Por consumo de agua, valor catastral, metros cuadrados o habitantes: el nuevo 'tasazo' de basura que nace esta semana
Cobro anual, semestral o una "cuota transitoria" son otras de las diferencias entre las ciudades más pobladas.

Si usted vive en Madrid, tendrá que pagar una nueva tasa de basura con una cuantía que se establecerá en función del valor catastral que tenga su domicilio y en función de su barrio. Si vive en Valladolid, se calculará en base a la superficie de su casa y del número de personas que viven en ella, mientras que si su lugar de residencia es Valencia, Barcelona o Málaga, la cuota dependerá de su consumo de agua. Estas son algunas de las diferencias por ciudades de la nueva tasa de basura, el 'tasazo' como lo califica el PP, que entrará en vigor el próximo jueves, aunque es muy probable que, al cabo del año o del semestre, el cargo sea desde el 1 de enero.
El 10 de abril entra en vigor la disposición de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular que contempla una nueva tasa de basura que por primera vez deberá repercutir íntegramente en los titulares de viviendas y de todo tipo de negocios el coste de la recogida y el tratamiento de basura. En una decisión que ha sido muy cuestionada por el PP y que la Comisión Europea recomendó pero no hizo obligatoria, el Gobierno decidió la vía de los impuestos para hacer que negocios y ciudadanos sean plenamente conscientes del coste que supone la generación de residuos, como paso previo para reducir su producción.
El 'tasazo' de basura es obligatorio para todas las localidades de 5.000 habitantes y la mayoría de sus ayuntamientos agotaron la prórroga de tres años que la ley, de 2022, concedió para ponerla en marcha. Entre quejas porque supone quebrantar su autonomía municipal y por tener pocas indicaciones sobre cómo hacerlo, los ayuntamientos han ido aprobando en los últimos mese ordenanzas fiscales que recogen elementos como las cuantías de la tasa, los criterios que se toman en cuenta o las bonificaciones para reducirla. Un análisis de cómo van a aplicarla las 10 ciudades más pobladas arroja una gran disparidad en todos estos aspectos.
Casi lo único que todas tienen en común es el hecho imponible, es decir, la recogida de residuos de competencia municipal, su transporte al lugar del depósito y su tratamiento posterior. A partir de ahí, se abre un gran abanico de posibilidades sobre cómo será la tasa de basuras para un vecino de Murcia, otro de Las Palmas u otro de Zaragoza.
También es compartida a todas las ciudades que el propietario de una vivienda podrá repercutir el pago de la tasa a su inquilino si la tiene alquilada.
Barrios, catastros, superficie y empadronados
Los criterios que determinan la cuantía de la tasa en cada ciudad son muy variables. En Madrid se determinará una "tarifa fija" en función del valor catastral de cada vivienda y otra "por generación", en función del barrio en el que se ubique. Cada uno ha quedado distribuido en seis grupos considerados homogéneos en cuanto a la cantidad de basura que se genera en ellos. La tasa básica va desde 34,5 euros para pisos con valor catastral inferior a 42.800 euros y 158.900 para los que lleguen a 216.000. Por generación, una vivienda pagará seis euros si son menos de 130 kilos por persona o 41,52 si son 500 kilos.
En Valladolid, se cobrará una tasa fija de 51,5 euros por vivienda y otra variable en función de la superficie de la vivienda y el número de personas empadronadas en ella. Por ejemplo, serán 53,2 euros para una vivienda de menos de 60m2 y tres personas o de 97,4 en uno de más de 360 metros cuadrados y seis o más habitantes. Sevilla optó por cobrar a todos los ciudadanos por igual, con una tasa de 1,14 euros al mes por cada persona que viva en cada vivienda.
Valencia, Málaga, Zaragoza y Barcelona han optado por no complicarse tanto y, en algunos casos de momento, han vinculado la tasa de basuras al consumo de agua, aunque entre ellas también hay diferencias. Valencia ha establecido el mismo criterio que su tasa Tamer por consumo de agua mientras que Zaragoza, que también la calcula con el mismo criterio ha establecido un umbral de 0,283 metros cúbicos al día. Por debajo de ese consumo, viviendas y locales pagarán una cuota u otra, de 39,8 euros y 43,8 euros en el caso de las viviendas.
Cuota única, cuota básica y variable y cuota transitoria
Aunque la mayoría de las ciudades han optado por una tarifa "básica" por vivienda o local comercial y otra variable, en función de las distintas formas en las que calcula la cantidad de residuos que genera cada uno, existen particularidades. Málaga ha optado por una sola cuota y Sevilla también para todos los vecinos. Murcia ha optado también por una cuota fija, aunque si en un domicilio se lleva a cabo también una actividad profesional, habrá que tributar por las dos modalidades. Además, crea una cuota especial "para grandes productores de basura", que les supondrá 5,59 euros más cada seis meses.
Barcelona ha puesto en pie una tasa con "carácter transitorio", de momento vinculada al consumo de agua y que modificará en una nueva ordenanza fiscal más adelante, cuando disponga "tenga la tecnología a punto" para poder controlar adecuadamente "el comportamiento de la ciudadanía en cuanto a la generación y separación de residuos". De momento, y como una manera de ir creando hábitos entre los barceloneses, una de las bonificaciones que disminuirá la cuantía de la tasa se calcula en función de cuántas veces al año vayan a los puntos de recogida individualizada a depositar sus residuos.
Por su parte, Madrid y Palma han establecido un tope máximo que, teniendo en cuenta sus distintos criterios, de manera que no sea "confiscatoria". En la capital no se podrán pagar más de 20.000 euros en inmuebles de uso residencial o de 30.000 en no residenciales. También Las Palmas ha establecido una cuota máxima que, en el caso de las viviendas, no puede superar los 149,33 euros al año.
La recaudación total por parte de cada ayuntamiento variará sobre todo dependiendo de su número de habitantes y negocios —256 millones en Madrid, 47,6 millones calcula Valencia o 26 millones en Sevilla— pero, ya desde el diseño de la tasa, lo que también varía es la manera en la que se la cobrarán a sus vecinos.
En Madrid, Las Palmas o Barcelona habrá un único pago anual y también en Palma de Mallorca, donde sus habitantes podrán solicitar un pago fraccionado. En Málaga y Murcia serán dos pagos, uno al semestre.
Bonificaciones
Como establecía la norma, los ciudadanos podrán acogerse a una serie de bonificaciones para reducir su tasa de la basura. De momento, entre los supuestos hay muchos criterios vinculados a la renta y casi ninguno relacionados con una actitud más proactiva a la hora de generar menos residuos o hacer menos uso de los servicios municipales de recogida y, en su lugar, ir a puntos determinados. Las excepciones son Barcelona y Valladolid, que recortará un 75% el 'tasazo' si el propietario se acoge al programa de compostaje a domicilio.
Todas las ciudades descontarán una parte de la cuota a hogares vulnerables, en función de sus ingresos —calculado sobre el salario mínimo (SMI) o sobre el IPREM— o si son perceptores del Ingreso Mínimo Vital (IMV) o alguna otra renta social.
En Palma, una de las ciudades con más viviendas destinadas al uso vacacional, se bonificará un 50% si se trata del domicilio habitual del propietario. Madrid dejará exentos del pago a los inmuebles que acrediten estar vacíos y Murcia ha creado una "cuota cero" para bonificar la tasa al 100% para pensionista que vivan solos (no "a expensas de otros") y no ingresen más que el equivalente al salario mínimo, para familias que tenga algún miembros con un grado de minusvalía del 65% y no ingresen más que el 1,25% del SMI.