Máxima Zorreguieta jugó al metegol y sorprendió a todos con su destreza
Una vez más la reina de los Países Bajos se salió del libreto libreto y esta semana, durante una de sus actividades en Róterdman, se animó y lo dejó todo “en la cancha”

El 28 de enero de 2013, la reina Beatriz anunció que, después de tres décadas, abdicaba al trono de los Países Bajos. El 30 de abril de ese mismo año, su primogénito, Guillermo Alejandro, asumió el rol de rey y su esposa, Máxima Zorreguieta el de reina consorte. La monarca nacida en la Argentina pasó a convertirse en una de las integrantes de la realeza más destacadas, puesto que suele tener varias apariciones públicas en las que busca lograr un contacto cercano con las personas, conversar con ellas y conocer sus historias. Asimismo, una de las cosas que más la caracterizan, además de su simpatía y accesibilidad, es su comportamiento, el cual, en ocasiones, puede “romper” el protocolo.
Aunque siempre mantiene las formas, si la situación lo amerita la reina de los Países Bajos no tiene inconvenientes en salirse del libreto. A lo largo de los años supo desde bailar en las calles de Aruba hasta tirarse en parapente, oficiar de bartender, participar de un curso de bordado y ser ayudante de cocina. Esta semana, en tanto, visitó las instalaciones de una organización juvenil en la ciudad de Róterdman y sorprendió a todos al animarse a jugar un partido de metegol en la que demostró toda su destreza.
Tras su visita a Washington D. C. y Nueva York, el jueves, la madre de las princesas Amalia, Alexia y Ariane estuvo en Róterdman para visitar la organización juvenil Netwerk Nieuw Rotterdam comprometida en “aumentar la resiliencia mental de los jóvenes” de entre 16 y 27 años en situación de vulnerabilidad. Durante la jornada, la reina mantuvo charlas con participantes, empleados y voluntarios y hablaron sobre sus experiencias. Además, recorrió las instalaciones y disputó un partido de metegol.
En las diversas imágenes que se compartieron en las redes sociales se pudieron ver varias de las actividades que realizó la reina, incluida una partida de metegol. Máxima se quitó el abrigo y se animó a jugar con un grupo de personas. ¿Su posición? Arco y defensa. Se mostró distendida y relajada y, aunque no es una experta en el juego, su sonrisa y actitud dieron cuenta de que pasó un grato momento.
Sin embargo, no dudó en expresar su tristeza cuando le hicieron un gol. “No es posible, ¿eh? ¡Un gol contra la reina!", comentó divertida en un video que publicó el sitio especializado Blauw Bloed (EO).
Pero, como es de costumbre, las actividades “fuera del protocolo” de Zorreguieta no fueron lo único que llamaron la atención. Su vestimenta tampoco pasó inadvertida. Lució un conjunto vintage de Oscar de la Renta que causó furor: un vestido midi sin mangas con una fada asimétrica confeccionada en buclé y tweed. Por encima llevó un tapado largo con cinturón y bolsillos. Según los registros, estrenó estas prendas por primera vez en 2020, pero su atemporalidad le permitió volver a ponérselas cinco años después.
En cuanto al calzado, la reina usó unas botas altas marrones de Gianvito Rossi y una cartera en el mismo color de Gucci con terminaciones en dorado. Al cabello lo llevó peinado hacia atrás en un rodete bajo y agregó unos aretes de piedras naranja, a los cuales combinó con un par de pulseras y un reloj. En cuanto al maquillaje, optó por resaltar la mirada con un delineado negro y máscara de pestañas y un color nude para los labios, a modo de lograr un estilo natural pero elegante.
Esta no fue la única actividad “fuera del protocolo” que protagonizó Zorreguieta recientemente. El 13 de febrero visitó las escuelas primarias Sint Fransschool y OBS Emmermeer en la localidad de Emmen, provincia de Drente, las cuales ofrecen actividades artísticas extracurriculares apadrinadas por la fundación Más Música en el Aula, de la cual Máxima es presidenta honoraria. Además de presenciar clases de canto y danza y de recibir lecciones de DJ, la reina sorprendió a todos al bailar, bajo la nieve.
En un video que compartió la cuenta de Blauw Bloed (EO) se pudo ver el momento en el que se sumó a la performance que un grupo de niños hizo al aire libre con tachos amarillos y palitos de colores para homenajearla. Zorreguieta no dudó en participar y, además de bailar, sujetó uno de los tachos para que una de las niñas pudiera hacer música. Luego se alejó para apreciar el número desde lejos y, entre gritos, aplausos y los copos de nieve que caían, la monarca fue la encargada de cerrar el show y cuando la cuenta regresiva llegó a su fin, tocó el gong.