Las medidas de Vox aprobadas por Mazón: recortes al valenciano y a las políticas climáticas y fin de convenios con ONGs
Los presupuestos de la Comunidad Valenciana saldrán adelante después de que el Partido Popular haya cerrado este lunes un acuerdo con Vox. Lo harán sin embargo concediéndole a la extrema derecha un intercambio de favores que pasan por un paquete de medidas nada positivas para diferentes ámbitos como la defensa de la lengua valenciana, los colectivos más vulnerables -como los menores no acompañados o la población inmigrante- o la lucha contra el cambio climático. Poco después de conocerse el pacto entre derecha y ultraderecha, que permitirá sacar adelante unos presupuestos temporalmente suspendidos por la DANA del pasado 29 de octubre, la formación de Abascal ha celebrado la postura adoptada por los populares reconociendo que el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, "rectifique y reconozca que Vox tiene razón cuando dice basta al Pacto Verde y a las políticas que fomentan la inmigración ilegal, motivo por el que abandonamos la Generalitat" y que se muestre abierto "a negociar unos presupuestos que sean buenos para la Comunitat Valenciana y para la reconstrucción que tanto urge en las zonas devastadas económica, social y moralmente por la gota fría". Sin embargo, al margen del mero acuerdo que va a posibilitar desatascar las cuentas autonómicas, lo cierto es que la letra pequeña del pacto dibuja un panorama poco esperanzador para aquellos que luchan por los derechos de la población vulnerable, para la lengua valenciana o para el Pacto Verde europeo. De hecho, entre las medidas planteadas por la ultraderecha de José María Llanos figuran "recortar de forma significativa el presupuesto de la Academia Valenciana de la Lengua", "recortar de manera significativa las subvenciones a la promoción del valenciano", "reducción significativa de las subvenciones a agentes sociales, chiringuitos ideológicos y de igualdad", "eliminar todas las partidas destinadas a Agenda 2030 y Desarrollo Sostenible" y "suprimir todas las tasas derivadas del Pacto Verde". Entre otras cosas, en lo referente a la defensa de los derechos humanos y población inmigrante, la formación de Abascal ha adelantado que eliminará el convenio con la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA), añadiendo que "la Comunidad Valenciana no aceptará ni un 'mena' más". En este ámbito, el jefe del Consell se ha pronunciado defendiendo las medidas de Vox y acusando al Gobierno central de la población inmigrante de la autonomía. "Coincidimos con Vox que ha manifestado su rechazo a la política migratoria del Gobierno central en todo momento. Es evidente que la inmigración ilegal masiva necesita nueva política a nivel nacional y europeo. Necesitamos acelerar con urgencia las expulsiones de los inmigrantes ilegales", ha sostenido Mazón. Por su parte, el secretario general de Vox, Ignacio Garriga, ha señalado la intención de que el dinero hasta ahora destinado a la cooperación al desarrollo se derive ahora a la "reconstrucción" de la vida en la Comunitat Valenciana tras el paso de la DANA y solo si "queda algo" en esa partida, que se destine a "contener la inmigración ilegal, que no salga de las costas"...
Los presupuestos de la Comunidad Valenciana saldrán adelante después de que el Partido Popular haya cerrado este lunes un acuerdo con Vox. Lo harán sin embargo concediéndole a la extrema derecha un intercambio de favores que pasan por un paquete de medidas nada positivas para diferentes ámbitos como la defensa de la lengua valenciana, los colectivos más vulnerables -como los menores no acompañados o la población inmigrante- o la lucha contra el cambio climático. Poco después de conocerse el pacto entre derecha y ultraderecha, que permitirá sacar adelante unos presupuestos temporalmente suspendidos por la DANA del pasado 29 de octubre, la formación de Abascal ha celebrado la postura adoptada por los populares reconociendo que el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, "rectifique y reconozca que Vox tiene razón cuando dice basta al Pacto Verde y a las políticas que fomentan la inmigración ilegal, motivo por el que abandonamos la Generalitat" y que se muestre abierto "a negociar unos presupuestos que sean buenos para la Comunitat Valenciana y para la reconstrucción que tanto urge en las zonas devastadas económica, social y moralmente por la gota fría". Sin embargo, al margen del mero acuerdo que va a posibilitar desatascar las cuentas autonómicas, lo cierto es que la letra pequeña del pacto dibuja un panorama poco esperanzador para aquellos que luchan por los derechos de la población vulnerable, para la lengua valenciana o para el Pacto Verde europeo. De hecho, entre las medidas planteadas por la ultraderecha de José María Llanos figuran "recortar de forma significativa el presupuesto de la Academia Valenciana de la Lengua", "recortar de manera significativa las subvenciones a la promoción del valenciano", "reducción significativa de las subvenciones a agentes sociales, chiringuitos ideológicos y de igualdad", "eliminar todas las partidas destinadas a Agenda 2030 y Desarrollo Sostenible" y "suprimir todas las tasas derivadas del Pacto Verde". Entre otras cosas, en lo referente a la defensa de los derechos humanos y población inmigrante, la formación de Abascal ha adelantado que eliminará el convenio con la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA), añadiendo que "la Comunidad Valenciana no aceptará ni un 'mena' más". En este ámbito, el jefe del Consell se ha pronunciado defendiendo las medidas de Vox y acusando al Gobierno central de la población inmigrante de la autonomía. "Coincidimos con Vox que ha manifestado su rechazo a la política migratoria del Gobierno central en todo momento. Es evidente que la inmigración ilegal masiva necesita nueva política a nivel nacional y europeo. Necesitamos acelerar con urgencia las expulsiones de los inmigrantes ilegales", ha sostenido Mazón. Por su parte, el secretario general de Vox, Ignacio Garriga, ha señalado la intención de que el dinero hasta ahora destinado a la cooperación al desarrollo se derive ahora a la "reconstrucción" de la vida en la Comunitat Valenciana tras el paso de la DANA y solo si "queda algo" en esa partida, que se destine a "contener la inmigración ilegal, que no salga de las costas"...
