Me piden un aval bancario para alquilar el piso, ¿qué implicaciones puede tener para el inquilino?
Alquilar una vivienda en España en la actualidad puede suponer para gran parte de la población toda una carrera de obstáculos, en un contexto en el que los...

Alquilar una vivienda en España en la actualidad puede suponer para gran parte de la población toda una carrera de obstáculos, en un contexto en el que los precios continúan al alza y la precariedad laboral está a la orden del día. Por eso, incluso para quienes logran dar con un piso adecuado para su bolsillo, el camino dista mucho de acabar.
Comienza entonces el proceso más difícil, el de cumplir con los requisitos de los propietarios que, entre otras cosas, a menudo solicitan un aval bancario. Desde el Banco de España explican en qué consiste y qué implicaciones tiene para los inquilinos.
¿Qué es un aval bancario?
Un aval bancario es un escrito emitido por una entidad financiera en el que garantiza el pago de una determinada cantidad de dinero, en este caso, al arrendador, en caso de que la persona que lo ha alquilado, el arrendatario, incumpla con su obligación de pagar del alquiler.
¿Qué implica solicitar un aval bancario?
Cuando el inquilino solicita el aval, "la entidad evaluará su solvencia y su capacidad para asumir las obligaciones financieras derivadas del alquiler", explican desde el Banco de España. Entonces, si el resultado es positivo, la entidad emitirá el aval: un documento en el que se especifica la cantidad máxima garantizada, el periodo de validez del aval y las condiciones bajo las cuales se puede reclamar y que, por lo general, se formaliza ante notario mediante una Póliza de Cobertura de Garantía Bancaria.
Finalmente, el inquilino entrega el aval a su casero como garantía adicional al contrato de alquiler, ofreciéndole así una mayor seguridad de que los pagos serán cubiertos. Eso sí, desde el Banco de España recuerdan que "si necesitas pedir un aval bancario, tu entidad te está prestando un servicio financiero con costes asociados a su tramitación y comisiones. Además, la emisión del aval puede significar la inmovilización de los fondos por una cantidad equivalente al importe avalado"
Alternativas al aval bancario
Actualmente, los seguros de alquiler, como garantía para el propietario, están ganando terreno a los avales bancarios. Esta modalidad ofrece la recuperación de los recibos impagados y el pago de los daños ocasionados por el inquilino, además de protección jurídica para ayudar al propietario a solucionar el problema del impago de alquiler en caso de que haya que acudir a los tribunales.
De hecho, según datos del Observatorio Español del Seguro de Alquiler (OESA) la contratación de este tipo de seguros contra impagos se ha incrementado con la nueva Ley de Vivienda.