Una escuela de pequeños científicos en la España vaciada: "No pretendemos que todos sean ingenieros o biólogos, sino meterles el gusanillo y que puedan elegir"
Hace 15 años, la química Bárbara de Aymerich fundó en un pueblo de Burgos la escuela de pequeños científicos Espiciencia, una iniciativa extraescolar que se ha extendido ya por seis comunidades autónomas a través de un proyecto de la Fundación Margarita Salas: "Queremos que los niños pasen del 'oohh' al 'aahh'" Leer
