La cocina de pueblo de Samantha Vallejo-Nágera en su casa de Pedraza

Cuando comenzó su trayectoria profesional en la cocina al trabajar con el chef español Carlos Horcher en 1980, Samantha Vallejo-Nágera (55 años) no hubiera podido imaginar dónde la llevaría su carrera profesional, y era convertirse en una de las chefs más destacadas de la gastronomía española. Además de formar parte del jurado de uno de los programas más vistos de la televisión, 'MasterChef', demostró que la cocina, forma parte de su ser y de su vida cuando hace unos años inauguró su propio proyecto profesional en Pedraza, el pueblo de Segovia donde ha pasado media vida y donde reside su madre, la empresaria y decoradora de éxito, Sabine Dèrouléde. Desde que abrió las puertas de su hotel-restaurante, Casa Taberna, en un edificio con más de 200 años de historia, la chef ha encontrado una buena razón para visitar el pueblo con más frecuencia. Tal es el sentimiento que Samantha tiene a Pedraza, que allí cuenta con su segunda residencia, donde pasa los fines de semana y vacaciones. Una casa de campo que inspira un envolvente encanto rústico gracias a sus impresionantes vigas de madera vistas, suelo de barro, paredes de piedra, techos altos y unas fantásticas vistas donde disfruta del pueblo segoviano.     Ver esta publicación en Instagram           Una publicación compartida por

Mar 21, 2025 - 21:31
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La cocina de pueblo de Samantha Vallejo-Nágera en su casa de Pedraza

Cuando comenzó su trayectoria profesional en la cocina al trabajar con el chef español Carlos Horcher en 1980, Samantha Vallejo-Nágera (55 años) no hubiera podido imaginar dónde la llevaría su carrera profesional, y era convertirse en una de las chefs más destacadas de la gastronomía española. Además de formar parte del jurado de uno de los programas más vistos de la televisión, 'MasterChef', demostró que la cocina, forma parte de su ser y de su vida cuando hace unos años inauguró su propio proyecto profesional en Pedraza, el pueblo de Segovia donde ha pasado media vida y donde reside su madre, la empresaria y decoradora de éxito, Sabine Dèrouléde. 

Desde que abrió las puertas de su hotel-restaurante, Casa Taberna, en un edificio con más de 200 años de historia, la chef ha encontrado una buena razón para visitar el pueblo con más frecuencia. Tal es el sentimiento que Samantha tiene a Pedraza, que allí cuenta con su segunda residencia, donde pasa los fines de semana y vacaciones. Una casa de campo que inspira un envolvente encanto rústico gracias a sus impresionantes vigas de madera vistas, suelo de barro, paredes de piedra, techos altos y unas fantásticas vistas donde disfruta del pueblo segoviano.