María Tato dimite tras el escándalo sobre las sedes del Mundial 2030 y la RFEF da una explicación

La presidenta del Comité de Organización del Mundial 2030, María Tato, ha dimitido este miércoles tras el escándalo de las sedes del Mundial 2030. Todo ello después de haber presentado un informe sobre los criterios y baremos aplicados para la selección de las 11 sedes que se presentaron a FIFA.

Además, la RFEF ha recibido el informe del Comité Ejecutivo de la candidatura del Mundial con los criterios aplicados. Todo ello después de que este martes solicitara información sobre el proceso de evaluación de las sedes después de que el diario El Mundo anunciara que el estadio de Balaídos habría sido excluido para el Mundial y su lugar lo ocuparía el campo de Anoeta de la Real Sociedad. Todo ello a pesar de que el inicialmente el estadio del Celta de Vigo sumaba una puntuación menos que el de San Sebastián.

María Tato no ocultó que el estadio de San Sebastián tenía que estar por delante del de Vigo, aunque para ello hiciera falta 800 correcciones del cuadro del excel de las puntuaciones. Este cambio de última hora, así como la manera en la que se realizó, dejaba en entredicho el rigor de los exámenes realizados a las ciudades y estadios aspirantes para ser sede y, por tanto a la propia el cargo de la propia presidenta del Comité.

A raíz de esa información, la RFEF solicitó información al respecto a la Comisión de Evaluación. Además, tras el anuncio de la posible exclusión de Vigo del Mundial que organizarán España, Marruecos y Portugal, su alcalde, Abel Caballero, pidió explicaciones al presidente de la RFEF, Rafael Louzán, sobre el supuesto cambio de criterios para la elección de las sedes.

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