“Parece cuarto de foráneo”: Revelan fotografías de la sencilla habitación del papa Francisco

Tras el fallecimiento del papa Francisco, han salido a la luz varios detalles interesantes sobre su vida en el Vaticano. Uno de los que más ha llamado la atención es el lugar donde pasó sus últimos 12 años como pontífice: una habitación tan sencilla que ha sorprendido al mundo.

La habitación 201 de la Casa Santa Marta del papa Francisco

A diferencia de sus predecesores, que vivían en los lujosos Apartamentos Papales dentro del Palacio Apostólico, Francisco eligió alojarse en la Casa Santa Marta, un edificio del Vaticano que funciona como residencia para clérigos y huéspedes. Ahí ocupó la habitación 201, un espacio modesto que reflejaba su visión de una Iglesia cercana y austera.

La habitación era pequeña, equipada únicamente con una cama individual, un escritorio de madera, un crucifijo, una imagen de San José y una pequeña estatua de Nuestra Señora de Luján, patrona de Argentina. También tenía una ventana que daba a los jardines vaticanos, una lámpara de lectura y una pequeña heladera donde guardaba yerba mate y algunos alimentos básicos.

Francisco prefirió este espacio porque no quería vivir aislado en el imponente Palacio Apostólico. Su formación jesuita, que promueve la sencillez y la vida comunitaria, influyó en esta decisión. En lugar de comer solo, compartía desayunos y almuerzos con otros sacerdotes y empleados del Vaticano.

Tras su fallecimiento el 21 de abril de 2025, la habitación fue sellada como parte del protocolo que marca el inicio de la sede vacante. Su elección de vivir de forma sencilla se suma a su legado de humildad y cercanía con la gente.

¿Qué tan diferente era su habitación de los Apartamentos Papales?

Tradicionalmente, los papas han vivido en los Apartamentos Papales, ubicados en el Palacio Apostólico, un espacio amplio y lujoso con frescos renacentistas, mármoles, terciopelos, salas de audiencias privadas, bibliotecas, capillas, y equipos de servicio completo. Todo está pensado para reforzar la solemnidad del cargo papal.

La decisión de Francisco de quedarse en la Casa Santa Marta rompió con siglos de tradición. Mientras los Apartamentos Papales representan el aislamiento y el protocolo, la Casa Santa Marta ofrecía un entorno comunitario y sencillo, mucho más acorde a su manera de entender la Iglesia.

La habitación del papa Francisco, tan minimalista y austera, es un reflejo claro de su personalidad: alejada del lujo y cercana a la gente.

Nada Qué Ver, la guía con todo lo que deberías estar viendo en streaming