Los acusados de la muerte de un joven en un apeadero de Cantabria dicen que cayó solo a la vía

Los supuestos agresores aseguran que el fallecido les "vaciló" en el tren y que le pidieron que les "dejara en paz".

Abr 3, 2025 - 18:50
 0
Los acusados de la muerte de un joven en un apeadero de Cantabria dicen que cayó solo a la vía

Los dos acusados de la muerte de un joven de 21 años en el apeadero de Boo de Piélagos (Cantabria) tras una pelea han dicho este jueves que no le empujaron ni le arrojaron a las vías y que el chico se cayó solo porque tropezó o perdió el equilibrio.

Los dos jóvenes, de 19 y 20 años, han coincidido también en afirmar que mienten las dos chicas que vieron la pelea y que declararon que habían dado patadas a la víctima y por eso cayó desde el andén.

Los acusados, en prisión provisional desde que ocurrieron los hechos, en febrero de 2024, han declarado en la cuarta sesión del juicio con jurado que se celebra en la Audiencia de Cantabria contra ellos por un delito de homicidio doloso, por el que la Fiscalía pide 13 años de cárcel.

Según su versión, coincidieron con la víctima en el tren esa mañana cuando volvían de fiesta y el chico se bajó en Boo de Piélagos, aunque no era su parada, porque "buscaba" pelea, en palabras de uno de ellos, Rubén G. Este acusado ha dicho que ya en el apeadero el joven le lanzó primero un puñetazo y él lo esquivó, y que la víctima cayó a las vías porque le estaba haciendo "un barrido" en las piernas, que ha escenificado ante el jurado, y pudo tropezar.

La explicación que ha dado de por qué no se quedó para socorrerle tras la caída es que pensaba que podía salir detrás de él persiguiéndole y que nunca pudo imaginarse lo que ocurrió. A su juicio, el mensaje que envió por Instagram minutos después de los hechos diciendo que se lo había pasado "de puta madre" esa noche indica también que pensaba que el joven "se podía haber levantado al segundo" de las vías.

Al igual que el otro acusado, Ángel R., ha negado que le sacaran la sudadera por la cabeza, haciéndole la campana, lo que le impidió protegerse de la caída. Los dos han declarado también que Ángel R. no golpeó a la víctima ni le dio patadas.

Aseguran que no conocían al joven

Según este acusado, aunque no conocía al chico, este les "vaciló" en el tren, ambos le pidieron que les "dejara en paz", y luego bajó en su misma estación. Ha afirmado que cayó a las vías porque "debió tropezar o apoyar mal el pie" en un forcejeo con Rubén G. y que él se encontraba a metro y medio de distancia, en medio del andén. "Yo no lo tiré ni Rubén tampoco", ha insistido.

Ha declarado además que se quedó paralizado cuando vio a su amigo salir corriendo y entonces se fue también del apeadero. Tras los informes de las partes, Rubén G. ha lamentado el sufrimiento de la familia del fallecido, ha dicho que la vida ha cambiado también para él, para su familia y para todos y ha añadido que lo ocurrido fue un accidente y que espera que se sepa la verdad.

La Fiscalía mantiene la pena

La Fiscalía, que ha mantenido su petición de 13 años de cárcel con abuso de superioridad por un delito de homicidio doloso con el agravante de superioridad, cree que la credibilidad de los acusados es "cero" y que su versión de los hechos "va en contra del sentido común".

El abogado de la familia del fallecido pide que se les condene por el mismo delito, pero ha añadido la posibilidad de que se les imponga, de forma subsidiaria, una pena de 4 años y 6 meses por un delito de lesiones y otros cuatro años por omisión del deber de socorro.

La defensa de Rubén G. ha recordado la absolución del futbolista Dani Alves para decirle al jurado que en caso de duda debe decidir a favor del reo, tras opinar que las acusaciones no han sido capaces de dar una versión coherente de lo sucedido. "Estamos ante un lamentable y desgraciado accidente", ha subrayado, por su parte, el abogado de Ángel R.