Un canadiense que vive en España señala las diferencias con los colegios de su país: «No lo entiendo»

Cuando una persona deja su país de origen para comenzar una nueva vida en el extranjero, es inevitable que experimente choques culturales . Desde la forma de saludarse hasta las costumbres en la mesa, los detalles más cotidianos pueden convertirse en una fuente de sorpresas para quienes los viven por primera vez. Lo que en un país es normal, en otro puede parecer extraño o incluso innecesario. Este ha sido el caso de Spencer Hewitt, un joven canadiense que reside en Barcelona junto a su pareja y que, a través de su cuenta de TikTok, 'lorenayspencer', ha compartido una de las diferencias que más le han llamado la atención de los colegios en España. En el vídeo, el joven canadiense expresó su asombro al ver que prácticamente todos los colegios en España están rodeados de vallas de gran tamaño . «No entiendo por qué aquí hay vallas por todos los coles», comenta el joven con evidente sorpresa ya que, en su país natal, la situación es completamente diferente. Según relata, los colegios en Canadá suelen tener espacios abiertos, sin grandes barreras que delimiten el recinto. «Es muy diferente», señala al comparar ambas realidades. Tras esta afirmación, Spencer señala que, en Canadá, podía acceder sin problemas a los patios de los colegios sin que hubiera obstáculos que lo impidieran. «Cuando estaba en Canadá podía ir al patio del colegio al que iba cuando era muy pequeño», explica. Esto contrasta con lo que ha observado en España, donde los centros educativos parecen estar más restringidos al exterior. Asimismo, Spencer hace una observación sobre el tamaño de las vallas en los colegios españoles. Según él, en su país de origen, estas son bajas y fáciles de sortear . «Hay vallas de este tamaño para que los niños no se escapen», dice mientras sitúa su mano a la altura de la cintura, poniendo de manifiesto que no se trata de barreras infranqueables. Además, añade con humor: «Pero yo puedo 'caminar' y no hay problema», mientras imita el gesto de saltar una de estas pequeñas vallas. Sin embargo, en España la situación es completamente diferente . «Pero aquí es como tres metros de alto. No lo entiendo», confiesa. Pero la sorpresa de Spencer no termina en los colegios. Según señala, este tipo de vallas no son exclusivas de los centros educativos , sino que también se encuentran en muchas viviendas y urbanizaciones en España. «Por las casas también», menciona, refiriéndose a la presencia de rejas y cercados en muchas propiedades. En Canadá, las casas suelen estar más abiertas al exterior, con jardines frontales sin barreras o con simples divisiones bajas que separan unas casas de otras. En cambio, en España es común encontrar vallas altas, muros o incluso rejas en ventanas , algo que a Spencer le resulta muy llamativo. «Yo no sé», concluye, sin terminar de comprender el motivo de este tipo de estructuras.

Feb 28, 2025 - 14:24
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Un canadiense que vive en España señala las diferencias con los colegios de su país: «No lo entiendo»
Cuando una persona deja su país de origen para comenzar una nueva vida en el extranjero, es inevitable que experimente choques culturales . Desde la forma de saludarse hasta las costumbres en la mesa, los detalles más cotidianos pueden convertirse en una fuente de sorpresas para quienes los viven por primera vez. Lo que en un país es normal, en otro puede parecer extraño o incluso innecesario. Este ha sido el caso de Spencer Hewitt, un joven canadiense que reside en Barcelona junto a su pareja y que, a través de su cuenta de TikTok, 'lorenayspencer', ha compartido una de las diferencias que más le han llamado la atención de los colegios en España. En el vídeo, el joven canadiense expresó su asombro al ver que prácticamente todos los colegios en España están rodeados de vallas de gran tamaño . «No entiendo por qué aquí hay vallas por todos los coles», comenta el joven con evidente sorpresa ya que, en su país natal, la situación es completamente diferente. Según relata, los colegios en Canadá suelen tener espacios abiertos, sin grandes barreras que delimiten el recinto. «Es muy diferente», señala al comparar ambas realidades. Tras esta afirmación, Spencer señala que, en Canadá, podía acceder sin problemas a los patios de los colegios sin que hubiera obstáculos que lo impidieran. «Cuando estaba en Canadá podía ir al patio del colegio al que iba cuando era muy pequeño», explica. Esto contrasta con lo que ha observado en España, donde los centros educativos parecen estar más restringidos al exterior. Asimismo, Spencer hace una observación sobre el tamaño de las vallas en los colegios españoles. Según él, en su país de origen, estas son bajas y fáciles de sortear . «Hay vallas de este tamaño para que los niños no se escapen», dice mientras sitúa su mano a la altura de la cintura, poniendo de manifiesto que no se trata de barreras infranqueables. Además, añade con humor: «Pero yo puedo 'caminar' y no hay problema», mientras imita el gesto de saltar una de estas pequeñas vallas. Sin embargo, en España la situación es completamente diferente . «Pero aquí es como tres metros de alto. No lo entiendo», confiesa. Pero la sorpresa de Spencer no termina en los colegios. Según señala, este tipo de vallas no son exclusivas de los centros educativos , sino que también se encuentran en muchas viviendas y urbanizaciones en España. «Por las casas también», menciona, refiriéndose a la presencia de rejas y cercados en muchas propiedades. En Canadá, las casas suelen estar más abiertas al exterior, con jardines frontales sin barreras o con simples divisiones bajas que separan unas casas de otras. En cambio, en España es común encontrar vallas altas, muros o incluso rejas en ventanas , algo que a Spencer le resulta muy llamativo. «Yo no sé», concluye, sin terminar de comprender el motivo de este tipo de estructuras.