Nadia Leal, periodista cultural: "Parece que solo puedes dedicarte al arte si eres rico"

Desde hace más de una década, Nadia Leal ha estado en primera línea de la cultura contemporánea en España, moviéndose con soltura entre la música, la moda y el cine. Ha trabajado con artistas como La Mala Rodríguez, es jefa de música en NEO2 y también imparte clases en SAE, donde forma a nuevas generaciones en el cruce entre estética y sonido. Pero, sobre todo, ha sido una voz incómoda, lúcida y necesaria dentro de un ecosistema que —como ella misma dice— es precario, tóxico y profundamente injusto, especialmente para las mujeres. En esta conversación con ElPlural.com, Nadia habla sin filtros sobre la industria musical, el machismo estructural, la falta de meritocracia, el boicot entre mujeres y la trampa de las audiencias. Una entrevista donde se mezcla la pasión por la cultura con la crudeza de un oficio que, a pesar de todo, sigue mereciendo la pena. P: El otro día, viendo la entrevista que te hacen en Grindin, te escuché decir que "el periodismo cultural en España, por condiciones, es una mierda". R: Lo sigo manteniendo. Reconozco que soy una privilegiada, pero me lo he trabajado muchísimo durante trece años. Esto no ha sido llegar y besar el santo. Como me dijo Marc, de Dorian, en una entrevista: "la industria cultural es una trituradora". Si sobrevives a ese proceso, eres válido. El periodismo musical es pasional, visceral, y muchas veces se difuminan los límites entre lo personal y lo laboral. Sin embargo, es un oficio muy precario, tanto en lo salarial como en las condiciones. Cobras poco, y encima vas a las zonas de prensa de algunos festivales y parece una broma: cuatro mesas mal puestas, wifi, agua… y todavía tienes que estar agradecida. Hay incluso festivales en los que tienes que pagar para cubrirlos. Además, somos un perfil de periodista muy denostado, los últimos de la cola, y luego todos nos necesitan. Como si estuviéramos dentro de una relación tóxica. P: ¿Ser mujer te ha influido de manera negativa? R: Recuerdo que uno de mis primeros trabajos fue en una edición del Gibraltar Music Festival. Llevaba plataformas, pantalones súper ajustados, nudos, colgantes, orejas taladradas, anillos... Una de mis entrevistas fue a Duran Duran, la mítica banda de los 80. Recuerdo que me miraron como diciendo: "¿Esta qué hace aquí?". No se podían creer que estuviera trabajando. Eso provocó que llegara a tener que cambiar mi forma de vestir para trabajar. Me han llegado a decir que si hubiera sido hombre, habría llegado más lejos. También he visto a gente que no ha hecho ni la décima parte de lo que yo he hecho, tratando de darme lecciones. Mamarrachos de Malasaña que van sentando cátedra y que, si yo fuera hombre, no me dirían nada.bAdemás, en España no existe la meritocracia. Súmale el patriarcado, el poco apoyo entre mujeres y el boicot entre nosotras. Bastante tengo con aguantar a los hombres como para que venga una de las mías también a joderme. P: ¿Sientes que existe ese boicot entre...

Abr 5, 2025 - 10:13
 0
Nadia Leal, periodista cultural: "Parece que solo puedes dedicarte al arte si eres rico"
Desde hace más de una década, Nadia Leal ha estado en primera línea de la cultura contemporánea en España, moviéndose con soltura entre la música, la moda y el cine. Ha trabajado con artistas como La Mala Rodríguez, es jefa de música en NEO2 y también imparte clases en SAE, donde forma a nuevas generaciones en el cruce entre estética y sonido. Pero, sobre todo, ha sido una voz incómoda, lúcida y necesaria dentro de un ecosistema que —como ella misma dice— es precario, tóxico y profundamente injusto, especialmente para las mujeres. En esta conversación con ElPlural.com, Nadia habla sin filtros sobre la industria musical, el machismo estructural, la falta de meritocracia, el boicot entre mujeres y la trampa de las audiencias. Una entrevista donde se mezcla la pasión por la cultura con la crudeza de un oficio que, a pesar de todo, sigue mereciendo la pena. P: El otro día, viendo la entrevista que te hacen en Grindin, te escuché decir que "el periodismo cultural en España, por condiciones, es una mierda". R: Lo sigo manteniendo. Reconozco que soy una privilegiada, pero me lo he trabajado muchísimo durante trece años. Esto no ha sido llegar y besar el santo. Como me dijo Marc, de Dorian, en una entrevista: "la industria cultural es una trituradora". Si sobrevives a ese proceso, eres válido. El periodismo musical es pasional, visceral, y muchas veces se difuminan los límites entre lo personal y lo laboral. Sin embargo, es un oficio muy precario, tanto en lo salarial como en las condiciones. Cobras poco, y encima vas a las zonas de prensa de algunos festivales y parece una broma: cuatro mesas mal puestas, wifi, agua… y todavía tienes que estar agradecida. Hay incluso festivales en los que tienes que pagar para cubrirlos. Además, somos un perfil de periodista muy denostado, los últimos de la cola, y luego todos nos necesitan. Como si estuviéramos dentro de una relación tóxica. P: ¿Ser mujer te ha influido de manera negativa? R: Recuerdo que uno de mis primeros trabajos fue en una edición del Gibraltar Music Festival. Llevaba plataformas, pantalones súper ajustados, nudos, colgantes, orejas taladradas, anillos... Una de mis entrevistas fue a Duran Duran, la mítica banda de los 80. Recuerdo que me miraron como diciendo: "¿Esta qué hace aquí?". No se podían creer que estuviera trabajando. Eso provocó que llegara a tener que cambiar mi forma de vestir para trabajar. Me han llegado a decir que si hubiera sido hombre, habría llegado más lejos. También he visto a gente que no ha hecho ni la décima parte de lo que yo he hecho, tratando de darme lecciones. Mamarrachos de Malasaña que van sentando cátedra y que, si yo fuera hombre, no me dirían nada.bAdemás, en España no existe la meritocracia. Súmale el patriarcado, el poco apoyo entre mujeres y el boicot entre nosotras. Bastante tengo con aguantar a los hombres como para que venga una de las mías también a joderme. P: ¿Sientes que existe ese boicot entre...