Una farmacéutica explica por qué hay medicamentos que está prohibido exponer en la farmacia
En un establecimiento farmacéutico hay productos estrictamente restringidos al interior, y se puede multar a la farmacia en la que se dejen a la vista. ¿Cuáles son?

La publicidad de medicamentos está sujeta a una estricta regulación para garantizar un uso seguro y racional de este tipo de productos. De hecho, en España, la normativa distingue entre la publicidad dirigida al público en general y la dirigida a profesionales sanitarios. Ante este panorama, muchas personas se preguntan cuáles son los medicamentos susceptibles de publicidad al público en general y cuáles no.
Para resolver esta duda, la farmacéutica @its.Noeliafarma ha publicado un vídeo en sus redes sociales en el que explica cuál es la situación, y por qué cuando vamos a la farmacia vemos unos productos expuestos y otros que jamás estarán visibles. "Cuando entras a una farmacia y ves que hay muchos productos a la vista, también debes saber que hay otros muchos que está prohibido exponer, hasta el punto de que pueden multarnos", explica la experta.
Medicamentos de 'venta libre' y su exposición ante el público
La farmacéutica cuenta cómo "está súper prohibido exponer de cara al público cualquier medicamento que requiera receta del profesional. Los medicamentos que nos permiten tener son los que llamamos 'publicitarios', los típicos que vemos en televisión y que dice aquello de 'consulte a su farmacéutico".
Con el objetivo de ahondar un poco en este concepto, hemos consultado a José Luis Allué, farmacéutico comunitario en Zaragoza y miembro de la junta directiva de la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria.
Para empezar, el experto explica que según la Ley de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, pueden ser objeto de publicidad dirigida al público sólo algunos. "La regulación de la publicidad busca proteger la salud pública, asegurando que sólo se promocionen aquellos medicamentos que pueden utilizarse de forma segura sin supervisión médica o bajo supervisión farmacéutica, y que no representan un riesgo significativo de abuso o efectos adversos graves".
¿Qué medicamentos prohíben la publicidad en la farmacia?
Aunque hay analgésicos, antigripales o antiinflamatorios de 'venta libre' que sí pueden ser publicitados y expuestos en las estanterías de las farmacias, hay otros cuya publicidad está estrictamente prohibida por las autoridades.
En este bloque se encuentran, en primer lugar, los medicamentos que precisan prescripción médica. "Estos medicamentos deben mantenerse fuera de la vista del público y sólo son accesibles al personal autorizado en las farmacias. Se pueden identificar porque tienen un círculo blanco al lado del código nacional y de barras".
Los medicamentos financiados con fondos públicos tampoco pueden inhibirse "para evitar influir en el gasto sanitario". Por fin, y "debido a su potencial de abuso y efectos adversos, la publicidad de los medicamentos que contienen alguna sustancia estupefaciente está prohibida. En este caso y para identificarlos, tienen como símbolo en el cartonaje un círculo blanco y negro o negro, respectivamente".
¿Cómo garantizan los medicamentos la información adecuada?
Como continúa exponiendo Allué, "la publicidad de medicamentos dirigida al público debe cumplir con ciertos requisitos para garantizar una información adecuada y evitar inducir a error o comportamientos inapropiados". Para empezar, debe existir una claridad de intenciones, que se muestre de forma evidente que se trata de un anuncio publicitario, especificando que se trata de un medicamento.
Además, es básico que contengan información esencial incluyendo la denominación, la forma de uso, así como "una invitación expresa a leer detenidamente las instrucciones del prospecto".
En cuanto a las prohibiciones específicas, el experto cuenta que "no se permite sugerir que el medicamento carece de efectos secundarios, que su uso mejora el rendimiento deportivo, que es equivalente a un producto alimenticio o cosmético, o que su eficacia se debe a su origen natural. Además, no puede inducir a un autodiagnóstico erróneo ni utilizar testimonios de personas famosas que puedan incitar al consumo".