los 'aliados' de la cerealera, los gigantes agroindustriales Bunge, Viterra, ACA y Unión Agrícola Avellaneda.
"Negamos ser solidariamente responsables, cuestión a todo evento de derecho y ajena a debate en esta instancia. Negamos también las imputaciones y demás manifestaciones que se formulan. Rechazamos las intimaciones peticionadas por la parte sindical formulando la más amplia reserva de derechos", indicaron Bunge, Viterra y ACA.
El conflicto en la empresa se destapó cuando, el lunes 10 de marzo, Vicentin anunció a sus empleados que no podría pagar la totalidad de los sueldos de febrero. La concursada alegó que esta situación fue consecuencia de la poca actividad que había en su planta, así como del costo del concurso, que ya roza los u$s 70 millones. Sin embargo, el juez a cargo de su concurso, Fabián Lorenzini, dispuso su intervención por 120 días y los gremios paralizaron ambas plantas.
La cerealera, en tanto, insistió en que necesitaba hacer trabajar sus plantas ya que, sin capacidad crediticia por su delicada situación financiera, sus únicos ingresos provienen de los contratos a fasón. Esto es, recibir los granos de otras compañías, industrializarlos y cobrar un porcentaje por ese trabajo.
Sin embargo, Estanislao Bougain, director independiente de la compañía concursada, aseguró que, "por primera vez, la empresa está sometida a un riesgo enorme de paralización de actividades. Nadie sabe qué va a pasar judicialmente".
"No estamos logrando que nos den granos. En esta circunstancia, se nos hace tremendamente difícil asegurar la continuación de la empresa", aseguró el empresario, a la vez que reconoció que el problema de la empresa no "es de sostenibilidad para adelante, sino que es hoy".
De hecho, Bougain aseguró haber contactado a las gigantes Bunge-Viterra, ACA, Molinos Agro y el mismo Grupo Grassi, quien es su principal opositor en la carrera hacia la homologación del acuerdo.
Cómo es la propuesta de Vicentin para sus acreedores
Vicentin está a la espera de la homologación de su concurso desde hace poco más de un año y medio. De hecho, la oferta que la empresa les había hecho a sus acreedores, y que obtuvo las mayorías exigidas por la Ley Concursal, quedó descartada por decisión de la Justicia santafesina.
El acuerdo, que había recibido el visto bueno del 70% de los acreedores de la cerealera, incluía el levantamiento del concurso y, en un paso siguiente, el ingreso de inversores estratégicos -Bunge, Viterra y la local ACA-, que inyectarían u$s 300 millones en capital de trabajo.
De esta manera, la cerealera trabajaría con lo que se llama en la industria como contratos definitivos. El contrato establece que, si se homologa el acuerdo y se levantan las cautelares, los gigantes desembolsarán el dinero y "blindarán la empresa por 12 años", aseguró el empresario. De esta manera, Vicentin operaría a fasón para los gigantes cerealeros, mientras que estos pagarían la totalidad de sus costos fijos y variables.