Referéndum para elegir valenciano o castellano en los colegios: cómo y cuando votar
La consulta para que las familias elijan la lengua base - valenciano o castellano - en la que prefieren que estudien sus hijos e hijas arrancará el próximo 25 de febrero y se prolongará hasta el 4 de marzo, según han confirmado fuentes autonómicas. Así lo establece la orden que publica este lunes en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, por la que se regula y convoca el procedimiento de consulta a los representantes legales del alumnado para elegir la lengua base aplicable a partir del curso escolar 2025-2026, de conformidad con lo que establece la llamada Ley de libertad educativa. De este modo, desde el día 25 de febrero de 2025, a las 9:00 horas, hasta el 4 de marzo de 2025 , a las 14:00 horas, se podrá participar en el procedimiento para elegir la lengua base para cada uno de los estudiantes matriculados en los centros. Esta lengua base, según recuerda la orden, será la que tendrá «un mayor peso y una mayor presencia en la enseñanza, y en su caso, la que se utilizará para que el alumnado aprenda a leer y escribir». Para la consulta se ha diseñado un «proceso sencillo», según apunta la Generalitat. Las familias elegirán de forma telemática la lengua principal, valenciano o castellano, para cada uno de sus hijos matriculados en centros públicos o concertados en 2º ciclo de Infantil, Primaria o los tres primeros cursos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO). En este proceso será suficiente con que vote un representante legal por cada hijo. Para votar habrá que acceder a la web de la Secretaría Digital , que se activará en los próximos días. Una vez se acceda habrá que seleccionar a su hijo/a introduciendo el Número de Identificación del Alumnado (NIA), que podrá encontrar en la ficha de datos de su hijo/a proporcionada con anterioridad por el centro educativo. La Conselleria de Educación ha garantizado que todas las familias puedan votar y, si en algún caso, hay dificultades para acceder a un sistema informático podrán hacerlo desde sus propios centros . Además, en el caso de alumnado afectado por las inundaciones del pasado 29 de octubre y que esté reubicado en otros centros, las familias podrán votar desde cualquier centro educativo. Se trata de la primera consulta de estas características que se realiza en la Comunidad Valenciana: «Se acabó el tiempo en que la Administración decidía la lengua en que estudiaban los niños y niñas. La planificación lingüística se va a hacer, por primera vez, a partir de la voluntad expresada por las familias. Esta consulta les da voz y capacidad de decisión y el resultado de la consulta será lo que ellas decidan”, ha señalado el conseller de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira. Previamente al inicio de la consulta se publicará en cada centro educativo un censo provisional de familias con derecho a participar. Asimismo, habrá un periodo de alegaciones para que las familias puedan corregir sus datos si se detecta algún error, y se publicará un censo definitivo, con el listado de progenitores que pueden participar en la consulta. La lengua base será la lengua que tendrá un mayor peso y una mayor presencia en la enseñanza y, en su caso, la que se utilizará para que el alumnado aprenda a leer y escribir, en 2º ciclo de Infantil y los dos primeros cursos de Primaria. «En cualquier caso, el sistema va a ser equilibrado, con una diferencia del 20 % entre una lengua y otra. Se trata de que todo el alumnado tenga un dominio del castellano y valenciano al finalizar la etapa educativa obligatoria», ha indicado Rovira. El conseller ha animado a las familias a que participen en la consulta «con absoluta libertad» y elijan la lengua que prefieran. «La Administración es neutral y no opina ni se decanta por ninguna opción. La voz de las familias es la clave de este proceso», ha señalado. En caso de no participar en la consulta el centro, en virtud de su autonomía, asignará al alumno/a una u otra lengua base según el resultado obtenido. La pasada semana, Rovira recordó que los centros educativos «tienen la obligación de guardar imparcialidad ante cualquier proceso», como el que se desarrollará para elegir la lengua base, al tiempo que negó que haya «presiones» desde su departamento. Asociaciones de madres y padres de alumnos (AMPA), el colectivo Famlílies pel Valencià y Compromís acusaron a la Conselleria de Educación de «censura» después de que, según aseguran, la Inspección Educativa retirara pancartas de centros educativos a favor de la elección del valenciano en la consulta sobre la lengua vehicular. Al respecto, el titular de Educación aseveró que «ni hay coacciones ni hay amenazas ni hay presiones. Eso pertenece a épocas pasadas. La Conselleria es absolutamente neutral en un proceso en el que lo importante es que las familias voten en libertad la lengua que quieran». Rovira señaló que la neutralidad en los centros educativos «no es de ahora, está contemplada desde hace muchos añ
La consulta para que las familias elijan la lengua base - valenciano o castellano - en la que prefieren que estudien sus hijos e hijas arrancará el próximo 25 de febrero y se prolongará hasta el 4 de marzo, según han confirmado fuentes autonómicas. Así lo establece la orden que publica este lunes en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, por la que se regula y convoca el procedimiento de consulta a los representantes legales del alumnado para elegir la lengua base aplicable a partir del curso escolar 2025-2026, de conformidad con lo que establece la llamada Ley de libertad educativa. De este modo, desde el día 25 de febrero de 2025, a las 9:00 horas, hasta el 4 de marzo de 2025 , a las 14:00 horas, se podrá participar en el procedimiento para elegir la lengua base para cada uno de los estudiantes matriculados en los centros. Esta lengua base, según recuerda la orden, será la que tendrá «un mayor peso y una mayor presencia en la enseñanza, y en su caso, la que se utilizará para que el alumnado aprenda a leer y escribir». Para la consulta se ha diseñado un «proceso sencillo», según apunta la Generalitat. Las familias elegirán de forma telemática la lengua principal, valenciano o castellano, para cada uno de sus hijos matriculados en centros públicos o concertados en 2º ciclo de Infantil, Primaria o los tres primeros cursos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO). En este proceso será suficiente con que vote un representante legal por cada hijo. Para votar habrá que acceder a la web de la Secretaría Digital , que se activará en los próximos días. Una vez se acceda habrá que seleccionar a su hijo/a introduciendo el Número de Identificación del Alumnado (NIA), que podrá encontrar en la ficha de datos de su hijo/a proporcionada con anterioridad por el centro educativo. La Conselleria de Educación ha garantizado que todas las familias puedan votar y, si en algún caso, hay dificultades para acceder a un sistema informático podrán hacerlo desde sus propios centros . Además, en el caso de alumnado afectado por las inundaciones del pasado 29 de octubre y que esté reubicado en otros centros, las familias podrán votar desde cualquier centro educativo. Se trata de la primera consulta de estas características que se realiza en la Comunidad Valenciana: «Se acabó el tiempo en que la Administración decidía la lengua en que estudiaban los niños y niñas. La planificación lingüística se va a hacer, por primera vez, a partir de la voluntad expresada por las familias. Esta consulta les da voz y capacidad de decisión y el resultado de la consulta será lo que ellas decidan”, ha señalado el conseller de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira. Previamente al inicio de la consulta se publicará en cada centro educativo un censo provisional de familias con derecho a participar. Asimismo, habrá un periodo de alegaciones para que las familias puedan corregir sus datos si se detecta algún error, y se publicará un censo definitivo, con el listado de progenitores que pueden participar en la consulta. La lengua base será la lengua que tendrá un mayor peso y una mayor presencia en la enseñanza y, en su caso, la que se utilizará para que el alumnado aprenda a leer y escribir, en 2º ciclo de Infantil y los dos primeros cursos de Primaria. «En cualquier caso, el sistema va a ser equilibrado, con una diferencia del 20 % entre una lengua y otra. Se trata de que todo el alumnado tenga un dominio del castellano y valenciano al finalizar la etapa educativa obligatoria», ha indicado Rovira. El conseller ha animado a las familias a que participen en la consulta «con absoluta libertad» y elijan la lengua que prefieran. «La Administración es neutral y no opina ni se decanta por ninguna opción. La voz de las familias es la clave de este proceso», ha señalado. En caso de no participar en la consulta el centro, en virtud de su autonomía, asignará al alumno/a una u otra lengua base según el resultado obtenido. La pasada semana, Rovira recordó que los centros educativos «tienen la obligación de guardar imparcialidad ante cualquier proceso», como el que se desarrollará para elegir la lengua base, al tiempo que negó que haya «presiones» desde su departamento. Asociaciones de madres y padres de alumnos (AMPA), el colectivo Famlílies pel Valencià y Compromís acusaron a la Conselleria de Educación de «censura» después de que, según aseguran, la Inspección Educativa retirara pancartas de centros educativos a favor de la elección del valenciano en la consulta sobre la lengua vehicular. Al respecto, el titular de Educación aseveró que «ni hay coacciones ni hay amenazas ni hay presiones. Eso pertenece a épocas pasadas. La Conselleria es absolutamente neutral en un proceso en el que lo importante es que las familias voten en libertad la lengua que quieran». Rovira señaló que la neutralidad en los centros educativos «no es de ahora, está contemplada desde hace muchos años». Así, ha recordado que la Ley Orgánica 8/1985, reguladora del derecho a la educación, en su artículo 18, señala que «todos los centros públicos desarrollarán sus actividades con sujeción a los principios constitucionales, garantía de neutralidad ideológica y respeto de las opciones religiosas y morales a que hace referencia el artículo 27.3 de la Constitución». «Los centros educativos públicos son administración y los docentes son funcionarios, por lo que están sujetos al deber de guardar neutralidad. Así lo señala también el Decreto Legislativo 5/2015, Estatuto Básico del Empleado Público, en su artículo 52 que recoge los deberes de los empleados públicos y el Código de Conducta», ha señalado. En dicho artículo se recoge: «Los empleados públicos deberán desempeñar con diligencia las tareas que tengan asignadas y velar por los intereses generales con sujeción y observancia de la Constitución y del resto del ordenamiento jurídico, y deberán actuar con arreglo a los siguientes principios: objetividad, integridad, neutralidad, responsabilidad, imparcialidad, confidencialidad, dedicación al servicio público, transparencia, ejemplaridad, austeridad, accesibilidad, eficacia, honradez, promoción del entorno cultural y medioambiental, y respeto a la igualdad entre mujeres y hombres, que inspiran el Código de Conducta de los empleados públicos configurado por los principios éticos y de conducta regulados en los artículos siguientes». El responsable de la política educativa del Consell tachó las críticas de Compromís de «absolutamente falaces», al tiempo que señaló que revelan «un nerviosismo impropio ante una consulta en la que se da voz a las familias para que voten en libertad». «La Conselleria respetará lo que voten las familias, porque las dos opciones son válidas. Respetamos que haya partidos que aconsejen una opción, pero desde Conselleria eso no se va a hacer, porque es la clave de la libertad, aunque haya quien no lo entienda», añadió. «No sé por qué hay partidos y colectivos que consideran peligrosas a las familias o que creen que no tienen capacidad de decidir por sí mismas, pero este Gobierno se presentó con un compromiso a las elecciones de 2023 y lo va a cumplir», planteó. El conseller insistió en que «esta administración no se decanta por ninguna de las dos lenguas, al revés que el Botànic, que ya sabemos que se decantó por la inmersión lingüística, lo que le acarreó numerosas sentencias en contra». Así, puso como ejemplo «vincular el peso de las horas lectivas en valenciano con una mayor carga de inglés, que es lo que hacía el Consell de Puig ». «Este Gobierno apuesta por un sistema equilibrado donde se garantiza el aprendizaje de las dos lenguas», apuntó. Por último, criticó que la anterior Generalitat «quitó todas las competencias de la inspección educativa, vaciando a este cuerpo de toda actividad». «Eso ha cambiado. La inspección debe velar por el cumplimiento de las normas y si a Conselleria llegan denuncias de particulares sobre lo que se está haciendo en algunos centros debe actuar. Esto se llama simplemente cumplir la legalidad», zanjó.
Publicaciones Relacionadas